El diablo ha puesto sus ojos en un mundano.
[Leer prólogo].
🕯Yoonmin.
🕯Mención de otros shipps.
🕯Capítulos de 1000 a 2000 palabras.
🕯Contiene: 39 capítulos + Final + Epílogo.
R A N K I N G S:
▪︎ #1 en Devil. 13/05/21▪︎
▪︎ #97 en Paranormal. 11/0...
ESPERO QUE LES GUSTE, SI ES ASÍ COMENTEN, NO HAY COMENTS CASI 🥺
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-Bu-buenos días.
La chica rubia y de hermoso rostro alzó la vista y los miró a los ojos, sonriendo en cuanto lo enfocó.
-Buenos días, cariño. ¿En qué puedo ayudarte?-Jimin comenzó a jugar con sus dedos nervioso.
-Yo... me llamo Park Jimin y tengo una cita con el doctor Choi.-La muchacha asintió y sus ojos viajaron hacia la computadora frente a ella.
-¿A que hora tenías cita?-Preguntó y empezó a teclear algo.
-Oh no, no es una cita médica, señorita.-La frenó y ella lo miró confundida.-Vengo de parte del director de la universidad.-La chica está vez lo vio sorprendida.
-Sí, recuerdo que el señor Choi me comentó algo sobre eso, ¿Por qué no me sigues?
La chica ciento a caminar delante y él automáticamente comenzó a seguirla, no muy de cerca. Y hubiese ido todo el camino tranquilo si no fuera por el aliento tibio que de repente acarició su oreja, siendo acompañado por la grave y sexy voz del arcángel.
-Hola, ángel.
El menor pegó un pequeño salto en su lugar y llevo su mano a su pecho por la sorpresa, pero siguió caminando, sabía quien era.
-Buenos días.-Dijo y el otro sonrió, Jimin lo miró extraño.-¿Ahora por que sonríes?
-Porque estoy empezando a amar esas dos palabras "buenos días".-Dijo pausado y tratando de disminuir su sonrisa mordiendo sus labios, acción que Jimin no pudo evitar ver y sonrojarse.-Solo por el simple hecho de que me lo dices tú todos los días.
Jimin miró a sus pies y no respondió, se negaba a que el otro viera como su rostro estaba totalmente pintado de rojo por sus palabras, sin embargo algo que no podía rehuir era que el mayor escuchara los descontrolados latidos de su corazón.
-¿Vas a entrar conmigo?-Preguntó bajito, no sabía ni si siquiera estaba llegando al lugar en donde lo esperaban.
-¿Quieres que te acompañe? Igual solo me podrás ver tú.-Lo pensó unos segundos, segundos en los que por lo visto llegaron a su destino.
La chica tocó suave y abrió la puerta tras eso, hablando por lo bajo unos segundos y invitando al pelinegro hacia dentro. Jimin miró rápidamente hacia atrás y le asintió a su acompañante, sacándole una sonrisa.
Ambos notaron al consultorio y un señor de aproximadamente sesenta años los esperaba sentado detrás de un muy arreglado y limpio escritorio.
-Buenos días, señor Choi.-Dijo, seguido de una pequeña reverencia.
-Buenos días, muchacho. Toma asiento, por favor.-Jimin hizo lo que le pidieron y vio disimulado como Yoongi tomaba asiento en uno de los sillones del fondo.-El señor Kim me ha hablado bastante bien sobre ti, aunque pensé que ibas a rechazar la propuesta, ya que fue hace tanto tiempo.-Le explicó.
