Capítulo 2

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Narra Hécate:

Han pasado dos días desde la llegada de esos piratas que supuestamente destruyen toda isla que pisan y no ha habido ningún cadáver, así que, o están siendo muy amables, o el periódico es poco fiable.

He seguido con mi rutina diaria y siempre podía ver al capitán mientras bailaba. Es extraño, nunca pensé que a los piratas les gustase el baile, aunque igual es uno de esos pervertidos...

En fin, prefiero no pensar en ello y centrarme en el trabajo. Desgraciadamente para mí, hoy mi turno de trabajo es por la noche. No voy a mentir, a veces me lo paso en grande en ese turno, pero normalmente tengo que lidiar, con peleas, borrachos e insinuaciones. Las últimas siempre las rechazo con violencia y mi jefa acaba regañándome, pero el enfado le dura poco porque tengo razón.

Miro el reloj que marca las 22:00 y suspiro, mi turno termina a las 2:00, todavía queda noche...

Voy a la barra porque ninguno de los clientes parece necesitar nada cuando, de repente, la puerta se abre y entran los piratas de Kid. Bueno, el capitán y tres nakamas. Ellos se acercan a una mesa a esperar que les atienda.

-Otra noche que vuelven - dice mi jefa, Nanae

-¿Han venido las noches anteriores? - pregunto sorprendida porque, vamos a ver, nadie me ha dicho nada en los turnos de mañana y, en principio, esperaba que destruyesen el bar en cuanto entrasen.

- Sí, no arman mucho jaleo, así que de momento no parece una noche movidita. Corre, ve a atenderles para que parezca que de verdad trabajas.

- Eres una persona cruel jefaaaa. - Cojo la libreta y un boli y me acerco a su mesa - Hola, bienvenidos a "La taberna de cristal", ¿qué van a tomar?

-Tú eres la chica de la plaza. La que se pasa las tardes bailando. Hoy no estabas. - dice el capitán sin tapujos. Sí que es directo el tío.

-Eee... no. Cuando tengo turno de noche no voy a bailar. ¿Te gusta cómo bailo? - respondo mirándole fijamente a los ojos.

- Yo jamás he dicho tal cosa. - responde tajantemente.

-Querríamos cuatro botellas de sake -responde la pregunta importante un enmascarado que asumo que es Killer, el soldado masacre, por los carteles de "Se Busca" que he leído.

- Muchas gracias, las traeré enseguida -sonrío amablemente y me vuelvo a la barra a por lo que habían pedido. Tras cogerlo vuelvo a su mesa y les entrego una a cada uno- Disfruten de la bebida.

~Dos horas después~

Definitivamente voy a tener que cargar con algún borracho porque en este bar la gente no parece cansarse de la bebida.

Por un lado están los aldeanos que, al ser sábado, aprovechan que al día siguiente no tienen que trabajar y beben de más. Y por otro lado están los piratas, que beben mucho de por sí.

Me siento detrás de la barra a descansar un rato mientras miro a Nanae. Una mujer de unos 40 años que sigue en forma y siempre está trabajando. Es sorprendente cómo ha conseguido llevar adelante un negocio en un pueblo como éste. Tiene como norma contratar a otras mujeres por lo que las 7 trabajadoras somos todas mujeres y hoy estamos todas de servicio.

Es agotador tener que repartir comida y bebida cuando todo animal te está mirando el trasero e intentas que no toquen nada. Claro está, cuando se sobrepasan ninguna nos quedamos de brazos cruzados. De todos modos no hay muchos incidentes de esos, aún estando rodeadas de hombres no parecen intentar nada, salvo unos que, como si los hubiese invocado, entran por la puerta del bar callando a todo el mundo: los Marines. Todo el mundo sigue en silencio mientras andan hasta el centro de la taberna.

- Vaya ... supuse que habría más ambiente en un bar. ¿Qué pasa? ¿Os ha comido la lengua el gato? -dice el que parece ser el hombre al cargo.

- Sabéis de sobra que los marines no sois muy bienvenidos en este pueblo, y agradecería que os fuerais de mi establecimiento. -responde de forma directa e incluso agresiva Nanae.

- Me encantaría Nanae, odio este pueblucho como sus habitantes me odian a mi, pero mis compañeros y yo nos estamos tomando un descanso antes de volver a patrullar, y se nos ha ocurrido pasarnos a tomar algo. No creo que haya ningún problema, ¿verdad?

Sin recibir respuesta se sientan en una mesa él y cuatro marines más a esperar que les atiendan mientras el bar poco a poco vuelve a estar igual de animado de lo que estaba antes. Una compañera se acerca a preguntar por su pedido e intenta evitar los toqueteos de los soldados. Los marines de esta isla son horribles, tratan a las mujeres como posesiones y les dan igual los aldeanos, solo les importa el dinero. Afortunadamente solo se toman una y disponen a marcharse cuando agarran a una camarera y empiezan a arrastrarla entre los 5. Nanae saca una pistola y dispara al techo haciendo el silencio en el bar.

-Soltadla o el siguiente disparo irá a vuestras cabezas.

La tiran al suelo y ella sale corriendo hasta refugiarse detrás de la barra.

-Ya está, no hay que ponerse así, pero como he hecho lo que me habéis pedido ahora me devolveréis el favor. He recibido órdenes de arrestar al pirata Eustass Kid y llevarlo al cuartel. Nadie tiene por qué salir herido, si lo entregáis os dejaremos tranquilas y no volveremos por aquí.

Yo estaba justo al lado de su mesa porque acababa de servirles una ronda de cervezas cuando todo el mundo se gira a esa mesa, yo incluida. Supongo que el capitán pelirrojo esperaba que nos lanzásemos hacia él y sus nakamas porque movió  su brazo hasta el cinturón de su pecho para alcanzar la pistola mientras me mira directamente a los ojos, supongo que esperando a que saltase. Mientras, todos los nakamas alcanzaban silenciosamente sus armas.

-No creo que entienda las normas de este establecimiento capitán -dije yo en un tono amenazante. Kid me miró extrañado y yo giré la cabeza para aclarar que me dirigía al Marine - los clientes en este bar son todos iguales, no importa lo que sean, no entregamos a nadie.

Todos los presentes en el bar gritaron para respaldar lo dicho bajo la sorprendida mirada del pelirrojo. Supongo que nunca los ha defendido nadie.

-Puedo arrestaros a todos si quisiera por obstrucción a la justicia. DEBERÍAIS SER VOSOTROS LOS QUE DESEÁSEIS QUE NOS LOS LLEVÁRAMOS. O INCLUSO QUE OS TOMÁSEIS LA JUSTICIA POR VUESTRA CUENTA Y LOS ASESINÁRAIS POR SUS CRÍMENES. -dijo el capitán cada vez más enfadado. Él y su patrulla son los que más  daño han hecho a este pueblo ¿Y LOS CRIMINALES SON LOS RECIÉN LLEGADOS PIRATAS?

-¿Éstas incitando a unos civiles a que asesinen a todo aquel que incumpla la ley?-pregunta Nanae apunto de empezar la mejor pelea que se podría ver en el bar.

-SI

Un escopetazo.

Un marine MUERTO.

Una lucha constante (Eustass Kid)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora