todo cambia | trueno

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Me jugaba en contra saber que el era mucho mas grande físicamente que yo, pero me jugaba a favor el ir a boxeo durante mucho tiempo, sabia defenderme.

Cuando lo tuve bastante cerca le metí una piña con la derecha, lo empuje haciendo que caíga al piso y cuando ya estaba tirado, me subí encima de el para empezar a pegarle en la cara.

- ¡¿Que mierda le estabas por hacer?!- volvi a gritar mientras le pegaba- ¡Sos un hijo de puta, un enfermo!

-¡Para Matu, Lo vas a matar!- me grito Roma.

Sentí como alguien me sacó de encima de él.

- Te tendría que matar hijo de mil puta- le dije y vi que Dani se acercó a el, que estaba casi inconciente en el piso.

Saque los brazos de Valentin de mi cintura y me acerqué a Roma, ya se había puesto su remera, pero estaba en un estado de shock mientras sus lágrimas caían.

- Roma... Mírame, amor- dije y vi cómo lentamente llevó su mirada a mí, sin decir nada se acercó hundiendo su cara en mi pecho y yo rodeé su cintura con mis brazos.

A los minutos estaban la mayoría de los pibes, Valen los había llamado para que vuelvan.

Faltaban Cami y las pibas, que estaban terminando de pagar las cosas en el supermercado.

- Mauro sigue inconciente- dijo Dani y en mí mente solamente se me cruzaba el, ¿por qué no le pegue más fuerte, así se moría?".

- Ivo, Manu y Dani, agarran mi auto y lo llevan al hospital- dijo Valentin tomando las riendas del asunto- cualquier cosa, se metió en una pelea callejera y bueno ya saben, tiran cualquiera. Busquen el documento de el y sus documentos, ya saben de donde sacar plata- ellos asintieron y desaparecieron de la habitación.

- Lit, baja y estaciona el auto de Mateo bien que quedó mal estaciónado- asintió y también desapareció de la habitación.

Quedamos Roma, Valentin y yo en la habitación.

El cerro la puerta y Roma me miró como pidiendo por favor que no diga nada.

- ¿Que pasó?, quiero explicaciones- pregunto Valen, miré a Roma la cual estaba sentada en la cama, sabía que seguía en shock por toda la situación, así que no me quedaba otra que hablar.

- El duki nos encontró chapando, nada más- dije y Roma me miró y asintió, como agradeciéndo.

- ¿Estas bien enana?- pregunto Valen sentándose al lado de ella, ella asintió y yo sabía que estaba rota por dentro.

(...)

Eran las cuatro de la madrugada, estaba dando vueltas en círculos sin poder creer todo lo que había pasado hoy.

A eso de las doce de la noche, me había ido de su habitación porque quería estar con sus amigas.

Por lo que me dijo Valentín, Mauro estaba internado ya que lo había dejado bastante mal, ojalá lo hubiera dejado peor al hijo de puta.

Salí a la terraza, el aire era fresco y me parecía raro, ya que en estas fechas es donde más hace calor.

Ví una figura femenina caminar por el patio, al principio me asuste ya que, ¿quien anda a esta hora deambulando por el patio toda vestida de blanco?.

Al observar su silueta pude ver a Roma con un cigarrillo en la boca, su pelo negro resaltaba mas en la noche y de eso no tenía duda.

Vi que caminó al costado de la casa, al estudio para ser mas específico.