Jimin se encontraba completamente concentrado y su mirada no se aportaba ni un segundo de aquel joven, pues estaba controlando cada movimiento de Hoseok, quién arropaba a su pequeña cachorra. Hasta que el rubio recordó que había olvidado las medicinas de Sook en la cocina
-Hoseok puedes traerme la medicina diluida en medio vaso de agua, por favor -pidió al nombrado
Es así que el omega pelinegro salió de la habitación con dirección a la cocina
Los días seguían pasado y con ellos el omega de ojos azules había puesto a prueba al pelinegro y hoy fue el primer día en el que le permitió tomar en manos a su pequeña SunHee. Y observó sorprendido como la niña estaba bastante cómodos con él
Sus pequeños cachorros parecían haber recibido muy bien al joven. Por lo que, por el momento estaba menos desconfiado
Pocos segundos después de que el pequeño de que el joven salió entró Rose
-Mi señor -saludo con una sonrisa y una reverencia
-¡Rose! -dijo alegré el rubio y sin pena corrió a abrazarla -Te dije que solo me dijeras "Jimin", no son necesario los honoríficos conmigo -sonrío, separándose de la fémina, pero manteniendo el contacto, ya que sus manos estaban sobre los hombros ajenos
-Lo siento, es el protocolo -sonrío con cariño la joven -No sabes como haces falta en el Harem, siempre te lo repitió, y a pesar de que los años pasaron; te extraño, pero si eres feliz esta bien -se sincero la joven
En ese momento la expresión de Jimin paso de ser una de nostalgia a una de tristeza. Aunque, intentó disimularlo con una leve sonrisa, que no logró su cometido
Al observar aquella expresión la fémina dudo sobre darle la noticia o no, pues todas las personas del Harem quieran o no conocían la situación que estaban a atravesando el par de destinados que tenían como líderes. Pero, al final del día las órdenes eran órdenes
-Jimin, el Emperador me mandó un recado para ti -habló con un poco de tristeza, pues el nombrado intentaba con todas sus fuerzas colocar una expresión neutra, sin lograrlo del todo
-¿Qué necesita nuestro Señor? -cuestionó el rubio, con la esperanza de que no fuese su presencia, porque a pesar de estar decidido en dejarlo de lado a el lo afectaría verlo en esos momentos
-Él decidió que seas tú quién lo acompañe en su retrato -informó la pelirosa
El omega por unos guardó silencio, meditando su respuesta
-La verdad es que agradezco la oportunidad, pero no puedo, tengo que cuidar a mis pequeños y como para verlo posar por horas -finalmente respondió aquello que antes no hubiese podido negarse y sin más giró todo su cuerpo dando la espalda a la joven
-Creó que no me explique correspondiente, lo siento -se disculpó por el posible mal entendido y en ese momento la puerta de la habitación se abrió, dejando ver tanto a HaNeul y a Hoseok. Pero, aún así la joven continuó -Nuestro Señor quiere que tú aparezcas junto a él en el cuadro -habló un poco preocupada
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DEL OTRO LADO DEL PALACIO
FanfictionHan pasado aproximadamente quince años desde la coronación del Emperador "Jeon YoonGi". El bello omega de ahora treinta y tres años dio a luz a cuatro hijos, todos varones. Y actualmente se encontraba en estado de embarazo de un quinto. Sin embargo...