3. Rey de los ángeles.

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Capítulo 3

Rey de los ángeles.

Me apretujo las manos mientras el auto avanza por la calle rumbo al club nocturno que Dina sugirió.

Estoy nerviosa, hace mucho que no salía con mis amigas en plan levante y me siento fuera de práctica. Con Klein salía a clubes y a bares con nuestro grupo de amigos, pero estando con él todo era diferente. No me arreglaba de manera provocativa para buscar un hombre con el cual irme a casa luego ni me hacía expectativas con respecto a lo que iba a pasar. Todo porque ya estaba con Klein, me arreglaba bonita para él, tomaba con él, bailaba con él, y sabía que al final de la noche íbamos a terminar en nuestra cama. Eso, si no estábamos demasiado borrachos para ello.

Hasta el momento, Klein ha sido el mejor sexo que he tenido. No éramos de esos creativos que lo hacían en diferentes posiciones, pero era bueno. Y no creo encontrar algo mejor.

¿Y si el tipo con el que me voy a casa es pésimo en la cama? Es una gran posibilidad y solo me haría sentir peor.

Vamos, Yeraldine, no te eches para atrás ahora.

Tomo varias respiraciones profundas y me digo que todo va a ir bien.

Una mano aprieta la mía y levanto la mirada para encontrarme con la sonrisa alentadora de Tori.

Todo estará bien, es lo que intenta transmitir con su gesto y yo le creo.

Ayer, cuando fuimos de compra y al salón, estas chicas hicieron que me cortaran el cabello en capas y el estilista me enseñó a darle volumen, por lo que hoy mi cabello luce brillante y abundante.

También me hicieron comprar un vestido de lo más revelador. Es plateado, deja la espalda al descubierto, la parte delantera se sostiene de apenas una tira que rodea mi cuello y la espalda y me llega unos escasos centímetros por debajo de mi trasero.

Mi cabello tapa solo la mitad superior de la espalda, la otra está al aire.

No estaba segura de comprarlo cuando lo vi en el maniquí, no soy voluptuosa, a penas y tengo busto y mi trasero es medianamente decente. Pero cuando lo tuve puesto supe que tenía que llevarlo.

Dina estaciona el auto a una cuadra del club y todas bajamos.

Las demás están igual de despampanantes que yo. Harley lleva su cabello rubio recogido en una trenza de lado, su maquillaje ahumado resalta sus ojos grises y el labial rojo resalta su boca en forma de corazón. El vestido rojo que lleva puesto es sencillo, ajustado al cuerpo, de escote redondo y mangas que cubren solo sus hombros, y llega a la mitad de sus muslos.

Dina, haciendo alarde de su cobriza cabellera, se decidió por un enterizo negro que resalta sus prominentes curvas. Se decantó por un maquillaje con colores nude para no recargar el atuendo.

Cuando todo esté dicho © | Bilogía King, Libro I.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora