F*cking Claws. [Minsung]

01.

Jisung abrió la puerta de la casa de Minho con mucho cuidado, la luz del sol entraba por los ventanales y lograban un aspecto muy cálido en el hogar. En el suelo blanco y brillante dormían dos bolas de pelo bajo un rayo de sol, Jisung podía decir que era tierna la escena, pero no le causaba algo bonito en absoluto. Por su pierna sintió como unas garras descendían, abrió los ojos espantado y comenzó a mover esa pierna con brusquedad buscando que la cosa esa lo suelte.

- ¡Ya, joder!- con sus manos alejó al felino quién mostró los dientes molesto.

Una vez que lo alejó fue hacia la cocina, los tres presentes lo siguieron en busca de lo obvio, comida. Han caminó hacia las latas junto a la nevera y distribuyó el alimento como Minho lo había explicado, esperando en todo momento que ninguno de los tres lo toque. Alzó la vista y en uno de los muebles ante el encontró un post it de color azul.

"Hey Squirrel!"

"Buenos dias, olvidé algo ayer, trata de no tocar a Dori, la semana pasada se hirió y pues, ya sabes, le duele, mañana tiene revisión con el veterinario, nos vemos en clase"

- You know I know Lee Know baby.

Jisung se echó a reír pero luego comenzó a hacer cuentas en su cabeza, recordaba que el nombre Soonie era similar a Doongie y él lo relacionó con que son parecidos por sus colores anaranjados y blancos, pero Dori es diferente... Al igual que su color. Fue el gato que él pateó rato antes y que Minho dijo que estaba herido.

¡Mierda!

Pensó Han jalando sus cabellos, lanzó una vista a los tres gatos y se dió cuenta de que los tres comían en paz, era cierto que Dori no caminaba bien. Maldijo al pensar que pudo haberle hecho daño.

No le gustaban, no como hace años. Pero tampoco era capaz de hacerles daño alguno.

- Han... Borra esos recuerdos- se dijo a sí mismo y salio de la cocina para ir hacia el cuarto de los gatos.

La casa olía a Minho y alimento de gato. Lo primero no le desagradaba en absoluto, lo segundo sí. Subió las escaleras buscando la respectiva puerta.

Baby's

Han no negó en absoluto que aquella era la puerta de la que Minho hablaba, la abrió y sintió lo innecesario que era ese cuarto, quizás para él.

No habían simples cajones de arena y algunos juguetes. ¡Era un puto cuarto hecho solo para esas bolas de pelo espantosas! Habían diferentes camas, más platos de comida, agua, juguetes en la pared, otros en cajas. Minho de verdad tenía dinero para derrochar.

Han negó y volvió a lo suyo, limpiar las cajas de arena y procedió a limpiar un poco el lugar, tomar algunos juguetes del piso y colocarlos en las cajas, poner las camas alineadas, cambiar el agua, etc.

Se distrajo cuando su celular sonó, siquiera miró quién era, solo contestó.

- Squirrel, ¿Todo en orden? ¿Sigues con vida?

- ¿Minho? Mmhh... Pues sí, eso creo, ¿Para qué me llamas?

- Ya son las 9, ¿No piensas llegar a clase? No se qué tanto haces ahí, pero no debería llevar más de 15 minutos.

- Mmhh... Tienes razón, lo siento. Limpiaba el jodido cuarto exclusivo para gatos.

- Si ese cuarto te parece exclusivo, espera a ver el mío.

- ¿Qué?

- Llega temprano, Squirrel, no estamos en secundaria. La señora Park estará furiosa.

Minho colgó y Chan junto a él lo veía de manera pícara.

- ¿Qué fue eso del cuarto exclusivo?

- No pienses cualquier cosa, a Soonie le gusta dormir en mi cama.- Declaró Minho en defensa.

- Claro claro, supongamos que la historia va de eso. En otra, ¿Por qué lo haz dejado con tus gatos? Siquiera puedo tocarlos yo y somos amigos hace años.

- Por alguna razón él no me produce desconfianza.

- ¡Oye!

- No, idiota. Puedo saber cuándo uno de mis gatos está cómodo, él necesitaba un trabajo y bien, pensé en que podría ayudarme con ellos. En fin, cuando llegamos a casa Doongie no se alejó de él o Soonie no fue hacia las escaleras para esconderse, eso sucede cuando no están cómodos con alguien, pero no sucedió ¿Sabes?

- ¿No que no le gustaban los gatos?

- "No le gustan", lo noté nervioso, supongo que una razón tendrá.

- No empieces con meterte en su vida- Chan activó el modo padre- Siquiera son buenos amigos.

- Ya di ese paso, para empezar, ya está en mí casa- Sonríe de oreja a oreja.

- ¿Quién está en tu casa?- Hyunjin colocó el respaldo de la silla hacia los chicos y separó las piernas sentándose allí.

- El chico ese, el del cabello azul.

- Ahh, Sungie, sí. Es amigos de Jeongin.

Ambos chicos observaron al rubio quien comía una paleta roja, Hyunjin por su parte entendió aquellos gestos.

- Si, me gusta observar a Jeongin, ¿Y?

- ¿Háblale? Duh- Chan no podía ser más claro.

- No puedo.

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Perdón si hay algún error.

¿Por qué será que Han tiene ese miedo?🌚

-G.