El diablo ha puesto sus ojos en un mundano.
[Leer prólogo].
🕯Yoonmin.
🕯Mención de otros shipps.
🕯Capítulos de 1000 a 2000 palabras.
🕯Contiene: 39 capítulos + Final + Epílogo.
R A N K I N G S:
▪︎ #1 en Devil. 13/05/21▪︎
▪︎ #97 en Paranormal. 11/0...
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-Tienes que irte un tiempo, él realmente va a terminar volviéndose loco.-El rubio guardó la libretita roja que usaba para evaluar a Jimin dentro del cajón y se giró hacia su jefe. Hacia su dueño.
-Obvio que tengo que irme, pero no por mucho, no puedo estar mucho tiempo sin verlo. Lo sabes, Joon.-El demonio pestañeó y ya no vio a su jefe delante de él, sino que sintió su presencia detrás suyo, así que volteó viéndolo ahora sentado con sus piernas cruzadas en la silla de los pacientes.
-Concidera irte al menos por un mes, que des-
-¡No me mandes!-La voz grave del diablo resonó con eco en sus oídos, tan fuerte que el demonio lo pudo evitar apretar fuerte los ojos por el dolor en sus oídos.
-Si señor.-Con una pequeña venia desapareció del lugar.
Yoongi se quedó unos minutos mirando el lugar y aspirando el dulce aroma que Jimin había dejado en el lugar; Miedo, angustia, enojo era lo que se percibía en el ambiente y él sabía perfectamente quien emanaba aquellos sentimientos.
Ah...Estaba tan malditamente obsesionado con el pequeño chico.
Y el pequeño chico lo odiaba tanto a él.
Se odiaba de una manera impresionante por no poder tener la capacidad de desparecer de aquel lugar y dejar por fin tranquilo al humano, dejarlo vivir sin tener aquellas sensaciones que el diablo sabía que le otorgaba.
No se pudo resistir a unir su alma a la del chico. Anhelaba poder sentir todo lo que él otro sentía de tal manera que su corazón también se volviera añicos al igual que el del menor cuando él aparecía a lo largo del día o cuando no podía dormir por el fuerte egoísmo del arcángel al pensar solo en su satisfacción cuando se quedaba horas y horas en las noches a simplemente a observar a su ángel dormir apaciguadamente.
Pero el diablo era irremediablemente egoísta.
Quería decirle que el diablo, el ser más malo y asqueroso sobre la faz de la tierra -título otorgado por un estúpido sin cerebro que escribió la biblia- estaba irremediablemente obsesionado con su hermoso y apolíneo rostro.
Pensó en Taehyung. Su querido discípulo era el que se encargaría de preparar a Jimin de alguna forma, de informarlo e introducirlo en el tema de las divinidades, de las bestias y los malditos como él. Ese había sido el trabajo que, con mucho cuidado y tiempo, le otorgó, con el fin de que su pequeño humano alguna vez creyera en su existencia, en su poder, en su amor. Porque...
¿Que pasaría si Jimin nunca creía y realmente se terminara volviendo loco?
