Park Jimin es un bailarín inseguro, aislado de la mayoría del pueblo, hasta que le presentan al pintor Jeon Jungkook, quien influencía su vida de una forma que le hace sentir libre. - Parece que siempre consigue lo que quiere, joven Park -. Lo enfrentó mientras tomaba asiento frente a él. - Es parte de mi encanto, señor Jeon. - Yo también tengo un par de encantos, joven Park. - Jimin, yo te sugeriría no tener mucho contacto con Jungkook, no tiene muy buena reputación que digamos -. Intervino el pintor, con el pincel a medio camino del lienzo. - ¿Eso es cierto, señor Jeon? ¿Tiene mala reputación? -. Preguntó con curiosidad el más bajo. Una historia en donde predominan los conflictos personales por estigmas dictados por la sociedad, los personajes se ven envueltos en situaciones donde deben preguntarse qué es lo correcto. ¿Será que deban escuchar a su corazón u obligarse a seguir las reglas?