↬ 𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐 X

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Mientras Mew conducía su cabeza no dejaba de repetir la frase que leyó en el chat "Te necesito", ¿desde cuando su alumno se habia vuelto tan importante para él? Como para tenerlo manejando al atardecer, más aún con una preocupación impresionante.

El mayor no sabía que pasaba con el chico, pero había algo... algo que lo cautivaba mucho, no sabía si quería estar en una relación con él, no sabía nisiquera que estaba haciendo, no sabía porque lo besaba tanto, no sabía  porque añoraba pasar más tiempo a solas con él, en más de una ocasión le confesó que era adictivo, simplemente no podía librarse tan fácil.

Cuando su GPS se avisó que ya habían llegado, estacionó su coche y se apuro a salir, no sin antes llevar su mochila con él.

Se dirigió a la entrada y subió por el elevador ya desesperado, Gulf podría estar pasándola muy mal, y el estúpido ascensor no se dignaba a moverse más rápido.

Cuando por fin paro, salió casi corriendo, buscando entre las puertas una con el número 25, ¡Bingo! Se paró delante un tanto pensativo de la situación que pudiera estar pasando dentro, respiro hondo quitándose para alzar el tapete y encontrar la llave.

La tenue luz que entraba por la ventana era casi inexistente, observo cautelosamente el espacio para adentrarse, unos pequeños ruidos lo hicieron alertarse, giró, y vio un pequeño cuerpo sentado en el piso, acurrucado.

-¡¿Gulf?!- preguntó alarmado.

No oyó una respuesta.

Se acercó rápidamente botando su mochila, no le importaba nada en ese instante, sólo saber que le sucedía al menor.

-Gulf, ¿que pasa pequeño?- Interrogó por segunda vez, solo que esta vez tomo con sus manos la cara del menor.

-Mew... Si viniste-Sonrió entre lágrimas.

-Claro que iba a venir- Mew sintió como su corazón se estrujaba al ver al contrario en tal estado.

Suppasit sabía que castaño no iba a hablar, en realidad conocía muy bien a las personas, no le puedes pedir que te contesten todo de una, a alguien que se ve que en serio la está pasando terrible, lógica.

Así qué solo lo abrazó, lo acunó entre sus brazos, como... protegiéndolo, haciéndole saber que él ya estaba ahí, estaba ahí para ayudarlo, para cuidarlo.

-No se que tanto sufres, pero quiero que sepas que estoy contigo, nada malo te pasará, todo estará bien Gulf- Habló Mew mientras acariciaba lentamente el cabello del antes mencionado.

.

Después de algunas horas donde Gulf sólo lloraba y Mew lo consolaba, el menor se había dignado a contarle el por qué estaba así, jamás había contado esa historia, unicamente a Mild, pero algo le dijo que podía confiar en Mew y se liberó en palabras, le fue muy duro poder hablar, todo el tiempo tuvo ese nudo en la garganta avisando que en cualquier momento volvería un llanto.

-Wow- Exclamó Mew después de que el menor terminará de contar.

Gulf sonrió tristemente, no quería que el mayor sintiera lástima o algo por el estilo.

-Eres muy fuerte- Fue lo único que dijo.

Y Gulf se echó a llorar, y no por el hecho de que se sintiera mal de lo que había dicho Mew, sino al contrario se sintió feliz porque estaba esperando un comentario como: "Que triste historia" ó "Lo lamento", pero el mayor solo destaco su fortaleza, una que pensó que no tenía.

-Debio ser muy duro, pero hey, ya estás aquí, y mirate bailas increíble- Comento el pelicafe con una sonrisa.

La sonrisa que iluminó el corazón de Gulf, si, Mew era lo que necesitaba en esos momentos.

【 𝐵𝑎𝑖𝑙𝑎𝑛𝑑𝑜 𝑎𝑚𝑜𝑟 】↠ 𝑴𝒆𝒘𝒈𝒖𝒍𝒇 !¡♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora