De Campamento con la Tercera Generación

CAPITULO 24 - Zeus Zabini.

Un nuevo encapuchado se situó frente a la mesa de profesores y retiro su capucha, era más joven que los anteriores, pero también muy guapo, delgado, piel morena, cabello muy rizado al estilo afro y ojos oscuros.

- Insisto a estos niños que les dieron de comer – volvió a pregunta la misma chica de ayer.

- Buongiorno para los que no entendieron bueno días, mi nombre es Zeus Raffaello Zabini Greengarass – el corazón de su padre dio un fuerte latido al escuchar el apellido de su amada.

Sería posible que lograr casarse con ella, seria ella la madre de sus hijos, entonces recordó que Daphne era la madrina de su hija por lo cual ella entonces no era la madre de sus hijo. Y lo comprendió, comprendió que lo logro, que logro casarse y formar una familia con la chica que amaba, con la chica que por ley estaba destinada a casarse con su amigo, la chica que por años anhelo y vio crecer hasta convertirse en la hermosa joven mujer que era hoy y entonces se permitió verla.

Unos puestos más allá estaba ella en estado de shop. Astoria Greengarss veía a Zeus con los ojos llorosos, ese niño era suyo, su corazón se lo decía, por años tuvo que hacer el papel de señorita perfecta ante todos y ese papel incluía ser la prometida perfecta de Draco Malfoy lo cual la alejaba por completo de la persona que ella en verdad quería a su lado. Y ahora hay frente a ellos se encontraba un joven muy parecido a su amado proclamando llevar el apellido Greengarss y sentada en la misma mesa estaba una joven hermosa que era hermana de este y ahijada de su hermana Daphne. La conclusión era simple Lira y Zeus eran sus hijos, de ella y de un amado Blais, y entonces voltio buscándolo con sus ojos y lo encontró mirándola con anhelo y esperanza.

- Ya puedo ver que mi padre se dio cuenta quien es mi madre, anda párate y bésala – le dijo Zeus a su padre haciéndolo reaccionar.

Los aludidos se levantaron sin dejar de mirarse y poco a poco fueron acercándose mientras todos los veían extrañados, era de conocimiento público el compromiso matrimonial que existía.

- Te amo, desde siempre Astoria – dijo Blais colocando una de sus manos en la mejilla de ella.

- Y yo a ti, desde que me acuerdo – dijo Astoria también llevando una de sus manos al rostro de él.

Y sin esperar más se besaron, con anhelo, con felicidad, con miedo, con amor. Ambos eran conscientes que no sería fácil enfrentar a las familias y luchar por el futuro que hoy se les presentaba, pero juntos buscarían la manera de lograrlo.

El que se llevó la mayor impresión fue Lucius (J) Malfoy, siempre creyó que esa niña amaba a su hijo, pero lo que veían sus ojos demostraba todo lo contrario y buscando respuestas dirigió su mirada a su otro yo en la mesa de profesores dándose cuenta que este lo veía esperando su reacción, Lucios (V) le dejo leer en sus labios "es lo correcto" y prosiguió a levantarse de la mesa aplaudiendo logrando que todo el comedor aplaudiera con él celebrando la felicidad de la nueva pareja.

Cuando Draco vio que era su propio padre del futuro el que comenzó el aplauso entendió que no sería obligado a cumplir el contrato con Astoria, desde ese momento ambos serian libre y eso lo hizo feliz, feliz por el que tenía una nueva oportunidad, feliz por ella que lograría conocer el amor, y feliz por su amigo Blais que siempre la amo tratando de ocultárselo pero lo sabía desde hace mucho, para él siempre fue un suplicio ser el causante de la infelicidad de su amigo. Y entonces aplaudió con ganas, con felicidad y con esperanza de un futuro mejor para todos, le entrego a Orion a su madre para luego levantándose y caminar hacia la pareja.

- Trata de no comértela hay niños presentes – le dijo a Blais desde atrás.

Este temiendo la reacción de Draco se separa rápidamente de los labios de ella y le dio la cara a su amigo escondiendo a Astoria tras su espalda, pero lo que vio fue a un Draco sonriéndoles y no colérico como el esperaba.

- Si llegas a hacerle daño te matare, lo entiendes verdad – le pregunto Draco a Blais.

- La amo, jamás la dañare – le contesto este con firmeza.

- Sé que la amas desde hace mucho, siempre lo he sabido –

- ¿Tan obvio era? –

- Si, ciento haber sido la razón de que le mantuvieras lejos –

- Mientras ahora nos aceptes y ayudes a romper el compromiso no hay problema – le dijo sacando a Astoria de detrás suyo y tomándola por la cintura.

- Claro que lo hare, pero eso sí, si no soy el padrino el Zeus te golpeare – dijo en advertencia directa hacia Blais.

- Yo me encargare que así sea, gracias Draco – contesto Astoria.

­- Creo que será mejor que dejemos que se presente tu hijo – le dijo sonriendo.

- Si ya quiero conocerlos – dijo ella soltándose de Blais y abrazando a Lira que la esperaba con los brazos abiertos.

- Mi niña que bella estas con esa barriga abultada, cuanto tienes ya – le dijo Astoria a Lira con emoción mientras le acariciaba su vientre.

- Hola mami, tengo casi 6 meses – le contesto ella con emoción.

- Tengo solo 15 años y ya voy a ser abuela – le dijo con lágrimas en los ojos.

- ¿Ya puedo continuar? – pregunto Zeus impaciente.

- Claro mi niño continuo – le contesto su madre sentándose junto a su padre.

- Reinicio, mi nombre es Zeus Raffaello Zabini Greengarass, mis padres son Blais y Astoria Zabini – ella enrojeció al escuchar el que sería su futuro apellido.

- Tengo 17 años, por lo cual estoy en mi último año, mi madrina es Hermione Granger – espero la reacción se su padres.

- Gracias chicos – les dijo la castaña sin entender.

- De nada, sé que serás una gran madrina – dijo Astoria sonriéndole, a ella siempre le avía caído bien Hermione, pero nunca se acercó a ella buscando conversación temiendo la reacción de Draco. Blais solo asintió en respuesta.

- Y bueno mi padrino no tendrá que golpear a mi padre ya que es Draco Malfoy - este le sonrió a su ahijado.

- Menos mal que cumplieron, gracias – le dijo Draco a los padres de su ahijado.

- Obviamente pertenezco a la casa de Slytherin – toda la mesa aplaudió.

- Juego con Golpeador en el equipo de quidditch igual que mi padre – la mesa continuo aplaudiendo.

- Me gustaría ser auror como mi padre – dijo esta vez esperando la emoción de su padre.

- Soy Auror – celebro Blais de pie junto a su mesa.

- Si eres el segundo al mando y la mano derecha del tío Harry – le conto su hijo.

Blais voltio a mira a Potter que lo miraba con la misma casa de impresión que suponía el mismo tenia, Harry le hizo una inclinación de cabeza y él le respondió de la misma manera. Si eran los que tenían a su cargo todo el departamento de aurores era que confiaban el uno en el otro completamente.

- Mi mejor amiga es la siguiente en presentarse y a mi novia todavía le falta mucho – dijo haciendo un puchero haciendo reír a su madre y abuela. Esa mueca esa igual a una que Blais hacia cuando no le cumplían uno de sus caprichos.

- Eso es todo de mí, así que con ustedes la mejor amiga del mundo –

- Gracias chocolatico negro – le dijo una encapuchada.

- De nada chocolatico blanco – le contesto Zeus sonriendo.