Construyendo El Amor (Building The Love)

Capítulo 6.

Parte narrada por Isaac Henderson.

—Es necesario que visites al médico lo más pronto posible para detectar lo que tienes realmente —me dice Christine, mi psiquiatra, desde el otro lado de la línea—. Es importante que le prestes atención a esto, Isaac.

—No, no es necesario —le respondo—. Dejaré las terapias, Christine. Ya no me siento cómodo llevándolas, me siento patético al escribir en un diario que no me servirá de nada. Llevo mucho tiempo en las terapias y nada ha resultado, nada ha cambiado y ya estoy cansado de luchar contra algo que no se puede cambiar. Es mejor dejarlo así, ya me resigné a que no voy a encontrar una solución a esto.

—Isaac, el que pases por un mal momento no significa que tengas que dejar tus terapias —me dice intentando convencerme—. Es importante que las lleves. Muy importante. Aunque tú no veas el avance, ¡vas a lograrlo! Y eso te lo aseguro.

—No, ya no quiero más —suspiro—. Lo siento Christine, pero ya no iré a terapia.

—Bueno... No me queda más que aceptar tu decisión. Si necesitas algo, sabes que puedes llamarme.

—Sí, hasta luego, tengo que colgar.

Mi estómago da un vuelco al pensar en que no hay una solución para mi problema. Realmente sí quisiera terminar con esto, pero ya me cansé de tratarme y no ver ningún maldito resultado bueno. Al contrario, parece que todo empeora.

Y estoy harto.

Han pasado ya varios días desde que Gilbert rompió nuestro contrato y no he podido salir de la cama, a excepción de las últimas dos sesiones de terapia que he tenido. Podría comenzar a trabajar aquí, en mi oficina tengo todo lo necesario, pero realmente me siento desmotivado y bloqueado.
Es una sensación horrible, ni siquiera tengo ganas de salir a caminar un poco o hacer deporte como solía hacerlo antes.

—Señor Isaac —la puerta de mi habitación se abre lentamente y escucho la voz de Anne, la empleada encargada de la cocina—. ¿Qué desea cenar? Puedo preparar...

—No tengo hambre, Anne —le respondo—. Así que no es necesario que prepares nada para mí, estoy bien.

—Pero... No ha comido en todo el día.

Repentinamente el dolor en mi pecho vuelve con mucho mayor intensidad que las veces anteriores. Me remuevo en la cama tocando mi pecho con mi mano derecha. ¡Este dolor es insoportable!

—¡Señor Isaac! ¿Qué sucede?

Siento que el dolor va en aumento y de pronto, mi vista se oscurece y dejo de sentirme a mí mismo.

—¡Señor!...

Es lo último que puedo escuchar.

•★•

Parte narrada por Rosalie Larsson.

—¿Qué te parece este diseño? Justo ahora estoy un poco bloqueada, no se me ocurre nada mejor —Danielle, una compañera de mi departamento de trabajo, me pregunta mientras esperamos la llegada de Carter para decirle que solo una de nosotras podrá acompañarlo al nuevo edificio en construcción.

Miro su iPad, observando cada detalle del diseño.

—Me parece bien, sin embargo, creo que son muchas decoraciones para un edificio como el del señor Nickolas Hansen —la miro a ella haciendo una mueca—. Danielle, cuando te sientas como bloqueada, trata de relajarte y tomarte un tiempo para ti. No todo es trabajo, ¿de acuerdo?