Ciudad fortuna

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Envuelto en una gabardina café me adentro en la ciudad fortuna con un solo pensamiento en mi mente, "obtener poder", las calles de esa ciudad estaban desiertas, mi investigación previa a mi visita me indicaba que la ciudad no era una ciudad cualquiera pero aún sabiendo esto nada me detendría de mi investigación.

Al pasar por algunas calles logró llegar a la calle principal, donde a lo lejos puedo ver una iglesia "la orden de la espada eh.." , "¿adoran a un demonio como si fuera un dios?.." mis pensamientos son interrumpidos por muchos demonios que aparecen frente a mi con intenciones de ser asesinados por mi espada, sin avisar un demonio atrás de mí ataca con su brazo el cual es una cuchilla pero cosas cómo estás no son rivales para mi, esquivo su ataque pero mi gabardina sale volando dejando al descubierto mi cabello blando y mis ropas azules en un rápido movimiento ya me encuentro del otro lado de la calle y de los demonios apunto de cerrar mi espada y acabar con el demonio que me ataco, no dejo que reaccionen y uno a uno los voy cortando, lanzo la funda de mi espada a uno de ellos y como va atravesando demonios voy cortando para alcanzarla, las peleas con demonios tan débiles son cosas que me gusta aprovechar para practicar, mis movimientos son certeros y al momento de llegar a mi funda lanzo mi espada en giro para cortar a cada demonio de ahí y que regrese a mi para enfundarla matando a otros dos atravesados con mi funda, cuando desaparecen pienso "que aburrido" mientras arreglo mi cabello hacia atrás, antes de poder irme salen muchos más pero yo no tenía tiempo para estar jugando con ellos así que con un movimiento rápido los mato a todos solo para caer en la calle y guardar mi espada, "¿que es lo que pretenden exactamente?..", no entendía porque de repente llegaron tantos, algo me decía que esto no había sido algo espontáneo, algo o alguien sabía que estaba ahí, cuando caminaba hacia la iglesia mi gabardina café cayó del cielo hacia mi así que me la puse justo cuando las personas comenzaban a aparecer, fue una suerte tenerla así nadie me reconocería y en efecto nadie me noto solo una persona pudo verme y llevaba  un vestido rojo, pero en su momento yo no lo noté, mi mente solo podía pensar en poder y venganza, mi objetivo ahora era llegar a la iglesia, necesitaba saber que tanto sabían de sparda, supuse que como lo adoraban como a un dios sabrían historias o sucesos que yo desconocía, pasaría por la iglesia y tal ves me quedaría a algunas misas solo para obtener información.

En el momento en el que llegue a esa iglesia pude ver la estatua de sparda siendo construida justo enfrente de todas las puertas, habían asientos para máximo 4 personas en cada uno, pero no había nadie, al parecer por la construcción no había misa, entonces pensé ¿donde puedo conseguir información acerca de sparda y la orden de la espada?, concluí que la única información que podría conseguir es en libros y bibliotecas, tal ves si puedo escabullirme bien pueda hasta escuchar rumores, que aunque no sean legítimos podría investigar.

Ya en las calles de fortuna pude divisar varios locales pero algunos estaba cerrados y otros parecía que estaba por cerrar, ese lugar se miraba abandonado salvo por unas personas que se encontraban caminando con sus rostros cubiertos por esa capucha blanca característica de su religión.

Mirando un escaparate de un local de antigüedades pude ver un cartel que decía que habría una feria de libros en unas semanas, a mi no me interesaba eso realmente si no saber la localización de la biblioteca, al saber ya la localización me dirigí como pude a ese lugar, era mi primera ves en fortuna era difícil saber donde estaba, al momento de llegar a aquella biblioteca me dirigí al lugar donde estaba los libros viejos, algunos libros estaban en otros idiomas como latín o arameo antiguo, por el momento esos libros no eran una opción para mi, intenté encontrar algo que pudiera leer pero de repente un señor a lado mío que buscaba algún libro me dijo que podría traducirme algún libro, cuando lo vi, era un sujeto calvo con un cicatriz en su rostro y un traje color negro, al pensar que era un simple humano decidí solo dejarlo pasar pero insistió "disculpa si interrumpo tu búsqueda es solo que pensé que necesitarías ayuda, se algunos idiomas y me gustaría ayudar" su vos denotaba cierto todo siniestro, como si se esforzara por ser amable, no me confíe en él pero creí que si sabía el idioma no había problema con aprovecharme de él, si resultaba ser una molestia lo mataría sin pensarlo dos veces "acepto tú ayuda" le entrego el libro en latín y estoy dispuesto a salir del lugar hasta que me pregunta mi nombre " ¿cuál es tu nombre?, tengo que buscarte cuando termine de traducirlo", me limito a contestar "vergil" dispuesto a irme me contesta "me llamo arkham".

Lo único que pude encontrar en esos libros fue que la orden de los espada tenían un cuartel y era una organización que trabajaba exterminando demonios para proteger a la gente del pueblo, pero si en el pueblo apenas y hay personas, la gente de aquí no se ve muy segura, eso no me importaba pero se me hacía extraño que siendo una organización solo para el cuidado de la población y tan grande como dicen los libros no puedan hacer su trabajo bien.

El pasado de vergil Donde viven las historias. Descúbrelo ahora