Alice aprecio con atención como Sirius y James forcejeaban a un Remus bastante molesto de lado a lado mientras que Peter los señalaba con un rostro indignado, parecían estar discutiendo algo que a juzgar por sus rostros (ya que no podía escuchar nada de lo que decían) era bastante serio.
¿Había pasado algo y ella no estaba enterada?
—¿Por qué discuten? —preguntó a Lily, quien también veía la situación, sin embargo esta parecía bastante tranquila, lo que terminó por tranquilizarla.
Si no alteraba a Lily, entonces todo estaba bien.
—James dijo que Remus sería mejor padrino que Sirius, Sirius se lo tomo muy personal, y comenzó a discutir sobre porque él sería un mejor padrino que Remus. Peter está quejándose sobre porque nadie habla de cómo él sería un genial padrino —resumió la situación lo más brevemente que pudo.
—Y Remus está en medio, ¿por? —cuestionó ahora, no entendiendo por completo su papel en la discusión.
—Los intentó detener, así que todos se fueron sobre él y porque sería un padrino aburrido a comparación de cualquiera de ellos.
—Tiene sentido —asintió, dejando las preguntas de lado y disfrutando del show.
Todos estaban tranquilos ahí, era horario de clases así que no tenían porque preocuparse de nada. Sin embargo minutos después la sala común fue abierta, captando la atención del grupo de amigos que se detuvo a medio de hechizarse mutuamente solo para descubrir quién se encontraba del otro lado.
El grupo entero se relajó al notar los rostros conocidos de Harry y Regulus, quienes se acercaron a sus hermanos con tranquilidad.
—Hey James —el ojiverde saltó a un abrazo apenas su hermano se acercó, contento de charlar con él luego de un par de días sin verse demasiado.
—Harry —el Potter mayor lo apretujó con tranquilidad, revolviéndole su cabello y rodeando sus hombros una vez se separaron del abrazo.
—Que bueno que están aquí, Regulus y Harry vengan —ambos chicos se miraron confundidos ante la petición de Sirius, pero moviéndose de igual forma hasta quedar frente a este.
—¿Y bien? —Regulus elevó una ceja, frunciendo el ceño ante lo serio que parecía el asunto, a juzgar por el semblante de su hermano.
—Necesitamos su opinión sincera, quien creen que sería mejor padrino, ¿Sirius o Remus? —James preguntó mirando a sus hermanos con curiosidad poco disimulada.
—Remus —respondió el Black casi instantáneamente, sin siquiera meditar mucho su respuesta.
—Vaya, que inesperado —se quejó el hermano de este antes de rodar los ojos. No era justo, Regulus nunca admitiría que era mejor para algo a menos que fuera de vida o muerte.
Harry por su parte no contestó de forma rápida, pero no porque no supiera su respuesta, sino por lo extraño de tener que responder a aquello. Se sentía afectado, pero no podía demostrarlo.
—Bueno —forzó al nudo en su garganta a desaparecer, no debía perderse en sus recuerdos—, estoy completamente seguro de que Sirius sería el mejor padrino del mundo —miró al que fue su padrino, no podría haber deseado a uno mejor que él.
Sirius festejó ante su respuesta, lanzándose sobre el chico de ojos verdes para abrazarlo mientras les restregaba a sus amigos la respuesta de este.
Por otro lado Regulus observó la interacción con curiosidad, contrariado sobre cómo sentirse ante la relación que estos mantenían. Era extraño, le agradaba que se llevaran bien, sin embargo había algo que le molestaba sobre eso pero no estaba seguro de que era.
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Vuelta atrás.
FanfictionLa muerte decide darle a su amo la oportunidad de cambiar el pasado y enmendar cada error cometido, claro nunca especificó que tanto cambiaría. Harry renace en 1961 como hijo de Fleamont y Euphemia Potter.