F*cking Claws. [Minsung]

FINAL.

Cuatro años después....

- Cuando muera quiero que en mi lápida se lea "Te estoy observando"- Yuta dibujó un cartelito con sus manos y terminó de quitarse el delantal de mesero, los chicos de allí rieron.

- La mía "Me visitas o te visito yo"- Shotaro aportó a la causa.

- "¿Qué me ves? Ni siquiera estoy aquí, me encuentro abajo de tu cama"- Añadió Haruto.

- Joder, son unos idiotas- Ríe Jisung e imita la acción de Yuta con el delantal- Deben dejar de beber el agua del grifo, parece no caerles bien.

- Pero te haz reído, ¿O no? Claro que sí, además es viernes, salgamos a beber algo.

- No puedo, tengo planes con Soomin, me espera en casa, si vuelvo a llegar tarde de verdad piensa dejarme por sus amigas.

- Tiene trece años y te domina más que nuestro jefe.

- Sí, mi hermana tiene carácter... En fin, nos vemos chicos.

- Bye bye baby- Haruto esbozó una sonrisa.

Han se retiró de "Crazy monkeys" restaurante donde trabaja desde hace dos años y medio, los chicos de allí se hicieron sus amigos en poco tiempo, son muy divertidos, Yuta parece un padre corriendo detrás de Haruto y Shotaro, amaba ir a trabajar para ver las escenas familiares que armaban.

Se subió a su bicicleta y pedaleo hacia el edificio que compartía con su hermana, Soomin había crecido bastante, al principio le costó aprender japonés pero con ayuda de una profesora pudo dominar el idioma a la perfección, fue también gracias a sus amigos que ella supo desenvolverse más, comenzó las clases varios meses después de su llegada, para suerte de Han, la recibieron con mucho amor y dentro de todo, paciencia.

Subió las escaleras, luego de haberse recuperado, comenzó a moverse mucho más, evitaba el ascensor, caminaba todo lo que podía y en especial, andaba con su bicicleta por todas partes, el gimnasio también lo ayudó bastante. De a poco y con esfuerzo, muchos problemas se desvanecieron, por fin se había convertido (según él) en una persona sana.

Pero a pesar de todo, llegaban los inviernos en donde recordaba su pequeña nariz roja, y sus cabellos castaños llenos de escarcha, Minho seguía en su cabeza y cierta culpa también, pero ahora Jisung era alguien diferente, más seguro y estable.

- Ya era hora- Soomin abre la puerta y Jisung ríe- Juro que estaba por comer la pizza sin ti, muero de hambre.

- Si si, como digas. ¿Qué tal tu día?

- Bien, la profesora de biología me interrogó sobre las células, nada raro.

- No comprendo aún esas cosas, siquiera me gustan. Eucariota y Fungi eran los dos tipos ¿No?

- No, Fungi es un reino, son hongos Han, lo que quieres decir es Procariota y Eucariota.

- Agh, es todo lo mismo, todo tiene células. ¿Ya tienes tus bolsos listos?

- Si, están en la cama, los tuyos también, ¿ A qué hora es el vuelo?

- En la tarde, por suerte.

Soomin era una chica muy inteligente, Han supo que debía saber de una vez todo lo sucedido, ya no tenía siete años como hace tiempo, cuando habló con ella lo supo comprender, era verdad que extrañaba a todos, pero no dejó que la tristeza la consumiera.

- ¿Crees que Hyuna y Dawn aún estén en su casa? ¿O que nos quieran ver?

- No lo sé, ya lo averiguaremos... De todas formas, tú no tienes la culpa de nada, fui yo el que movió las piezas, así que a ti te seguirán queriendo como siempre, el único detalle es que ahora te ves diferente. ¿Como diablos mides casi lo mismo que yo con trece años?