Una lucha constante (Eustass Kid)

Capítulo 29

El pueblo se había vuelto un caos en el momento en el que habían sonado las alarmas del palacio. Todo estaba tranquilo, los pueblerinos estaban bailando y cantando por las calles, había un mercado nocturno a rebosar y era imposible no tener nada que hacer. La llegada a la isla había sido antes de lo que esperaban, y la fiesta del pueblo no les iba a dejar recopilar información tranquilos, y menos si los marines estaban en cada esquina.

A Neith le habían encargado hacer las compras junto a Toshio y Spike, que eran los que menos llamaban la atención y los que tenían menos posibilidades de matar a todo el pueblo por antojo, pero Kid no podía estarse quieto en el barco y, bajo la condición de estar de incógnito y actuar y vestir como tal, Killer no se opuso a ello, aunque tampoco es que podría haber parado a su capitán de hacer lo que quisiera. El plan era reabastecerse lo antes posible para seguir su camino hacia Sabondy a la mañana siguiente.

La plaza central del pueblo estaba llena de puestos donde comprar comida, así que aprovecharon la oportunidad y compraron todo lo que pudieron hasta que, mientras Spike intentaba regatearle el precio de unas hortalizas a una señora de un puesto y Toshio vigilaba a Kid mientras él intentaba robarle un arma a un vendedor ambulante, la mujer vio una cara conocida entre la multitud.

-¿Sasha? -preguntó intentando llamar la atención de la chica.

-¡¿NEITH?! -respondió la pirata acercándose a ella y abrazándola- ¿Cómo tú por aquí?

-Ahora soy pirata, de alguna forma tenía que salir de la isla -respondió sonriente la rubia -¿Lleváis mucho aquí?

-Más de lo que deberíamos, pero teníamos cosas que hacer.

Sasha iba a seguir hablando cuando una alarma procedente del castillo sonó por todo el pueblo

-Mierda -dijo Sasha mirando el castillo- Me tengo que ir, mi capitán ya la ha liado, un placer volver a verte -sonrió antes de correr hacia el castillo esquivando a todo el que podía.

A Neith no le dio tiempo a reaccionar hasta que ya se había ido y su capitán y sus nakamas se encontraron a su lado y su amiga ya no estaba a la vista.

-Volvamos al barco, las cosas se van a poner feas y quiero restregarle a Killer en su careto que se lo que es el autocontrol -dijo Kid, que había dejado su característica chaqueta y gafas en el barco y se había puesto una camiseta para no dar tanto el cante. Toshio y Spike le siguieron hasta que Neith habló

-Capitán, ella está aquí. -dijo haciendo que todos parasen en seco mientras los ciudadanos intentaban todos volver a sus casas.

-¿Cómo?- preguntó Kid dándose la vuelta lentamente hasta fijar su mirada en la nueva recluta.

-Acabo de ver a Sasha, la chica que la acompañaba. No le he podido preguntar porque ha sonado la alarma y ha salido corriendo hacia el castillo.

El pelirrojo no necesitó ni un segundo más para correr hacia el castillo.

~Mientras tanto, dentro del castillo~

Las salidas estaban todas protegidas por guardas armados y escapar del castillo era imposible en esas circunstancias, Penguin acababa de llegar con el resto de sus nakamas en el castillo cuando sonó la alarma, así que tuvieron que acelerar la huida y dejar al capitán y a Hécate detrás, confiando en que podrían salir de allí.

Para cuando Sasha llegó, el castillo estaba hasta arriba de guardias y marines y no podría ayudar en la huida. Se encontró a los demás nakamas en la calle principal, que todavía estaba hasta arriba de gente intentando irse de allí.

-Sasha, pasamos al plan C. Nosotros nos vamos al submarino, tu prepáralo todo para que el capitán use su habilidad en el sitio acordado.

-Okey, tened cuidado, la marina se empezará a movilizar.

El capitán de los Heart Pirates es un hombre calculador y en ningún momento dejaría que nada se le escapase, por eso la existencia de hasta 4 o 5 diferentes planes no era extraña. Dependiendo de la situación la tripulación se adaptaría a uno de ellos y no sufrirían bajas innecesarias.

Sasha se puso en marcha tan rápido como pudo esquivando a los civiles. El plan C consistía en la huida de Hécate y Law con la Ope Ope no Mi en caso de que les pillasen. La dificultad era aparecer en un sitio sin verlo y sin que los guardias los vieran, por lo que acordaron un callejón que Law había decidido personalmente y que estaba lo suficientemente cerca del castillo como para que no les pillasen.

Por otro lado Law y Hécate corrían por el castillo evitando los guardias a toda costa y buscando un sitio tranquilo donde poder utilizar su habilidad. Pasaron 10 o 15 minutos hasta que pudieron evadirlos lo suficiente. Law no dudó en agarrar la mano de Hécate y se concentró todo lo que pudo ignorando los gritos de los guardias que se acercaban.

-Room -susurró- Shambles -Y en un abrir y cerrar de ojos la pareja ya estaba en el callejón junto a Sasha.

-¿Qué demonios ha pasado? 

-Un contratiempo -respondió el capitán

-Han pillado a Law.

-¡HÉCATE! 

-¿Queee? Para una vez que no soy yo.

-Okey, luego me cuentas para que podamos burlarnos de él, pero ahora tenemos que irnos, la marina está por todas partes. -dijo Sasha quitándole los planos a Hécate facilitándole el movimiento.

-Sasha, tu irás directa al submarino, no mires atrás. Hécate, tu serás su guardaespaldas, protégela a toda costa. Yo crearé una distracción. Dadme 15 segundos y salís corriendo.

Law no dudó un segundo en salir corriendo y, creando otra vez un room, empezó a hacer que los objetos levitasen llamando así la atención de los guardias de por ahí. Mientras Hécate se quitaba los zapatos y se los daba a su amiga para poder seguirle el ritmo y poder usar sus habilidades mejor.

-¿Preparada? -preguntó Sasha ajustando su agarre sobre los planos y los zapatos de su amiga

-Nací preparada nena.

Y así salieron corriendo las dos jóvenes hacia el puerto. El capitán había llamado la atención de la mayoría, pero un par de marines las vieron correr y no dudaron en seguirlas y dispararlas, a lo que Sasha siguió corriendo mientras Hécate se paraba en seco para distraerles. Movió su pie derecho en dirección a sus perseguidores y dobló las rodillas para mantener el equilibrio y una posición fija. Con los brazos en posición de defensa adelantó el pie izquierdo haciendo que dos rocas se elevasen en el aire y, con el pie derecho golpeó las dos enviándolas en dirección a sus enemigos. En cuanto volvió a tener los dos pies en tierra elevó los brazos haciendo así una muralla de piedra para que no les pudieran seguir y siguió corriendo tras su amiga.

En menos de cinco minutos las dos chicas estaban en la entrada del puerto, Law se había teletransportado allí y las estaba esperando antes de dirigirse al submarino.

-Habéis tardado

-Nos han retrasado, pero no ha sido mucho problema.

Y con otro Shambles los tres estaban ya en la cubierta del submarino, entrando a este y saliendo de allí lo más rápido posible. Lo que no sabía la bruja era que, en el último segundo, justo antes de teletransportarse, él la había visto. Un momento estaba allí, con su hermoso pelo marrón recogido y con un vestido rojo que la hacía brillar aún más, y al parpadear ya no estaba. Podría haber sido una ilusión, su cerebro jugándole una mala pasada, pero los que le acompañaban también la habían visto desaparecer de un instante a otro.

Cualquiera supondría que el pelirrojo se habría vuelto loco y lo habría destruido todo, pero no fue el caso. No se había dado cuenta de lo que la echaba de menos hasta que la había visto en frente suya. Tampoco había asimilado que todo eso era cierto, que no estaba persiguiendo una ilusión, que ella de verdad estaba viva. Y ahí estaba, todavía mirando el punto exacto donde segundos antes había estado mientras sus caminos se volvían a separar, pero él sabía que no sería por mucho tiempo, pues en a penas unos días llegaría a Sabondy, y allí podría volver a verla.