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" Pequeña familia "

Después de estar abrazados en el coche por unos largos minutos los dos decidieron que era mejor entrar a casa y comerse el pastel, lo que tenían planeado desde un principio antes que toda esa mierda sucediera. KyungSoo le dio un último beso a JongIn y abrió la puerta, no queriendo pasar más tiempo en ese pequeño lugar lleno de feromonas que demostraban tristeza y que le pertenecían a JongIn, no era porque le parecían desagradables o algo por el estilo, al contrario estaba muy feliz que JongIn tenga tanta confianza con él hasta el punto de mostrarse débil en su presencia, pero simplemente oler esas feromonas le producían un gran dolor en su corazón.

Tanto él como su omega odiaban que JongIn estuviera triste.

Aún con su cabeza hecha un caos junto con sus emociones, tomó los pasteles que estaban en los asiento de atrás y espero a que JongIn estuviera listo para abandonar el auto. A estas horas todavía había un poco de gente pasando por el lugar y aunque fuera poco probable que alguien los hubiera visto, estaba la posibilidad que sí JongIn salía así de alterado podrían llegar a oler sus sentimientos y empezar a juzgarlo, y al parecer el alfa quería evitar eso.

No es como si JongIn fuera una persona muy conocida y se podría armar un gran escándalo si alguien llegara a verlos juntos, pero algunas personas todavía lo reconocían por el hijo menor de la familia Kim y al parecer el alfa no quería arruinar la reputación de su familia, después de todo los Kim eran muy conocidos por manejar una larga cadena de hoteles y ser los embajadores de una marca de ropa que destaca entre la gente de gran estatus (Chanel), la familia también destacaba por las tres hermanas Kim que se dedicaban al arte, literatura y danza, respectivamente. Mientras el menor de los Kim's poco a poco comenzaba a introducirse en el mundo de los negocios y espectáculo, queriendo seguir su sueño de bailar ballet.

KyungSoo todavía recordaba cuando supo de toda esa mierda y casi le agarraba un ataque de pánico; casualmente le preguntó a JongIn a que se dedicaba en un intento de querer conocerlo más, pensaba que tendría un trabajo normal que no destacaba mucho pero que pagaran bien, después de todo el alfa apenas tenía dos meses de haberse graduado de la universidad. Grande fue su sorpresa cuando JongIn le dijo que, por lo mientras, se dedicaba a ir a cursos de ballet y ayudar a su padre en el manejo de los hoteles que pronto iba a heredar. El omega se puso pálido cuando investigó por internet la susodicha familia Kim.

Su pareja destinada era un jodido alfa que cagaba dinero, y él ni en cuenta. KyungSoo todavía no podía asimilar esa información. 

Salió de sus pensamientos cuando JongIn por fin bajó del auto al parecer un poco más tranquilo, le sonrió y a pasos lentos se acercó a él. KyungSoo simplemente se quedó ahí parado viendo como el alfa se acercaba a él, pudo apreciarlo un poco y se reprendió mentalmente por ser un tonto y no darse cuenta que JongIn no pertenecía al montón, parecía un dios griego más que listo para enamorar a cualquier sin siquiera tener la intención de hacerlo. Su caminata era lenta pero elegante, como si estuviera en una pasarela, y sus mejillas se sonrojaron cuando se imaginó a JongIn posando sólo para él.

Ugh, que pervertido.

-¿Estás seguro que debería entrar?- le preguntó el alfa un poco inseguro cuando llegó a su lado, el pelinegro salió de su ensoñación y lo miró confundido ante su pregunta.

•Dulces Mentiras | 🌻 KaiSoo. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora