-No hables de mi novio y deja el cuerpo de Aokbab ahora.- Gulf dice. La criatura suspira con un puchero de perrito triste fingiendo fruncir el ceño con tristeza. -Este cuerpo también me gustaba...- Dice la criatura mirándose enteramente con pena. Deja su saludo militar para mirar el cuerpo del hombre al que mató. Camina hacia el hombre con un suave caminar ladeando su cabeza hacia la izquierda. Sus ojos verdes escaneando el rostro del hombre. Sus ojos verdes siendo intensos. Se coloca en una rodilla para reposar su codo en la rodilla alzada actuando como un varón incluso si está en el cuerpo de una mujer.
-Creo que este cuerpo no luce mal.- La criatura se relame los labios con la lengua de Aokbab. -No luce nada mal.
Dice la criatura para dejar el cuerpo de Aokbab. Aokbab rueda sus ojos hacia atrás de su cabeza para caer desmayada al lado del cadáver. Gulf va rápidamente hacia Aokbab. Se arrodilla a su lado para tomarla de la cabeza suavemente y colocarla en su regazo para que repose.
-Aokbab. Aokbab, ¿estás bien?
Gulf pregunta. Su amiga aún no despierta. En cambio, despierta el cadáver. Sentándose en su trasero con un respingo. Sus ojos siendo verdes. La bala en su frente cae al suelo. El hueco en aquella carne se cierra de hilo en hilo juntándose como un bizcocho que es amasado recíen. Las chapas de piel roja (carne viva) bajo la piel de color blanco superficial se juntan de a poco... Desapareciendo incluso los pequeños destellos de la humedad en la carne viva. Al cerrarse, la criatura mira su nuevo cuerpo.
-Mm. No se siente nada mal.- Él dice con una sonrisa viendo sus manitas.
Aokbab tosé, despertando igualmente con un respingar masivo antes de comenzar a parpadear cómo si fuese su primera vez. Vuelve a respirar, su estómago contrayéndose y alzandóse por la respiración agitada como si esta hubiese estado contenida cuando recién despertó. Ella está mirando a la nada claramente por recién despertar, pero a unos segundos de haber vuelto a respirar mira a Gulf. Parpadeando ahora con más calma. Toda su respiración agitada decrece a un nivel más tranquilo aunque aún es audible en su boca.
-Gulf,- Ella llama con una voz ronca. Sus ojos humedeciendóse. -un espíritu me dijo que estabas en peligro así que lo dejé entrar a mí cuerpo, ¿funcionó?
Gulf bufa una risa que no es ni la mitad de sarcástica ni de burlona. No se encuentra entre medio de esos dos términos. Es más cómo de alivio y felicidad. Es tan suave. Los ojos del padre demuestran cariño por el sacrificio de su amiga.
-Eso a mí él no me lo contó.- El padre dice, alzando su mirada para ver al hombre frente a él que alguna vez fue un humano malvado sin moral alguna que le quitó su dignidad. Ahora era un demonio que no era malvado. O al parecer había tenido un cambio de actitud por el creyente. El ser le sonríe tiernamente con sus labios en el rostro de Wynn.
-Cuando un libro no puede juzgarse por su carátula, no puede juzgarse por su sipnosis.- Gulf dice entonces con una sonrisa al saber que nunca verán la verdadera forma de la criatura. Aokbab mira toda sorprendida al ser delante de ella con sus labios entreabiertos, sus ojos algo grandes (pero no como platos) y sus cejas un poco alzadas. Mew se queda viendo la escena con una sonrisa aún abrazado de la katana.
👄
Los amigos de tres salen de la iglesia (frente a los escalones) para despedir a la criatura que ya va a emprender una nueva vida en el mundo humano.
-Asegurate de regresar el arma a su tienda.- Gulf amablemente lo regaña con una sonrisa de labios humilde, sus brazos cruzados contra su pecho.
-No puedo jurar por el de allá arriba debido a la criatura que soy, pero lo haré, padre.- La criatura dice como un niño pequeño asintiendo la cabeza mientras sujeta el arma con ambas manos contra su regazo.
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OH PADRE QUE ESTÁS EN LA IGLESIA•MewGulf
Mystery / ThrillerGulf Kanawut es un sacerdote sin filtro. No tiene interés en nadie que no sea rico o que le beneficie en algo. Es serio, callado, mentiroso y sus ojos dan mucho miedo porque estos son oscuros como los de un tiburón que ve sangre. Sin embargo, no es...