Capítulo 34

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Cuando volví a abrir los ojos, ya estaba brillante afuera. Sentí a Kara acostada a mi lado e inmediatamente me di la vuelta para despertarla. Era domingo, preparaba el desayuno para nosotras. Quizás podríamos pasar por el parque más tarde. Quizás podríamos llamar a Sam.

Kara parecía contenta, pero algo era diferente de lo habitual. Por lo general, ocultaba su rostro tan pronto como la habitación se iluminaba. A veces, incluso se ponía la máscara para dormir para que ningún molesto rayo de sol pudiera interrumpir su valioso sueño.

-¿Kara?- susurré. -Kara, despierta.

Mi corazón se detuvo.

No.

-¡Kara!-grité, agarrando la mano de mi esposa. Pero estaba fría. Demasiado fría.

-No. No no no no no por favor, no. – dije mientras me ahogaba con las lágrimas

Busqué desesperadamente mi teléfono, mis manos temblaban. Tengo que llamar a Lucy. Debería llamar al 911.

Cuando finalmente lo encontré, presioné nerviosamente el botón de inicio y vi un mensaje en mi pantalla. Un mensaje de Kara

La abrí lo más rápido que pude, todo mi cuerpo temblaba, las lágrimas dificultaban la lectura.

"Lee, por favor no llores. No llames a nadie. Aún no. Ambos sabíamos que tenía que suceder. Y lo quería de esa manera. Quería estar contigo. Por favor mira la carta que dejé dentro de nuestro álbum. Te quiero más que a nada."

Fue tan surrealista. Sollozos temblando a través de mí como hipo. Sin embargo, de alguna manera logré abrir el álbum que estaba junto a la cama. Se sentía como un cuchillo en mi pecho, pero me obligué a abrirlo, encontrando un par de hojas dobladas en el interior.

"

Hey, Lee

Si estás leyendo esto, significa que todo salió bien y finalmente somos libres. Ni siquiera sé cómo empezar a decirte lo increíblemente arrepentida que estoy. Lo siento mucho por lo que tienes que enfrentar ahora. Ni siquiera puedo imaginar lo que debes sentir ahora.

Lena, siempre me dijiste que pensabas que era valiente, pero ¿qué significa ser valiente? No es la ausencia de miedo, es enfrentar tus miedos, ¿verdad? Significa estar asustada pero aun así intentar seguir adelante y vivir tu vida al máximo. Y sí, eso es lo que hicimos. Es lo que hicimos juntas, Lee. Tú fuiste quien me ayudó a enfrentar esos miedos. Tú eres la razón por la que no me rendí, por qué el peor año de mi vida también se convirtió en el mejor año de mi vida.

¿Y sabes qué? Finalmente ya no tengo miedo. Tenía miedo de tantas cosas. Tenía miedo del dolor.
Miedo de estar sola.

De morir sola.

Y lo que más me asustaba era lo que todo eso te haría. Tenía miedo de dejarte atrás, causarte dolor, decepcionarte.

Pero te necesitaba en mi vida, cariño. Te necesitaba y tú estuviste ahí para mí, en cada paso del camino. Y sé que ahora me he ido y ya no puedo estar ahí para ti de la forma en que quiero estar. Pero tampoco tengo miedo de que no lo consigas. Porque sé que lo harás. Porque eres la persona más fuerte que conozco. La persona más valiente, hermosa y de buen corazón que he conocido.

Y siempre estaré contigo.

Te lo prometo.

Seré más que un pequeño tatuaje en tú meñique o un anillo en tu dedo. Seré más que una simple imagen en tu pared. Estaré en todas partes a tu alrededor.

Y podría llegar un momento en el que ya no me necesites. ¡Un momento en el que dejes que alguien más te amé!

Llegará un momento en el que tendrás hijos y ambas sabemos que serás una gran madre.

Un momento en el que podrás volver a ser feliz.

Pero no importa cuando llegue ese momento, cariño, no importa con qué frecuencia te sientas perdida en el camino, quiero que recuerdes que te amaba más que a nada. Si puedes, deja que esa sea tu fuerza.

Aférrate al pensamiento de que estoy en algún lugar, no sé dónde, y te cuidaré.

Y si necesitas llorar, desahogarte o hablar, háblame y te escucharé. Te lo prometo, te escucharé, ¿de acuerdo?

Esta noche, cuando dejemos de flotar linterna. ¿Sabes lo que escribí en el papel? Escribí 'por favor, déjame morir feliz esta noche'. Y ahora que estás leyendo esto, es exactamente lo que sucedió.

Lucy dijo que era cuestión de días antes de que las cosas empeoraran aún más. No quería dejar este mundo conectada a todas esas máquinas, sin poder hablar y decirte cuánto te amo. Cuánto te extrañaré.

Pero ahora puedo hacer todo eso. Y me quedo dormida junto a la persona más importante de mi vida. La mujer que me hizo verdaderamente feliz.

Recuerda siempre que te amé mucho. Con cada poro de mi cuerpo, cada pensamiento, cada latido y cada suspiro. Y tengo la certeza, de que incluso el último respiro de mi cuerpo fue tuyo.

Por favor, sé valiente. Hazlo por nosotras. Sé que puedes. Siempre he creído en ti.

Y por favor diles a Sam, y mi familia que los amo. No podría haberlo hecho sin la fuerza que todos ustedes me daban.

Cuida bien a Tiger y a nuestro libro de recuerdos. Quizás puedas terminar el último punto sin mí algún día. Quizás pienses en mí cuando visites Machu Picchu.

Te amo Lena. Nunca lo olvides. Te amé con todo lo que fui y con todo lo que tenía. Te amé y lo seguiré haciendo, hasta el último suspiro de mi corazón, e incluso después de que mi corazón se detenga, te seguiré amando a donde quiera que vaya. Tal vez incluso podamos amarnos en otra vida.

Gracias por ser mi final feliz

Con amor, tú esposa.

"

Dejé caer el teléfono. Miré a la izquierda. Miré a la derecha. Mi cara estaba mojada y mi cabeza daba vueltas.

Sin saber qué hacer, envié un mensaje de emergencia a Lucy y salí del apartamento sin zapatos.

La Sra. Davis estaba limpiando el pasillo cuando nuestras miradas se encontraron. Pude ver que la anciana no necesitaba preguntar qué había sucedido. Sus rasgos usualmente fuertes y fríos inmediatamente se volvieron suaves y dejó caer su escoba.

-Ven aquí, niña. Oh no... oh, ven aquí, cariño.

Luego me abrazó.

-No se siente así en este momento, pero estará bien. Vas a estar bien.

Mirando hacia atrás, nunca había esperado que mi vieja vecina gruñona, de todas las personas, fuera el que me consolara en ese momento. Me lo había imaginado un millón de veces. Dónde pasaría. Cómo y cuándo. Que haría yo. Qué diría yo.

Nunca me lo había imaginado así.

Sabía que iba a suceder y entendí que era como Kara lo había querido. Su último día en la tierra había sido feliz. Su última noche junto a la mujer que amaba. Pero no importaba cuánto tiempo tuviera para prepararme para esto, no importaba. Nadie podría haberme preparado para el dolor que sentí en este momento. Por el terrible vacío que de repente llenó mi corazón.

Era una sensación tan poderosa que podía romperte en segundos.

Pero superaría esto. Se lo había prometido.

Yo superaría esto por ella.

Por nosotros

The last breath of my heartDonde viven las historias. Descúbrelo ahora