"Qué difícil es poner en palabras aquello que sentimos, y es aún más difícil cuando la persona que se ama no siente lo mismo. Sin embargo, el cuerpo es capaz de decir lo que la boca no se atreve".
Luego de encontrar a su novio engañándola, Yeraldine...
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Capítulo 15
Cena de negocios.
El restaurante en el que va a llevarse a cabo la cena se encuentra en Near West Side, un barrio de Chicago conocido por tener una gran variedad de restaurantes. Cada semana se inaugura un nuevo lugar dirigido por un chef altamente calificado.
Aquí puedes encontrar lo que busques, desde lo platos más simples hasta los platillos gourmet más extravagantes que existen. Nada más en esta cuadra hay una restaurante de comida china, otro de comida griega, dos gourmet y uno italiano.
Cada vez que vengo a este lado de la ciudad, confirmo y reconfirmo que Chicago es el mejor lugar del mundo -según yo-, sin importar que luego tenga que pasar todo un día medida en el gimnasio.
Tomada de la mano con Ángel, entramos al restaurante y encontramos a Tori y Aarón en el vestíbulo esperando por nosotros. Tori me deja metafóricamente con la boca abierta, ¡Está despampanante! Su cabello recogido en una cola alta que perfila perfectamente sus facciones, el vestido de tirantes rojo que lleva puesto se ajusta a su torso y se abre en una falta con pliegues que le llega por encima de las rodillas. Pero lo mejor de todo son sus tacones de aguja que le estilizan las piernas, haciendo que se vean kilométricas.
-¡Mírate, mamacita! -le digo al oído cuando la abrazo, ella ríe. Luego me giro hacia Aarón-. Hola, Aarón, ¿cómo estás?
-No tan bien como tú y mi acompañante -responde al tiempo que me da un breve abrazo.
-Eres un coqueto sin remedio -ríe Tori y le da una palmada en el brazo cuando él se aleja de mí.
-Y eso que no lo conociste en la secundaria -comenta Ángel en broma-. Era el peor de todos, sebligó a casi todas las chicas de nuestro curso.
-Eres un mentiroso de primera, King -se defiende Aarón-. Si hubo alguien que se ligó a más de la mitad de las chicas del curso, fuiste tú.
-¿Quieres que haga una lista de las chicas con las que saliste en nuestro último año de instituto? -Nos mira-. Estaría mejor un listado completo, pero sería imposible.
-¡Tú te tiraste a todo el equipo de animadoras!
Mi boca y la de Tori caen abiertas de la impresión al tiempo que miramos a Ángel con incredulidad.
-¡No lo hiciste! -le digo, luchando con la risa que amenaza con salir a borbotones de mi pecho.
-¡No lo hice! -miente, y sé que es mentira porque está a punto de reír.
-Sí lo hizo -afirma Aarón con expresión sabia.
-Bueno, sí lo hice -acepta Ángel antes de señalar a su amigo con el dedo-, pero ese número no es nada comparado con los tuyos.
-Bueno, bueno, acabemos con esta discusión ridícula y pasemos a nuestra mesa -ordena Tori en medio de risas y nosotros obedecemos.
Somos llevados a nuestra mesa con una ubicación privilegiada y la mejor atención. Lo que hace la American Express Black de Ángel.
