Leeteuk se acerco a su sobrino que se encontraba sólo sentado jugando con el nuevo regalo que le habían obsequiado, era 15 de Octubre, él y Dara estaban cumpliendo 13 años.
— ¿Qué haces, HaeHae? —Se sento a su lado asustando al niño.
— Nada, tio —Contesto mirándolo — ¿qué haces aquí? —.
— Te vi y pensé...mmmm se mira muy sólo, que tal si me acerco y le llevo...galletas —Saco la bolsa con galletas de chispas de chocolate.
— ¡Galletas! —Los ojos de DongHae se iluminaron y tomo el paquete de galletas para luego abrazarlo — gracias tio...—
Leeteuk sonrio y lo abrazo con fuerza, mientras pensaba en que su pequeño estaría cumpliendo también 13 años en ese momento.
— ¡DongHae! —El grito de Sooyeon les hizo separarse. La pelinegra tomo al pequeño del brazo, y lo abrazo mirando a su hermano — ¿qué crees que haces abrazando a mi hijo? —
— N-nada —Leeteuk carraspeo tratando de quitar el nudo en su garganta — sólo...yo lo vi sólo y...me parecio que...—
— No me importa lo que te parecio —Sooyeon le interrumpio — sólo aléjate de él, Leeteuk —Advirtio —...DongHae es mi hijo no el tuyo, tu hijo esta muerto, y nada lo va a cambiar...asi que deja de querer sacar tu dolor de querer ser padre con él —
Leeteuk no dijo nada solo miro como Sooyeon se llevaba lejos de él a sus sobrinos, su corazón latia contra su pecho y algunas lagrimas bajaban por sus mejillas.