HADES

Capítulo 17

Hades yacía en su cama, tenía 3 días inconsciente y su cuerpo temblaba excepto cuando YiBo sostenía su mano.

–No debes de faltar tanto a tus clases Bo.

–No puedo dejarlo así, fue mi culpa. El pobre hasta alucinó y me cambió el nombre –respondió YiBo entre sollozos.

–No creo que haya sido al azar...–dijo Kihyun observando fijamente a su señor.

–¿Qué quieres decir? –preguntó después de dar un sorbo a su café.

–Es que mi señor por más que se sienta mal nunca confunde los hechos, muéstrame el frasco del que dices que bebió –pidió extendiendo la mano.

YiBo le entregó el frasco e inmediatamente Kihyun reconoció quien era la dueña del brebaje pero tenía que aclarar algo...–¿Para qué te dio esto?

–No me juzgues.

–Sabes que no lo haré Bo pero dime la verdad.

–Es que Hécate me dio una poción para olvidarme de mi Ge Ge, no fui capaz de tomarla y... en el baile vi el frasco en una mesa, no sé como llegó a ese lugar. Así que lo guardé en mi saco.

Kihyun examinó el frasco, lo destapó y olfateó. –Esto no es para olvidar.

YiBo abrió los ojos de par en par. –Entonces ¿qué es? ¿cómo lo sabes?

–No me juzgues. Lo sé porque la tomé, su aroma es amargo y el de éste frasco es dulce...

–Es porque un TARADO se equivocó –dijo Hécate al entrar a la habitación, se acercó a Hades y tocándole la frente logró aliviar sus temblores. –Lo que bebió fue la poción de "recordar".

–Di...Di...una débil voz fue escuchada.

Hades comenzó a incorporarse en su cama, sus ojos sólo buscaban a una persona, la cual corrió a su llamado poniéndose de rodillas en la cama y con sus manos acariciaba su rostro.

–Zhan Ge aquí estoy.

El dios le brindó la sonrisa más cálida que hasta ese momento le había hecho y lo abrazó quedándose apoyado contra su pecho. El mortal miró a los presentes con cara de sorpresa.

–Mi señor, ¡por fin despertó! –exclamó con gran satisfacción el asistente.

–¿Y bien? ¿exactamente que recordaste Hades? –preguntó la hechicera.

YiBo se separó del dios para dejarlo hablar pero Hades no soltó su mano.

–Recordé que... ¡pega bien fuerte esa madre! –dijo sarcásticamente.

–No me salgas con tus cosas, ya dime.

–Que ansiosa estas...¿tú que crees que recordé?

La hechicera miró el par de manos antes de volver a hablar. –Hades, no tuve opción, lo mejor que se me ocurrió fue alejarlos pero TÚ tenías que volverlo a encontrar.

Kihyun interrumpió. –¿Alejarlos?

Antes de que la hechicera respondiera Hades sonrió.–Agh muero de hambre.