Another Song-Bughead

Veintiuno

~Another Song - Bughead~

Comenzó a despertar. Los rayos del sol comenzaron a filtrarse a través de las cortinas y gracias a el maravilloso clima del pueblo, el calor comenzó a hacerse presente en su piel.

Por supuesto que no ayudaba el cuerpo a su lado que lograba que la temperatura aumentase en su cuerpo.

"Un momento... ¿Quién está durmiendo a mi lado?" Fue la pregunta que hizo que abriese los ojos rápidamente.

El rostro de Jughead se encontraba a solos centímetros del de ella.

Contuvo un grito.

El chico dormía plácidamente a su lado, abrazándola por la cintura. Ella se revisó rápidamente comprobando que estaba vestida con tan solo una camisa del pelinegro. Y él estaba desnudo. O al menos de su torso,  lo demás estaba cubierto por la sábana que ambos compartían.

Ni siquiera era su habitación.

Con cuidado, se aseguro de colocarse de pie sin despertar al chico. Soltó un suspiro al darse cuenta que si llevaba ropa interior. O al menos la mitad, pues pudo divisar su sostén tendido en el suelo.

—¿Qué mierda, Betty? — se regañó a su misma mientras un pequeño dolor estalló en su cabeza.

Comenzó a buscar su ropa por la habitación, mientras intentaba recordar que demonios fue lo que pasó la noche anterior.

—Oh, no...— abrió la boca sorprendida al ser invadida por sus recuerdos.

— Oh, sí...— respondió Jughead desde la cama con una sonrisa.

...24 horas antes...

Archie bajó corriendo las escaleras yendo directamente a esconderse en el cocina. Todos lo estaban.

La mayoría luchaba por contener la risa que amenazaba por abandonar su garganta. Betty por otro lado, luchaba por no devolver la penetrante mirada que el pelinegro de al lado le daba.

Jughead apenas y se había apartado de ella la última semana. Siendo el chico más atento con ella, ayudándola en todo lo que necesitase, convirtiéndose en su mayor admirador, regalándole varios obsequios y sobre todo, siguiéndola a todas partes.

Se sentaba al lado de ella a la hora del almuerzo, se quedaba despierto el tiempo en que ella ensayaba sus líneas, la ayudaba a mejorar sus notas en las canciones... era realmente encantador.

Lo cual la volvía un poco loca. Ella no podía creer que realmente estaba viviendo aquello. Que Jughead estuviese haciendo todo eso por ella la confundía.

Pero admitía que le gustaba.

Por otro lado, Laurie se encontraba al otro lado de ella, (bajo la mesa) dándole pequeños empujones con su cuerpo, logrando que ella se estrechase aún más al lado de Jughead.

— ¡¡Archie Andrews!!— la voz de Kevin les puso a todos alertas. — Esto no es gracioso, devuélveme... — entro a la cocina hecho un manojo de nervios.

—¡¡Sorpresa!!— gritaron todos al unísono logrando espantar al Ojiverde. — Feliz cumpleaños a ti... feliz cumpleaños a ti...— cantaron todos.