Capítulo 18

30 3 0
                                    

Connor continua demasiado confundido, sus expresiones lo dicen todo. Pero eso no me preocupa por ahora, yo sigo pensando en las palabras de Garrett, tratando de leer entre líneas

─Ah, estoy aquí para enseñarle a Dany lo que tiene que hacer, le queda mucho por aprender─

Estoy tan absorta en mis pensamientos, que no escuchó cuando Connor responde al comentario de Garrett, mientras se rasca la barbilla.

─No es tan difícil, G. Sólo tiene que acomodar los cd's, entre otras cosas. Creo que lo hará perfecto─ dice, sonriéndome amablemente.

─Ah, Connor, Connor... todo en esta vida es una lección, amigo mío─

Él solo se limita a subir los hombros, mientras entorna los ojos.

─Como digas─ dice mientras entra a un cuarto, sólo para regresar con varias cajas llenas de discos, adornos, papeles, entre otras cosas.

Dejando el montón de cajas a un lado mío, Connor voltea y me dice

─Mira, Dany. Aquí está todo lo que necesitas, si tienes cualquier duda, aquí estoy para lo que se te ofrezca─ seguro que sí, pienso mientras volteo a ver a G, que se ha sentado en la silla frente a mí, con la piernas abiertas, y los brazos cruzados.

Demasiado sonriente, demasiado tranquilo...

Lo ignoro mientras empiezo a sacar las cosas de la caja para acomodarlas en diferentes pilas en la mesita de la esquina, por nombre del artista, por año. Justo como me había explicado Connor ayer, y así me sea más fácil ponerlos en las repisas.

Estaba demasiado emocionada pues, al parecer me había salido con la mía, y había conseguido el trabajo, ¡yayyy!

Empiezo a acomodar la primera pila que había hecho, es decir, los discos cuyos artistas empiezan con la letra "A", y cuyas fechas eran a partir de 1980.

─Bien, veamos... ABBA, AC/DC, Aerosmith─ Cuando de repente, todo mi centro empieza a temblar ─aAaAaAAaahHhH─ ¿qué... está... sucediendo?

Me parece que esa banda o artista no existe, cariño─

Volteo a ver a Garrett y él trata de ocultar una risa, pero fracasa, y entonces caigo en cuento... la ropa interior, ¡tiene un vibrador!

El continúa jugando con las velocidades, primero manteniéndola baja, lo suficiente como para sentirlo pero no como para alcanzar la liberación. Un hormigueo se instala en mi núcleo, nefasto, odioso, como un dolor de muela.

Poco a poco comienza a subir la velocidad, más y más, arriba... arriba.

¿Cuántas velocidades tenía esta cosa?

Empiezo a sudar frío, las piernas me tiemblan y tengo que cruzarlas.

─Mhmmm, ¡ay, Dios mío¡─ pequeñas pulsaciones comienzan a formarse, latiendo en sintonía con mi ritmo cardíaco.

─Danielle, continúa con lo que se te ordenó, no quieres generar una mala impresión en tu primer día, ¿verdad, cielo?─ maldito sea.

─NnOooOo─ digo como puedo, sintiendo la presión cada vez más fuerte.

Connor que había estado ocupado en la computadora, levanta la vista, y preocupado me pregunta

─¿Te encuentras bien?, te ves un poco roja, ¿tienes calor?─

─Claro que tiene calor, ¿no es así, princesa?─

─No, es... estoy bien... graah...cias─

Connor continua inquieto, no sabe lo que está pasando, y en silencio agradezco por ello.

─De verdad Dany, puedo prender el aire si lo necesitas─ silencio, maldita sea. No puedo concentrarme entre lo que dice, lo que debo de responder y lo que estoy sintiendo.

─NooOooO, gra..ci-ah-ah...as─ estoy tan cerca, tan cerca, y entonces se detiene, a decir verdad, ya me lo esperaba.

Resoplo... me queda un largo día por delante.

Gracias a Dios se detuvo,  eso me da una pequeña ventaja, rápidamente acomodo los discos, justo como lo habían pedido, prácticamente estaba corriendo de un lugar a otro, quería terminar lo más pronto posible, para no darle el gusto a Garrett, pero sólo me estaba haciendo tonta yo sola.

Cuando iba apenas en la letra H, él volvió a empezar, pero esta vez, oh esta vez, él venía con todo. Las velocidades cambiaban increíblemente rápido, entre una y otra, lento, rapidísimo, rápido, lentísimo, eran picos de éxtasis que subían y bajaban sin control.

En uno de esos picos, simplemente no pude y terminé soltando todo lo que traía en las manos, necesitaba sostenerme de algo, la pared no era buena opción, pero era lo único que tenía cerca. Retorciéndome, casi al punto de caer de rodillas.

Mi interior estaba en llamas, ardiendo, espasmo tras espasmo, exigiendo la liberación.

Garrett entonces se acerca a mí, y levanta lo que he tirado, dejándolo a un lado.

─Garrett, por... favor...─ suplico, desesperada, mientras arrugo entre mis puños su camisa.

─¿Qué dices, cariño?, ¿quieres tener audiencia mientras te corres?─ dice señalando hacia Connor, que seguía absorto en la computadora; su aliento mezclándose con el mío. Tan cerca que podía ver mi reflejo en sus ojos. Su boca curvándose en una diabólica sonrisa, subiendo lentamente el nivel al máximo.

─No... solos... tu y yo... en casa─ no, no le voy a dar la victoria que desea, no aquí, al menos.

Cruzo más las piernas, cerrando las manos en su camisa aún más fuerte, tratando de retrasar el inminente orgasmo. ─Mis orgasmos... te pertenecen... sólo a ti, daddy

Mi respuesta parece haberlo sorprendido, e inmediatamente apaga el vibrador. Me toma posesivamente del cabello, besándome apasionadamente, como nunca antes.

─Buena chica. Lección aprendida─ sonríe mientras da un fuerte manotazo en la unión de mis piernas, enviándome casi al precipicio, casi. ─Ahora continua con tu trabajo─

Pienso que eso ha sido todo por hoy, que el castigo ha sido aplicado y ahora todo ha terminado. Pero, ¿cuándo Garrett hace lo que pienso que va a hacer?

Nunca.

Nuevamente, siento como el vibrador se enciende, en el mínimo nivel, sólo lo suficiente para mantenerme excitada, consciente de su presencia, reforzando el hecho de que soy suya para hacer lo que le plazca, cuando quiera, donde quiera y como quiera. 

¡¡¡Y me fascina!!!

EncuéntrameDonde viven las historias. Descúbrelo ahora