"Qué difícil es poner en palabras aquello que sentimos, y es aún más difícil cuando la persona que se ama no siente lo mismo. Sin embargo, el cuerpo es capaz de decir lo que la boca no se atreve".
Luego de encontrar a su novio engañándola, Yeraldine...
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Capítulo 2
Quebrantamiento.
Feel me, de Selena Gómez, suena a todo volumen y yo canto a gritos mientras le doy sorbos a una botella de Bourbon.
-Todo está mierda se va -digo a la nada, sacando la ropa de Klein del armario.
Llevo en eso más de tres horas, sacando sus cosas se cada rincón de la casa y echándolas en bolsas de basura.
Encuentro una caja de zapatos deportivos y la abro, dentro hay un montón de fotos nuestras en la universidad y de vacaciones.
Klein y yo conocimos en la universidad hace poco más de cuatro años y fue "amor a primera vista". Un amigo en común nos invitó a ambos a su fiesta de cumpleaños y ahí ocurrió la magia. Hablamos toda la noche y ya eran altas horas de la madrugada cuando me llevó a las residencias de estudiantes del campus. Al día siguiente, me encontró en la cafetería y me invitó a salir.
Creí que era el hombre para mí, mi media naranja, la persona que estaba unida a mí por el hilo rojo del destino. Un año después de nuestra graduación, nos mudamos juntos. No sé dónde estaba mi sexto sentido en ese momento porque nunca me sentí extraña al mudarme con él. Hace un año, gracias a mi trabajo, conseguí esta casa en Near North, a unas cuadras de la Magnificent Mile, a un precio bastante accesible. Gracias al cielo, la pagué yo, porque el muy idiota en ese momento no tenía empleo.
Una a una, voy lanzando las fotos al montón de ropa, viendo mi estúpida sonrisa de felicidad al lado del hombre más vil y cruel que he conocido. Cuando llego a una donde estamos con toda la familia, con él estratégicamente entre Daniella y yo, otra idea llega a mí mente.
¿Hace mucho calor para hacer una fogata? Vamos a averiguarlo.
Bajo al sótano para tomar una caja grande y luego vuelvo a la habitación para meter a la caja todas las cosas preciadas del imbécil de mi ex novio.
Su traje favorito de Armani que le costó un dineral, sus camisas favoritas, toda su ropa interior, sus zapatos deportivos más costosos, entre otras cosas. Por último, tiro en la caja todas las fotos que acabo de ver junto con cada retrato nuestro que hay en la casa y las sábanas que contaminaron.
Pongo la caja a un lado de la parrilla y vuelvo adentro por los fósforos y mi botella.
Quiero que sea un proceso lento para más satisfacción, por lo que saco primero algunas cosas, les rocío de mi botella de Bourbon y enciendo un fósforo.
-Buen viaje al infierno, maldito Klein.
Lanzo el fósforo sobre los artículos en la parrilla y estos se encienden. De a poco, voy agregando más cosas al fuego y me voy sintiendo poderosa en el proceso.
