Paso al frente un nuevo encapuchado y rápidamente se quitó la capucha de encima. Era una chica esbelta, con el cabello largo y negro, unos ojos grises marca Black que nadie podría negar.
- Buenas tardes, es un placer para mi estar hoy frente a ustedes, mi nombre es Adhara Marlene Black Mckret –
- ¿Mckret, tu eres mi hija y eres una Mckret como mi Marlene? – Sirius tenía tantas preguntas que no sabia cual hacer primero.
Marlene Mckret fue, es y seguirá siendo el amor de su vida, estudiaron juntos en Hogwarts, era la mejor amiga de Lily, y nunca le hizo cazo porque él era un mujeriego.
- Si, Mckret es mi segundo apellido; si, soy tu hija; y si, estoy hablando de tu Marlene – le contesto su hija con ilusión.
- Pero ella está muerta – dijo Sirius sin entender lo que estaba pasando.
- No padre, ella no murió – el corazón de Sirius estaba a punto del colapso, la creyó muerta todos estos años y ahora ay frente a él estaba la hija que tuvo con el amor de su vida.
- ¿Qué paso con ella entonces? – Sirius necesitaba encontrarla.
- Hay muchas cosas de las que no podemos hablar, solo te diré que ella regresara a tu vida y contara todo lo que paso –
- Solo tengo que esperarla entonces – culmino Sirius con esperanza.
- Si padre, después todo será feliz; continuo, mi madre es Marlene Mckret, tengo 21 años, y soy la última de tus hijos; mis padrinos son mis tíos Lucius y Narcissa Malfoy, - no pudo continuar porque su padre protesto.
- ¿Que, enloquecí en el futuro o qué? – no entendía como es que avía escogido a un Malfoy como padrino de su hija.
- Padre no seas grosero, son familia, es que no te has dado cuenta que tu yo viejo está ay sentado junto al Lucius viejo – pregunto Adhara a su padre joven.
- No me digas viejo – protestaron los nombrados desde la mesa de profesores.
- Viejos pero muy guapos – les contesto ella con picardía para callarlos.
- Pertenecí a la casa de Hufflepuff – toda la mesa aplaudió con ganas a su segundo miembro.
- Jugué en el equipo de quidditch como cazadora – su padre estaba que no cabía en sí de la felicidad, su hija jugaba en el mismo puesto que él.
- Soy la administradora de un precioso hotel frente al mar – tras esas palabras, Severus volvió a ver a su hijo, sospecho de que hotel hablaba la chica.
- Mi mejor amiga se presentará más adelante; papá ahora necesito que sepas algo importante, el futuro es muy diferente a como es ahora, todos los aquí presente somos amigo y familia, la opinión que es valedera para mi es la del padre de mi tiempo, no es que la tuya no importe solo que tú no sabes la historia completa, ok – dijo Adhara advirtiendo a su padre que la información que iba a escuchar no sería de su agrado.
- Tan malo va a ser – pregunto Sirius con temor.
- Oh si va a ser muy pero muy malo – le contesto su otro yo.
Para ese momento Snape ya sabía lo que iba a decir esa chica a continuación.
- Estoy casada y mi esposo es Alan Snape – apenas lo termino de decir sonó un fuerte golpe, su padre se avía desmallado otra vez.
- Bueno era de esperarse – Adhara veía en shop a medio comedor, era sabido por todo el odio entre Black y Snape. Hermione despertó a Sirius.
- Por favor hija dime que escuche mal por favor, dime que solo fue un muy mal sueño – rogaba por un milagro.
- No papi, Alan es mi esposo y el padre de mi bebe – Adhara aprovecho a terminar el golpe.
- NOOOOOOOOOO, POR QUE A MI, NOOOOOOOOO – Sirius estaba colapsando con tanto.
- Primero mi primogénito es el mejor amigo del hijo de quejicus, segundo mi bebe se casó con el mismo hijo de quejicus, y ahora tengo una nieta con quejicus, ¿podría haber algo peor? – grito Sirius mientras Harry y Remus lo sostenían para que no hiciera alguna locura.
- Bueno te diré que gracias al señor Snape mi madre regreso a ti, pero no puedo decir nada más que eso – dijo Adhara mientras simulaba cerrar sus labios y tirar la llave. Ella sabía que con eso lograría calmar a su padre, pero no fue así.
- Devuélveme a mi Marlene quejicus – grito Sirius a Snape dirigiéndose a donde estaba.
- Yo no sé nada de Mckret desde que salimos del colegio – le contesto Snape con extrañeza.
- Pasara padre, en el futuro ella regresara, solo tienes que esperar – le dijo su hija tratando de calmarlo.
- Pero yo quiero que regrese ahora – grito Sirius con desesperación.
- Pero tendrás que esperar – le dijo Regulus acercándose a su padre, necesitaban calmarlo.
Adhara se acercó a su padre y lo abrazo, Regulus llego después y los abrazo a ambos.
- Sé que es duro padre, pero tienes que esperar a que mamá aparezca sola, mientras asegúrate de mantenerte vivo – le dijo Regulus logrando calmar a su padre.
Sirius se calmó en los brazos de sus hijos, luego miro a Snape y le dijo.
- Cuando sepas de ella devuélvemela por favor –
- Hare lo que este en mis manos – le contesto este.
- Y tú, si llegas hacer llorar a mi niña, te mato – le dijo Sirius a Alan amenazándolo.
- Puede estar seguro que no va a pasar, ella y mi nena son mi mayor tesoro – contesto Alan.
- Eso espero, ahora quiero conocer a mi nieta – les dijo Sirius.
- Yo también – dijo Snape.
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De Campamento con la Tercera Generación
Ciencia FicciónPROLOGO. Ya han transcurrido 25 años desde aquel 2 de mayo donde mucho lucharon por la libertad del mundo mágico de las manos del malvado Lord Voldemort. Muchos murieron en la lucha, pero al final se consiguió la libertad tan anhelada por tanto tie...