⚠️ ADVERTENCIA DE 🍋🍋🍋
Esta historia está ambientada en el mundo de alphas y omegas.
A excepción de que tiene toques de fantasía y algún que otro cambio para darle emoción a la historia.
Te encuentras en el mundo normal en que es común ir a clase...
Le dedico este capítulo a @Emilykiara123456 por su cumpleaños que fue ayer, espero que todo te haya ido bien y hayas pasado un gran día. Muchas felicidades ❤️❤️
Te despiertas por el suave canto de los pájaros que pian sobre las ramas de los árboles.
Al abrir los ojos lo primero que te encuentras es el hermoso rostro sonriente y sonrojado de tu Alpha, quien no deja de mirarte un poco avergonzado, pero feliz al mismo tiempo.
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Los recuerdos de la noche anterior se vienen a tu mente, lo que provoca que te un gran sonrojo que intentas ocultar con las sabanas blancas.
- Bueno días _______. – te saluda Kirishima con la voz a un adormilada –
Es música para tus odios escuchar su voz por la mañana, tan grave y sensual.
Acerca su mano a tu rostro y baja levemente las sabanas que te cubren este para admirarte, desliza la yema de sus dedos por tu mejilla hasta acunarla con cariño.
- Siempre te ves hermosa por la mañana. – le alaga –
Te ríes levemente sabiendo que no es verdad, debes tener el cabello despeinado y seguramente has babeado la almohada, pero aun así él siempre te encuentra guapa sean las circunstancias que sean.
- Buenos días Eijorou. – lo llamas por su nombre con pudor –
Su sonrisa se amplia y se acerca a ti para darte un corto beso en los labios.
- Espero no haber sido muy brusco contigo, me...emocioné un poco. – sonríe apenado –
- Puede que un poquito al principio, pero aun así siempre eres amable, me alegro de haberlo echo por primera vez contigo. – confiesas –
- A mi también.
No podíais creeros la suerte que teníais, ahora mismo os encontrabais flotando en una nube, los problemas se habían esfumado, ahora pertenecías a una de las guardias de Tiesbeast y te esperaba un futuro prometedor que te entusiasmaba, ya que te encontrabas muy fuera de lo monótono, y por si fuera poco habías encontrado el amor, a alguien que te quería tanto que hacía que tu corazón se desbordara de alegría.
Lo que no podíais haber predicho era lo que se os venia encima; el primer detonante fue el mensaje que te llegó de Mavi informándote de que ya te habían asignado una misión fuera de las barreras protectoras.
Con un poco de pereza os levantáis, ducháis por separado y vestís para largaros del hotel de las aguas termales.
Os lleváis una gran sorpresa cuando descubrís que prácticamente todos se han quedado en este, o bien por placer o por estar con los amigos.
Ese comentario se extiende por todo el grupo rápido como la pólvora al encenderse y las chicas tiran de tu brazo para alejarte de los chicos y sacarte información.
