EL SHINOBI DE LA ARENA ( GAANARU)

LÁGRIMAS DE MEDIANOCHE

Los días fueron pasando y tanto Naruto como Sasuke seguían con el entrenamiento arduo mientras que el rubio iba recordando cada vez más sobre su vida en Konoha.

La fuerza revivía en el ninja rubio quien iba logrando controlar al Kyuubi que yacia en su interior. Se pasaba horas inmóvil enfrentandolo en un duro intento por hacerse no solo con su poder sino también con su amistad pero el Kyuubi era un hueso duro de roer como solían decir algunos.

Día a día se enfrentaba a Sasuke para probar que tan bien era su progreso y siempre descubría que aún le faltaba bastante. Lo mismo sucedía con el ninja emo. Por las noches descansaban en esa casa abandonada donde siempre Sasuke intentaba avanzar en su amistad con Naruto hacia otro nivel pero siempre se topaba con la misma barrera.

Esto comenzaba a desgastar al rubio quien sentía el dolor de estar lejos de quien tanto amaba y a su vez el estress de tener que mantenerse en continua alerta con Sasuke ya que sabía qiue éste no pararía hasta lograr hacerse con su amor.

Sasuke le contaba, esa noche, el motivo por el cual habia abandonado definitivamente Konoha y el país del fuego para adentrarse al país del viento. Su voz cambiaba de timbre según avanzaba su relato. Aquello asombraba al rubio ya que podía notar cierto temor en su amigo y por lo que pudo recordar Sasuke nunca fue alguien que sienta miedo hacia nada ni hacia nadie.

Konoha habia dejado de ser aquella aldea tan hermosa y jovial que una vez fue para convertirse en un lugar siniestro donde la maldad y el peligro reinaba por doquier. Una oscura sombra habia caído sobre ese sitio y gran parte del país del fuego consiguiendo engullirse la luz que solía reinar allí.

Ahora la aldea era un sitio gobernado por el odio, el miedo y el sometimiento cuyos ninjas se habian transformado en oscuros guerreros al servicio del mal.

No les importaba el dolor ajeno como así tampoco les interesaban tener que matar a un compañero o a un amigo y que ellos estaban dispuestos a cegar la luz de la vida a quién sea.

Sasuke se hubo enfrentado a un Neji que solo sabia decirle "Regresarás donde perteneces y obedecerás las órdenes de tu amo". Parecía autómata y pese a recibir graves heridas físicas no parecían afectarlo de ninguna forma.

También vió a un Shikamaru que más bien parecia un muñeco o un títere sin vida ya que sus ojos habian perdido aquel brillo tan propio de él, como le sucedía a Neji y a todos los que le tocó enfrentarse.

No les importaba matarlo ya que si no lograban llevarlo lo asesinarían. A Sasuke le sorprendió el increíble poder que de golpe todos ellos tenían y por alguna extraña razón él no deseaba obtener menudo poder. Algo le decía que nada bueno conseguiría siguiéndo ese camino. Por tal razón eligió escapar y para ser sinceros a punto estuvo de no lograrlo.

Pero al lograr atravesar la forntera rumbo al país del viento ninguno de los ninjas de konoha lo siguió. Era como si se quemasen si hacian eso y ésto le dió mucho que pensar. No obstante no daba con ninguna explicación lógica ni nada por el estilo.

Molesto habia decidido ir a ver al Kasekage de la aldea de la arena para averiguar si él sabía algo que logre aclarar sus múltiples dudas y de paso poder hacer algo para que los ninjas de Konoha vuelvan a ser los mismos de antes.

Pero en todo el trayecto no pudo evitar de pensar en Naruto, lo creía loco como al resto de los ninjas de Konoha. Grande fue su sorpresa al verlo en el desierto inconciente. Ahora que estaban juntos por razones del destino no lo dejaría escapar.

Naruto escuchó atento a Sasuke asombrandose ya que nada se le ocurría como respuesta a tan extraño comportamiento. Sasuke le propuso ir a Avalón, el lugar donde podrian encontrar las respuestas y de ser posible la solución a los problemas de Konoha.

El lugar no quedaba tan lejos por lo que al amanecer se pondrían en marcha. Sasuke sabía dónde se ubicaba por lo que les resultaría sencillo llegar.

Cuando se quedaron en silencio unos momentos, el moreno abrazó al rubio sin importarle la negativa de éste y de forma abrupta le robó un beso salvaje. Cuando pudo Naruto se hizo soltar y alejandose de su lado dijo molesto:
- ¿Qué demonios haces?
-Besarte, es más que obvio ¿no?

Sasuke se fue acercando a Naruto quien se enfurecia más aún. ¿Por qué le hacia eso su amigo? ¿Acaso no contaba su decisión personal? Por más que el rubio se empecinaba en esquivar al moreno éste último logró sujetarlo con fuerza presionandolo contra su cuerpo para que pueda sentir su miembro endurecido.

Pudo sujetarle sus manos colocandole sus brazos en su propia espalda mientras que con su otra mano le acariciaba la mejilla y el cabello dorado.

-No escaparás de mi Naruto - éste forcejeaba - Deja de luchar mi amor
-No Sasuke, déjame amigo....no me sujetes así....por favor....me...me asustas.... - dijo ésto último al borde de las lágrimas.

-Shhhhhhhh - Sasuke colocó su dedo índice sobre los sensuales labios de Naruto - No digas nada y dejate llevar - El ninja emo lo volvió a besar por la fuerza. Naruto empezó a llorar al verse atrapado por aquel que consideraba amigo. Cuando Sasuke lo soltó éste respiró bocanadas de aire pero seguia sujeto y sin poder alejarse del emo - Te deseo....Naruto....

-N-No....n-no....p-por favor Sasuke....sueltame amigo....
Sasuke acariciaba la dorada cabellera de aquel que tanto amaba y del cual se habia obsecionado. Naruto cerró los ojos y apoyó su rostro en el hombro de su amigo sin dejar de llorar.

Sabia que no tenia salida, si queria seguir vivo en el pais del viento debia permanecer oculto y para ello necesitaba de Sasuke. Éste nunca se rendiría y para su pesar sabia que a éste paso tarde o temprano acabaria violándolo. La sola idea lo espantaba sobremanera.

-Te amo Naruto, no tienes que llorar ya que conmigo estás a salvo mi amor.
-Sasuke - El rubio lo miró a los ojos - Por favor amigo te lo suplico, sueltame. Me lastimas amigo, por favor.....por favor Sasuke....liberame....

Sasuke acarició una vez más aquel hermoso rostro que ahora lo miraba con mucho dolor, él no queria lastimarlo sino amarlo. Así lentamente fue aflojando hasta soltarlo. Naruto cuando se vió libre, lejos de salir corriendo abrazó a Sasuke con ternura agradeciendole su comprensión.

-Gracias, muchas gracias Sasuke
Sasuke tambien lo abrazó pero esta vez fue un abrazo de amigo. Era conciente del daño emocional que le ocasionaba al rubio cada vez que intentaba avasallarlo así, pero lo cierto era que aquello resultaba ser más fuerte que él.

- Perdoname Naruto....es que yo....te amo en serio pero....no quiero lastimarte ni hacerte llorar....perdoname
- Entiendeme Sasuke, amo a Gaara para bien o para mal, es a él a quien amo sin importar lo que él me haga. Entiendeme amigo por favor....

Como respuesta Sasuke lo abrazó con ternura. Fuera empezaba nuevamente la tormenta de arena. Ambos amigos se abrazaron y arroparon para dormir ya que esa noche en particular estaba muy fría.

-Perdoname - le susurraba Sasuke
-No me obligues a besarte otra vez amigo, por favor te lo pido.
- Está bien Naruto, te respetaré como te dije. No te tomaré por la fuerza ni te besaré...
-Gracias por comprenderme Sasuke

En su habitación Gaara abrazaba su almohada aquella misma noche de tormenta de arena pensando en su amado y terco rubio que se negaba a entablar contacto con su persona por aquel malentendido.

Abrazado a su almahada lloraba sin consuelo.
-Naruto, regresa mi amor....te amo y nunca dejé de amarte....¿dónde estás? Te necesito tanto....