Montserrat
El turno se me hizo eterno, las cosas no estaban sucediendo según lo acordado. Shark Dewand, demostró ser un hombre inteligente y astuto, lo subestimamos, jamás pensamos que el hombre fuera tan ágil. Entro al edificio y presiono el botón del ascensor, una vez en la caja metálica suelto todo el aire retenido y paso mis manos por mi cuello. Brianna y los dos niños habían encontrado a David castrado, atado, pero vivo. Con una nota de Shark bastante sencilla pero que dejaba claro, que conocía toda la verdad.
"Jamás he seguido las reglas de nadie. Yo manejo mi propio juego".
Antes de castrarlo o mientras lo hacía, Shark Dewand le contó a David, en detalle de cómo logró entrar a la iglesia, quienes le ayudaron y que él debía morir ese día en manos suyas. Su hija no lo quería, su esposa lo odiaba porque se enteró de lo que les hizo a sus hijos. Y que sería un espectador, tal cual él lo fue con su familia.
Aterrada Brianna, al descubrir que David sabía la verdad y en medio de su dolor amenazó con matarlos cuando lograra soltarse. Su esposa hizo lo impensable.... lo mató y al mejor estilo de la época juvenil, cuando andaba con su hermano, robando y atracando a rancheros, dañó toda la escena y creo una bastante dantesca. En donde dejaba claro la realidad detrás del hombre de fe, su pasado y sus inclinaciones sexuales, de ninguna manera dejaría a ese hombre vivo, con el odio que sentía ahora hacia ellos.
Salgo del ascensor y llegó a mi apartamento, las llaves en la fina mesa de al lado me dicen que Roy está aquí y suspiro. Entro a la habitación y lo encuentro mirando por la ventana, en la semi penumbra.
—¿Has visto las noticias?
—No. —respondo y veo la TV encendida, leo el reporte de las capturas. Sacudo mi cabeza porque esto no puede empeorar. —no puede ser...
—Estoy en problemas linda —dice y gira hacia mí —nada está saliendo bien.
—He llamado a algunos colegas preguntando por alguien con la descripción de Shark, quizás entró como desconocido... Les he dicho que es mi ex jefe y mi patrocinador —sonrío pese a todos nuestros problemas sentándome en la silla y viendo las noticias —solo uno aseguró poder tener algo, estoy en espera de respuestas.
—Yo también he hecho lo propio, sin resultados —las noticias de las dos capturas estaban siendo transmitidas.
Lo siento detrás de mí y apoya sus manos en mis hombros. Observando como nuestros planes se vuelven polvo en nuestras narices y no podemos hacer nada por impedirlo. Esperaba estuviera realmente dentro de los incinerados, por que hizo todo gracias a mí y no le tembló la mano para dañarme. En realidad, creí que había sido mi relato fue creíble.
—Desde la una están en esas, cada que escucho esto siento que me derrumbo más y más—me toma en brazos y me deja en la cama, mientras da ligeros besos en mi cuello —No debí hacer esa póliza, lo sé, pero fue la mejor manera de dejarte con dinero.
El enojo hacia él ha pasado, como ocurre siempre que hace algo mal. Roy sabe cómo hacerse perdonar o quizás soy muy blanda con él.
—No quiero dinero Roy, te quiero a ti —aclaro abrazándolo —esto no debió suceder.
—Mi pequeña —murmura abrazándome.
Desde la edad de quince años fui presentada a David, mi rebeldía en el estudio, comportamiento con mis hermanos, compañeros de clases y padres, los hizo pensar que necesitaba de oración. La limusina que transportaba a El Iluminado estaba parqueada en los jardines de la casa y eso le hizo pensar a mis padres que él estaba allí.
No era así, Brianna Gales, recibía la visita de su hermano Roy, fue ella quien dijo que su hermano podía hacer algo por mí. En muchas ocasiones y en su mayoría en los sermones, el pastor se desvivía en elogios por el hombre, llegando a decir incluso que era su reemplazo.
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CONFUSIÓN
Mystery / ThrillerTras ser culpado del asesinato de su familia y salir por falta de pruebas, Shark Dewand busca justicia, para ello viaja a la Gran ciudad en donde los constantes arrestos por confundirlo con otra persona le dan una idea de lo que sucede. Siguiendo e...