Jimin miro a Yoongi, últimamente se la pasaba callado y mirando la comida cómo si está no estuviera en su total agrado.
-¿Ha pasado algo que te moleste?
Yoongi salió de sus pensamientos mirando a Jimin, quien le sonrió, claro que el pálido no podía ser malo, el debía de ser bueno, después de todo embarazo por error a un omega del cuál no sentía nada más que una simple simpatía.
-Estoy bien Jimin -Contesto dándole una sonrisa- continúa comiendo iré a ver a Hoseok y a mi hijo
Jimin asintió, de cierto modo eso le dolió un poco, el pensó que tal vez, solo tal vez Yoongi lo aceptaría más que a Hoseok, pero era un completo error.
Jungkook aún dormía mientras que Hoseok hacía gestos cuándo pasaba el algodón con agua oxigenada, la puerta se abrió y pronto bajo las mangas del suéter mirando hacia está, con cuidado Yoongi asomó su cabeza.
-¿Podemos hablar?
Hoseok miro a Jungkook, y asintió.
-¿Sucede algo? -Pregunto rápido- ¿E echo algo mal?
-No -Respondio rápidamente- es solo que...
-Es sobre Jimin.
-Hoseok -Yoongi le miró- tu sabés que él en realidad no me gusta, es solo que tú...
-Yo -Rio un poco bajo- siempre fui yo el problema de todo.
-Hobi -El apodo le hizo recordar algo que le dolió- dime una sola que te hará feliz.
-Dame el divorcio -Solto a punto de llorar- dame mi libertad, necesito ver a alguien.
-Iras con él -Dijo seguro Yoongi- no puedo dejarte hacer eso.
Hoseok comenzó a llorar, el pálido solo salió de la habitación con un corazón dolido, después de meses, Hoseok no había podido olvidar a su primer amor, su sangre hervía, su mirada era oscura y su corazón pesaba mucho.
Hoseok se sentó aún llorando, sus manos mancharon de sangre el suéter, su depresión estaba avanzando más y más.
Los días comenzaron a pasar y se convirtieron en meses, los meses en años, hasta que llegó el día en que Jungkook cumplía cinco años.
El pequeño corrió hasta la cama de Hoseok, le palmeó y pego un poco, pero el omega no le miró.
-Omma, hoy es mi cumpleaños -Dijo feliz- vamos pol patel
Hoseok muy y apenas se movió para cobijarse un poco más aún dándole la espalda.
-Omma está cansada Jungkook -Dijo con el dolor de su corazón- espera un poco sí.
Jungkook se subió a la cama acostándose a un lado de este.
-Omma -los grandes ojos de su hijo le miraron- lele pancha.
Hoseok le sonrió y asintió -Duele mucho.
Mentira, no le dolía nada más que su misma alma.
