Alan
El ambiente se tornó demasiado tenso nadie de los ahí presentes tuvo el valor de hablar ... Bien por ellos porque de haberlo hecho terminarían colmando mi poca paciencia.
No obstante el pesado ambiente que morada en el lugar se esfumó al escucharse una hermosa mediodía tocada por un piano, la cual como buen amante de la música clásica reconocí de inmediato "minuet in G major" de Bach, intrigado salí de la oficina con mis subordinados siguiendome los pasos, recorrimos el largo pasillo hasta llegar frente a la puerta del salón de música sitio de dónde provenía el sonido del piano. Al entrar vi a mi hermosa Luciana sentada dando la espalda a la puerta tocando con gracia el piano sin notar aún nuestra presencia.
Luciana
No hay otra cosa que me guste más que sentarme frente al piano, al colocar mis manos sobre las teclas ellas adquieren cierta consciencia y hacen lo que se les venga en gana creando una bella melodía, pueden pasar horas sin que yo me percate de ello sin embargo cuando por fin logro hacerlo me entero que ya a pasado mucho tiempo ... Demasiado diría yo.
Al terminar la canción una sonrisa apareció en mi rostro, sin embargo fui sorprendía al oír un par de aplausos y al girarme pude ver a Alan acompañado de otros vampiros.
—tocas muy hermoso niña— habló uno de ellos.
—hermoso sin duda— elogió un joven de piel pálida cabello castaño y unos lindos ojos color miel a lo que yo le sonreí agradeciendo su cumplido —¿desde cuando tocas el piano?— preguntó él.
—comencé desde pequeña, estuve por mucho tiempo en una escuela de música y con la práctica fui mejorando— respondí.
—seguramente llegarás a ser una gran pianista— el joven me miró regalándome una afectuosa sonrisa logrando hacerme sonrojar ante sus halagos.
En un instante Alan se encontraba a mi lado notandose lo celoso a kilómetros así que lo tomé de la mano tratando de mantenerlo tranquilo evitando que cometiera una locura.
Alan exhaló a pesar de que no lo nesecita y sujetó fuertemente mi mano.
—bien ... Quiero presentarles a mi novia, Luciana— me ayudó a levantarme del banco para que ellos me observaran sin ningún problema.
—permítame presentarme, mi nombre es Gabriel es un honor conocerla señorita— aquel elegante muchacho ahora identificado como Gabriel tenía unos exelentes modales dignos de todo un aristócrata.
—el placer es mío— dije usando mis mejores modales tratando de igualar los suyos pero fue imposible y creo que nadie podría competir contra tan finos y exquisitos modales.
Analizando más afondo la situación Gabriel es idéntico a un primo mío como si fuesen gemelos coinsidiendo incluso hasta en el nombre, salvo que a mi primo lo solíamos llamar "Gabo" a modo de cariño, él era muy amable alegre y simpático ambos éramos muy unidos desde niños y me cuidaba como si fuese mi hermano mayor.
—bueno salgamos de aquí— ordenó el vampiro mayor y todos lo obedecimos.
Alan les comunicó a sus subordinados que por el momento dejarían la reunión para otra ocasión a lo que ellos asintieron para luego hacer una reverencia a modo de despedida, sin embargo Gabriel se acercó a mi tomó mi mano y besó el dorso de esta en claro gesto de despedida posteriormente se alejó por el pasillo pero antes de desaparecer por la esquina me sonrió nuevamente y yo le devolví el gesto.
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Un nuevo personaje se integra a la novela Gabriel fiel subordinado de Alan y nuevo amigo de Luciana.
Porfa les pido que lean y voten si es que les gustó esta historia la cuál yo comparto con ustedes con mucho cariño.
Sin nada más que decir les deseo una feliz Navidad y año nuevo porque a pesar de esta terrible pandemia siempre hay una luz al final del túnel.
Dios los bendiga.
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el alma del vampiro
Vampireella es una muchacha común y corriente, dulce, tierna de nobles sentimientos pero muy frágil el es el rey de los vampiros alguien frío, malvado y carente de cualquier tipo de sentimiento el está en busca de su alma gemela ella quiere una vida mejor...