25. Beso Al Revés.

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—Natsuki x Yuu...


—Oh por dios... ¡Sigue ahí, Yuu, el parque sigue ahí!—señaló Natsuki con emoción, aunque eso había estado haciendo desde que ella y su prometido llegaron al barrio en el que crecieron juntos. Se aferraba cariñosamente al brazo de él y con la otra mano señalaba hacia cualquier cosa que reconocía.—¿No te trae recuerdos?

—Seh, bastantes. Hina llorando porque no queríamos jugar con ella, Kotarou llorando porque no sabía cómo funcionan los columpios, Haruki llorando porque no quería hacer sus deberes, Mochita llorando porque cayó al estanque de los patos, tú llorando porque en lugar de ayudar intentaste alimentar a un pato y el pato te atacó...— enumeró con una sonrisa irónica.

—Tú llorando porque perdiste tu carta favorita de Yu-Gi-Oh! en una apuesta.—añadió ella siguiéndole el juego.

—Hey, era un dragón blanco de ojos azules, era de las más raras y más poderosas.

—Y aun así la apostaste por una caja de mentas.

—Seh, seguramente para dárselas a los patos.

Ambos rieron en su camino a la sección infantil. Casi nada de las cosas a las que estaban acostumbrados habían cambiado fuera de ligeros detalles como una posible segunda mano de pintura igual de brillante. Natsuki se acercó al pasamanos con claras intenciones de subirse y talvez intentar hacer alguna pirueta encima.

—Ahora que lo pienso, quería intentar algo que vi en un manga que llamó mi atención.— dijo mientras se impulsaba hasta estar por encima de las barras.

—¿Qué cosa?—Yuu dejó sus pertenencias junto a uno de los postes que mantenían el pasamanos y volvió a su lado.

—Espera...— la joven acomodó sus piernas para que sus rodillas se aferrasen a una de las barras y bajó hasta estar colgada casi como un oso perezoso. Luego soltó sus manos y quedó colgando de cabeza.— Listo. Ahora dame un beso.

—¿Ahora? Pero si estás al revés.

—¡Esa es la idea! Siempre quise saber cómo se sentía un beso tipo Spiderman y justo ahora tengo un parque y a nadie menos que mi prometido para ayudarme ¡obviamente voy a aprovechar la oportunidad!

—Ahh, tus ideas son demasiado raras a veces.— se quejó el muchacho, pero se dirigió a seguir la instrucción. Tuvo que agacharse un poco para lograrlo porque con el tiempo llegó al punto en el que podía golpearse con las barras en la cabeza si se paraba en puntas de pie. El primer intento fue un fracaso porque Natsuki no paraba de reírse. El segundo terminó siendo un beso en la barbilla porque era difícil apuntar bien desde ese ángulo. En el tercer intento Yuu decidió tomar el rostro de su prometida con ambas manos y finalmente lograr un beso decente.

Se sentía incómodo por los movimientos torpes de ambos, pero ya con un ritmo estable fue mucho más disfrutable. Seguían habiendo risas de por medio, pero de esas que endulzaban los besos y los hacían sentir como el primero.

—Natsuki, si sigues así vas a marearte.— ella volvió a tomar las barras con sus manos y dejó caer sus piernas en el suelo antes de soltarlas. En efecto, estaba mareada, pero feliz.

—¡Valió la pena cien por ciento! 

—Tu rostro está muy rojo...

—No lo digas...

—Cara de...

—¡Noooo, eso solo es para Kotarou!

—Cara de mono. Parece que es de familia.

31 Besos [Honeyworks]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora