Capítulo 10

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Una última Misión

Los disparos azules y rojos inundaban el ambiente como lluvia horizontal aumentando la adrenalina de la batalla

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Los disparos azules y rojos inundaban el ambiente como lluvia horizontal aumentando la adrenalina de la batalla.
El Maestro Kenobi, Anakin y Katoonii se habían cruzado con los separatistas en Sullust.
Ahora sí Kat sabía de qué iba la misión y no era lo más emocionante del mundo hasta hace unos segundos.
La asesina de Doku los había encontrado y los estaba casando.
—¡Ventress! —gruñó Anakin y el maestro Obi-Wan ordenó que se separasen.
Justo después de la orden un disparo impactó al maestro Kenobi, sin causar daños menores.
—Parece que eres su preferido, Maestro —Kat sonaba igual de divertida que siempre.
—Eso es decepcionante solo los droides nos persiguen a nosotros. —se burló Anakin.

Skywalker desvío algunos droides y la padawan tuvo que lidiar con los suyos propios. Volar para Kat era fácil y divertido pero siempre que volaba con Anakin y Ahsoka- quién en este caso no estaba presente- siempre se convertía en una competencia de destreza.

Por el momento las cosas iban muy parejas.
Mientras tanto Obi-Wan tenía sus propios problemas, cortesía de Ventress quien estaba a punto de dejarlo fuera del aire, y ahora iba en dirección a la nave de mando Separatista.
Para cuando pidió ayuda a los otros los jedi su nave ya estaba envuelta en llamas.
La nave del jedi entró primero en un aterrizaje forzado seguida por la nave de la asesina, que había sido derribada por Anakin y Katoonii en una estratégica maniobra. Ambos llegaron a la bahía en cuestión de segundos en camino auxiliar a Obi-Wan. Este no tuvo mucho problema para salir y en cuanto logró abrir la escotilla R2 lo baño en extintor, para asegurarse de que estuviera completamente libre de fuego.

—Gracias... Gracias R2, ya fue... suficiente, —el maestro Kenobi se sacudió la ceniza y Kat se acercó a verificar que en efecto estuviera bien. —Tranquila Kat he estado peor.

Todos se giraron, encendieron sus sables, se acercaron a la segunda nave derribada y observaron a la asesina Asajj Ventress salir de su nave, con mal humor, como de costumbre.
—Ventress no te ves muy bien. —Obi-Wan fue el primero en hablar.
—Siempre ha estado fea. —Anakin se encargó de contestar y Kat no pudo evitar soltar una carcajada que solo provocó una mueca en el rostro de la aludida.
—Fracasaste, Ventress. Ríndete. —continuó Obi-Wan ignorando la insolencia de sus aprendices.
—¡Jamás! —como era típico de ella se lanzó hacia los tres jedis en un ataque lleno de furia y desesperación. Anakin y Obi-Wan detuvieron el ataque de los dos sables de luz rojos mientras Katoonii atacaba por la izquierda: para defenderse Ventress pateó al maestro Kenobi enviándolo lejos de la acción y dejando a los otros dos jedis con todo el combate.

Mientras tanto la Batalla de Sullust seguía en pie y causando estragos.

A pesar de estar a mitad de un duelo considerablemente peligroso Kat no podía evitar sentirse más que viva, contrarrestaba los ataques de Ventress con gracia y dinamismo, dejándole a Anakin una parte de la diversión. Obi-Wan estaba de vuelta en el duelo y juntos le complicaban aún más las cosas a la asesina.

My Master - Obi-Wan KenobiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora