Mi único y verdadero amor

7

Abro los ojos y veo que son las 9:30 no quiero levantarme de la cama quisiera seguir durmiendo, pero mi madre me ha dicho que hoy íbamos al supermercado de compras, mientras me pongo a pensar ¿cómo se irá a ver Louis? Suspiro y digo: obvio que se verá bien, él siempre ve se bien, me encanta tanto.

Dejo de pensar tanto y entro al baño. Me cepillo los dientes y entro en la ducha.

–Que agua de fría –grito dando un paso atrás. Entro a mi habitación y busco en el closet la ropa para ponerme.

– Max baja rápido –grita mamá.

– Voy –le digo.

Demoramos más de lo esperado, el supermercado estaba lleno y las filas para pagar estaban enormes por lo que tuvimos que esperar más de media hora para pagar.

Volvemos a casa y hacemos la comida.

Estoy como loca sacando toda la ropa del closet para escoger la que me pondré para la fiesta. Al final me decido por una falda color rosado pastel con una blusa beige y opté por ponerme unas botas negras de tacón grueso que me compré en navidad.

Le muestro a Emma la ropa que escogí para ir a la fiesta.

– Que lindo Max –responde ella.

– ¿Si me quedará bien? –le pregunto yo.

– Si bebé –me dice gritando de la felicidad.

– Gracias amiga –dije sonriendo.

– Louis va a quedar boquiabierto cuando te vea con esa ropa –me dice con una sonrisa.

– Ojalá que si –le digo con un suspiro.

Nos arreglamos y bajamos a la sala.

– Mamá baja que ya estamos lista –le grito desde la sala.

– Ya voy chicas –contesta ella.

Llegamos a la casa de Gael, estaba tan llena de gente que no le cabía ni un alma más.

– Chao mamá y no te preocupes por nosotras Zaid nos lleva –le digo.

– Listo, pero no lleguen tarde –asiente ella.

Entramos a la casa de Gael. En la sala estaba la mayoría de los chicos sentados, otros estaba jugando videojuegos y tomando, pero no veía a Louis con ninguno de ellos y es algo que se me hacía raro.

– Hola –les decimos Emma y yo al mismo tiempo.

Emma se sienta con ellos mientras voy a la cocina por un jugo para ella y otro para mí. Voy entrando a la cocina cuando veo a Louis abriendo una cerveza, me puse tan nerviosa que me estaba dando la vuelta para que no me viera cuando él volteó y me dijo:

– Hola Max que bonita te ves –me dice con una sonrisa.

– Muchas gracias –le dije toda nerviosa.

– ¿Quieres una cerveza? –me pregunta.

– No gracias, vine por jugo –le contesté con una gran sonrisa.

– Ah bueno, nos vemos.

– Vale, chao.

No podía creer que me haya dicho que me veía hermosa, estaba tan feliz y nerviosa a la vez, salí corriendo en busca de Emma para contarle todo. La busco entre la multitud, pero no la veo por lo que decido llamarla.

– ¿Dónde estás? –le pregunto.

– Estoy acá en el parqueadero esperando a Zaid, ya vamos –responde ella.