Cambios

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Ya habían pasado algunos varios meses en donde Arata se adapto al nuevo ambiente, sus días pasaban con algo de  tranquilidad y risas, jugaba con sus amigos, aprendia cosas nuevas, hablaba con ¨Aki-chi¨ y lo mejor de todo es que siempre estaba su padre para llevarlo a casa. 

La parte mala es que Yuko prácticamente le agarro manía y comenzó a fastidiarlo, antes era raras veces, ahora es casi todos los días, su padre se dio cuenta cuando una mañana le dijo que ya no quería ir al kinder,

Pero algo cambiaría el rumbo de su vida, tal vez en su momento no lo considero importante pero si lo era. 

En el jardín del kinder se podía ver a muchos niños jugando, un grupo jugaba a las escondidas, otro a las atrapadas y entre otros tantos juegos.

Nuestro protagonista se encontraba en una esquina dibujando a su amigo peliblanco, mientras el nombrado estaba en una batalla con sus figuras de acción de algunos héroes top.  

En una esquina alejada se encontraba Yuko esta llevaba tranquila toda la semana, por alguna extraña razón andaba en son de paz -normalmente fastidia de vez en cuando a algunos niños que no se saben defender o no los deja jugar con ella- , mirando a todos sus compañeros de aula buscando a quien molestar. De pronto fijo su vista en el albino que jugaba tranquilo, sonrio con malicia ya tenia a su presa.

Llamo a sus ¨guarda-espaldas¨ estos eran unos niños rellenitos con caras comunes y nada muy llamativo, estos 2 niños eran fieles seguidores de Yuko,decían que adoraban a la niña más bonita.

A cosas de niños, ojala cuando cumplan 15 se den cuenta de lo vergonzoso de sus acciones, pero bueno ese no es el caso.

Yuko mando al par de niños a por el peliblanco, su plan era simple engañarlo, jugar un rato y luego votarlo. 

—hey tu niño de pelo bla-blanco —balbuceo un poco el niño— Yuko te invita a juegar* con ella, a los héroes.

—No, gracias pero quiero quedarme junto con Arata, estoy jugando con el —mintio el de ojos rojos—, sera para la próxima.

Los niños sorprendidos se fueron corriendo para contar lo ocurrido a su "Reina", esta al escuchar lo sucedido enfureció, comenzó con sus rabietas -ya habituales- se tiro al piso mientras gritaba (o mas bien chillaba) que nadie se le podía negar nada.

—Yuko, di-digo reina Yuko, el de pelo raro menciono que jugaría con tu, digo usted porque estaba con Arata —dijo con una fingida indignación y sugirió con una sonrisa algo  torcida— Reina, debería enseñarle que nunca se le debe negar algo.

La caprichosa niña dejo de chillar en el piso y se paro deprisa, un plan en su infantil pero retorcida mente se estaba creando. Si lo que se interponía era ese niño de ojos raros, tendría que hacer que se arrepienta.

Se dirigió con paso decidido al azabache de ojos azul-celeste y miro como que este tranquilo dibujaba.

—OIGAN TODOS NO SE JUNTEN CON ARATA, ES UN LADRÓN ME ROBO MIS LAPICES DE COLORES Y LE ESTA DICIENDO COSAS FEAS DE MI A MI AMAGO AKI, NO LO DEJA JUEGAR* CONMIGO, —la niña tomo aire y siguió con su acusación fingiendo llantos— NO SE JUNTEN CON EL, ES UN LADRÓN Y MALO, MI MAMÁ DICE QUE LOS QUE ROBAN SON VILLANOS, EL LO ES—

Arata estaba paralizado, no podía creer esto, pero no se quedaría  callado, su padre decía si eres inocente demuéstralo, si tienes algo que decir dilo.

—MIENTES, en primer lugar estos colores son míos, tienen mi nombre escrito en ellos, si quieres puedes leerlos, en segundo lugar yo nunca hablaría mal de alguien, por mas que te negaste a ser mi amiga yo nunca hablaría mal de ti —«es  una gran vergüenza esto, nunca robaría nada» pensó— , Aki-chi fue amable y rechazo tu oferta de juego porque a el le gusta jugar a los héroes con sus muñecos y porque yo lo estaba dibujando —«otra vez con su odio hacia mi, papá ayuda»— y yo no soy un villano. 

La niña al verse arrinconada y sin nada que refutar, hirvió en cólera, prácticamente todo lo que le dijo se resume en "eres ridícula por mentir de esa manera" o eso fue lo que interpreto.

Sintió que la punta de sus dedos se calentaban lentamente, quemaban tanto que soltó un grito.

Arata preocupado se acerco a ella, al tocar sus manos sintió como es que estas estaban muy calientes, por lógica las retiro.

La niña aun enojada aprovecho la poca distancia y agarro los hombros de Arata y clavo sus uñas con fuerza, el azabache grito al sentir como algo caliente se metía en su piel, sus gritos  alertaron a las profesoras, que corrieron al rescate de su alumno, llegaron viendo como la niña parecía no querer soltar al contrario.

—YUKO DEJA A TU COMPAÑERO AHORA, ES UNA ORDEN —grito desesperada Jin— PARA LO ESTAS LASTIMANDO

—jaja ahora todos sabrán que... —dirigió su mirada a los demás niños— nadie debe contradecirme, ahora que tengo mi kosei seré mas poderosa, yo la futura mejor heroína que ese idiota de All-

La profesora ya enojada, le tapo la boca y le dio un empujón para que sacar las -ahora garras- de fuego de los hombros del pequeño, que lloraba y daba gritos de dolor.

—¡Llamen a ambos tutores y a una ambulancia, rápido!— ordeno los demás docentes—  Dios, esto es terrible

Arata fue llevado al hospital junto a su padre que parecía querer cortar cabezas, su madre se quedo para arreglar el asunto en el kinder junto a los padres de la implicada. La señora Alice da mucho miedo enojada y aunque no se note en su rostro, toda su alma grita por ir a ver a su pequeño y dejar algunas cuantas almas sin cuerpo. Pero hay que ser civilizados,si eso.

Arata, el estaba mas que deprimido. Durante las siguientes semanas no asistiría al kinder, no más amigos, no más cosas nuevas, no más momentos con Aki.

Se sentía realmente fuera de sí. 

Hola, me vino la inspiración, pero quedo muy raro...meh .Las palabras que llevan, "**" lo escribí a propósito a veces se me olvidan que aun son niños y bueno eso. 

Gracias por leer. UwU 

-Belial- 

ARATA || BNHA (EDICIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora