17.

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Narro yo.

Jungkook había pasado las últimas semanas pensando en una manera de escapar, y justo ahora tenía casi todo listo, el único problema es que todo parecía ser muy rápido.

Sería a más tardar en cuatro días, y aquello le aterraba, pues la idea de que los encontraran y le hicieran daño a Taehyung y Namjoon lo destrozaba y carcomía por dentro.

Estaba tan inmerso en sus pensamientos que no escuchaba nada de lo que su mayor decía, quien empezaba a notarlo.

-Kookie~ ¿Por qué no me escuchas?-

Dijo cruzando sus brazos y haciendo un puchero, fingiendo enojo.

-Perdón Taetae. ¿Qué me decías?-

Acomodó mejor al rubio sobre su regazo, teniendo la oportunidad de ver su rostro mientras abrazaba su cintura, dejando suaves caricias.

-Que siento que a Jimin le llama la atención Nam. Cuando me llama no deja de hablar de él.-

-Ya veo. Creo que puede ser posible que esos dos en un futuro se gusten o algo así. Hablan mucho últimamente, y notó esas sonrisitas de Nam cuando habla con él.-

-Ay, qué lindo.-

Dice Taehyung con esa característica sonrisa, emocionado ante la idea de ese par juntos como pareja.

Jungkook solo guardaba silencio, viendo fijamente al menor sonreír, siendo contagiado al instante. No podía permitir que nada le pasara, y aquel pensamiento le recordó su plan de escape.

El mayor notó la repentina seriedad en el rostro del azabache, por lo que tomó su barbilla, sacándolo de su ensoñación.

-Jungkookie ¿En qué tanto piensas?-

Preguntó Taehyung, observándolo tan fijamente que parecía querer leer algo en sus ojos.

-No es nada bebé, solo me siento algo cansado.-

El rubio no sabía si sentirse emocionado ante aquel dulce apodo o preocupado, pues sabía que mentía con lo de sentirse cansado, sin embargo lo dejó pasar, pensando en que tal vez en un futuro, cuando estuviera listo, se lo diría.

-Está bien, vamos a dormir entonces, ya es algo tarde.-

Acarició su mejilla y se acercó para dejar un suave beso en sus labios, que no tardó en convertirse en uno lento y pasional, casi desesperado, tanto así que les robo el aliento, haciendo que sus respiraciones se agitaran de a poco.

-Me gustas mucho, Taehyungie.-

Dijo con una sonrisa boba entre sus labios.

-Tú me encantas, Jungkookie.-

Sus labios volvieron a unirse de forma lenta y cariñosa, mientras sus manos dejaban leves caricias en el poco de piel expuesta, sintiéndose maravillados ante la sensación de calidez tanto en sus cuerpos como en sus corazones.

De manera cuidadosa el menor levantó a Taehyung de su regazo, dejándolo sobre la cama, cortando el beso cuando el aire empezó hacerse escaso.

-Duerme bien, bebé.-

Dijo con una sonrisa antes de dejar un pequeño beso en la mejilla contraria para luego ubicarse en su lugar de la cama, dispuesto a dormir.

-Igual tú, Kookie.-

El menor rodeó el cuerpo contrario con sus brazos como ya era costumbre al dormir, dejando que el rubio se acurrucara en su pecho, pudiendo apreciar los calmados latidos del corazón del azabache. Se sentía tan relajado que no tardó en caer dormido, al contrario de Jungkook, quien todavía se atormentaba y angustiaba ante la idea de que su mayor saliera herido al intentar escapar.

I just want a normal life [KookTae]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora