La doncella del Duque - RayAnna

Vol. 21

[jardin de los Vermillion]

-yo me había quedado viendo el collar la otra vez porque su color me recordaba a los ojos del joven Chris y usted- sonrió tímidamente.

-ahora que lo veo, parece estar hecho de amatista y zafiro, como el color de nuestros ojos- se quedó viendo el objeto.

-s-si- respondió aún con la caja en la mano- pero es bastante bonita.

-si nuestros ojos fueran gemas... La tuya sería la aguamarina, es bastante claro tal como el cielo- dijo con una mano en el menton.

La mucama se sonrojo, era un bonito elogio, no como los que compraban esclavos esos te elogiaban lascivamente o con intenciones oscuras.

-g-gracias, aunque aún si este collar me gustó bastante, no creo que sea adecuado tenerlos, si alguien viera a una mucama con este tipo de joya, pensaría que lo robo- trató de devolver el regalo.

-entonces guardalo, hasta que haya una ocasión necesaria, después de todo no creo que seas toda tu vida mucama- el azabache se cruzó de brazos.

Mientras que la rubia solo suspiro rendida.

-esta bien, lo haré, por el momento hay que regresar, sería mal visto que pase tanto tiempo a solas con una sirvienta- se rio y luego se dirigió hacia la mansión.

[...]

¿Qué rayos había hecho? ¿Enserio le regalo tan ostentosa joya? Se veía muy obvio lo que intentaba, a menos que Anna fuera ingenua.

¿Cuando fue que se empezó a sentir así? ¿Cuando fue que dejó de actuar en base a la razón? Toda esta confusión lo carcomia por dentro, sabía lo que era, lo sabía, no era idiota, pero aún así, nunca antes se había sentido de tal forma ¿enserio es así cuando la gente se enamora? ¿Realmente estaba enamorado? ¿O solo sentía curiosidad por el poder que ella tenía?

No lo sabe y posiblemente no lo sepa... A menos que le pregunte a un experto, no, mala idea, lo que haría su madre primero sería burlarse, luego dejaría volar su imaginación y al final le daría consejos. Tal vez lo mejor sea su padre.

-¿Padre?- llamo a la puerta de su oficina, cuando dio su voz afirmativa entró.

-¿sucede algo Ray? Normalmente no vienes a verme- sonrió brillantemente.

Algunas veces pensaba que Anna y el tenían una especie de parentesco o algo así.

-es... Una duda que tengo- desvío la mirada.

-te escucho- lo miro fijamente con una sonrisa.

-... Es complicado, pero... ¿Cómo es realmente el enamorarse?- no dio más vueltas y lo dijo, a lo que el castaño se sorprendio, imagino cualquier cosa menos esa pregunta.

-bueno, es una agradable sensación de poder hacerlo todo por el que amas, hay momentos de confusión o de sentirte fatal, es como el destino, impredecible- trató de definir o al menos darle una forma en palabras al sentimiento.

-si hubieran instrucciones sería más fácil- suspiro cansado.

-la vida no es tan simple hijo- el azabache devolvió la mirada levemente sonrojado.

-bien... G-gracias por aclarar la duda...- rápidamente el menor se fue dejando al ojiazul solo, suspiro, tal vez debería crear un libro sobre el amor, así podría ayudar un poco a su hijo.

"Es verdad al principio no la tomaba en cuenta, era como una mucama más, luego la empecé a investigar por su comportamiento, después familiarizamos bastante con lo de Chris y su bendición, finalmente mis pensamientos se fueron distorsionando hacia ella, de una forma que no se vería tan bien con un noble y su sirvienta".

Por el momento debería olvidarlo.

[...]

-oye Anna ¿como van las cosas con el joven amo Ray?- preguntó una compañera.

-¿de qué hablas?- estaba confundida.

-ya sabes, ustedes pasan mucho tiempo juntos, en navidad los duques por cortesía te invitaron ¿me equivocó?- hablo otra.

-bueno, si, pero fue en agradecimiento por el joven amo Chris- la muchachas estaban cosiendo unos delantales.

-¿entonces no sucede nada? ¿Y qué hay del joven amo Chris? O Lorenzo, que envidia, todavía que los duques te tratan bien, tienes a los chicos lindos detrás tuyo- otra más hablo cruzandose de brazos molesta.

-no es eso... Yo...

-¿cómo haces para tenerlos a todos? Oye, dejame unos a mi- reclamo una.

-por favor- quería detenerlas, esto se estaba saliendo de control, sus quejas y alboroto sobre ella, tenía miedo de que llegue a los oídos de la jefa de las mucamas.

-Anna- de pronto entró Ray a la habitación- necesito hablar contigo.

Gracias a su entrada las mujeres se callaron momentáneamente, más aún era audible sus susurros. Pero aún así no podía rechazar el llamado de su superior.

-dígame joven amo- respondió sin ánimos, raro en ella.

-¿sucede algo?- preguntó preocupado.

-... Ahh- ¿debería preocupar a su superior de los rumores de las sirvientas? Posiblemente a él no le interesen esas cosas, mejor no- no es nada, solo es cansancio.

-ya veo...- dijo no muy convencido- bien, te quería hablar sobre...- se quedó viendo una parte de su cabello.

-¿joven amo, sucede algo?- iba a voltear para saber que es lo que veía, pero el la detuvo.

-esta bien así- sin más el azabache habló.

-¿qué cosa?- ahora si estaba más confundida.

-en tu cabello- se acercó y entre sus dedos tomó una mariposa.

-woah, que bonita- admiro sus alas y luego el insecto voló.

-¿qué?- desde lejos alguien los veía- eso es imperdonable- desde su perspectiva veía la espalda de Ray y al frente de el a Anna, pero desde su vista se veía como un beso entre los dos cuando sólo hablaban- esa mucama.

Rápidamente el mayordomo principal fue hacia dentro de la mansión,entre indignación y furias.

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Y bien, hice al saskito el primero en caer okno xd. Creo que con el paso de la historia Ray me sale más OC :'u.

Ya veré que hago para remediarlo.

Oigan ¿creen en el fatal destino de alguien amable? Dios a veces es imperdonable, pero la víctima será aquel de ojos azules es deseable.

La rima me salió sola O-O☝️. Creo que esta fácil ¿o no? Xd