CAP 42. NADDOD (parte I)

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  -Buenos días estrellitas

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-Buenos días estrellitas. Naddod les dice "hola"- murmuraba de buenas Brutacio cuando amaneció

-¿Sabes que antes de que nos vayamos tenemos que catearlos?- se burló Heather al notar el buen humor de los gemelos

-Bien Brutos, contra la pared- les ordenó Patán comenzando a esculcar sus bolsillos sacando toda clase de objetos y metales

-Me siento hurtado-

-Hora de partir-

***

Después de un poco de tiempo volando, Astrid respiró profundo, Naddod estaba a nada de estar presente, el clima era aún peor, se acercaban más al círculo polar y tras la tormenta, respirar sin que se te helaran los pulmones era casi imposible.

-Estamos por llegar- anunció la ojiazul

-Astrid muévete a Colmillo, para que guardes más calor- le ordenó Hipo al ver el estado tan debilitado casi al borde de la hipotermia de Astrid

-¿Necesitas un asiento libre preciosa?- le invitó Patán mientras coquetamente palmeaba su silla de montar

-Primero me congelo- respondió con una mueca la ojiazul

-Y yo que pensé que la Isla Glaciar era fría- decía mientras los dientes le castañeaban a Brutacio

-Quiero entender, si Astrid es mitad berkiana y mitad de Naddod y prácticamente creció aquí, ¿Por qué tolera menos el frío que todos nosotros?- preguntó Patapez

-En un momento lo verás- murmuró Astrid dando un profundo respiro.

Cuando terminó de decirlo, una luz amarilla cegó a todos los viajeros, después de un momento, cuando pudieron adaptarse vieron que frente a ellos había una isla enorme rodeada por un halo de luz, casi divino, protegiendo al lugar.

Construcciones elegantes, lejanas de las hechas de madera que los clanes tenían, una vegetación envidiable y adornada con flores y árboles frutales que no conocían, el mar que rodeaba ese lugar era de un color turquesa y arenas blancas. Ni en sus pensamientos más locos, pudieron sopesar la belleza y perfección del lugar.

-Naddod- susurró el impactado Hipo, mientras sentía que su cuerpo comenzaba a recibir el calor que la luz emanaba.

-Los antiguos dicen que Naddod fue el favorito de Freya y ella los bendijo dándoles un pedazo del sol para que sobrevivieran a las temperaturas del límite del mundo- explicó Astrid

-No puedo creer que esto fue alguna vez un clan- dijo sorprendido Patapez

-Supongo que es la diferencia entre gastar tus recursos para la guerra o para tu progreso- respondió el castaño -¿Qué hay de los dragones?-

-No tengo idea, sé que Naddod los respetaba, y hasta cierto punto veneraba, pero poco contacto tuvieron con ellos, supongo que al no tener que lidiar con ellos no los conocen- contestó Astrid – supongo que tendremos que aterrizar para averiguarlo-

LA ÚLTIMA VALKIRIA (Remaster)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora