Una lucha constante (Eustass Kid)

Capítulo 16

Una sombra de 3 metros sin cara y, en la cabeza, una boca con 3 hileras de dientes y que llega hasta un par de ojos con iris amarillo y lo que se supone que es blanco de color negro. A eso súmale los tentáculos que le salen de la espalda que se alargan hasta los 6 metros. Eso era lo que estaba justo delante de Hécate y, más que miedo, se sentía aliviada. En una situación normal esa apariencia de tranquilidad podría parecer una parálisis causada por un estado de shock, pero éste no era el caso. Salem era lo que comúnmente se conoce como un familiar: espíritus mágicos que protegen al brujo que acompañan.

El espíritu atacaba a todo enemigo que sus tentáculos podían alcanzar. Nadie oponía resistencia, nadie se movía ante el asombro por tal monstruo, aunque nunca lo llaméis así, el pobre Salem se siente muy mal si lo hacen.

Algunos piratas de Kid se dieron cuenta de cómo únicamente atacaba a sus enemigos, por lo que se aprovecharon de la situación y mataron a todo pirata enemigo que le quedaba a Salem. En 5 minutos la pelea había acabado y todos los piratas de Kid se encontraban en un radio de 10 metros alrededor de Hécate y su familiar, completamente armados y listos para atacar. Alaric y Toshio, conscientes de la situación, intentaban calmar a sus nakamas, pero la única persona que llamó la atención a Hécate fue su capitán. El pelirrojo estaba en completa tensión, a punto de atraer todos los metales del barco, y con una expresión que podría identificarse como preocupación, o así lo quiso pensar Hécate.

Hécate se giró con sus últimas fuerzas hacia Salem, que estaba completamente quieto, evitando cualquier movimiento brusco que puediera hacer que todos lo atacasen.

-¿Estás bien? -preguntó Salem. Debido a su situación de espíritu familiar solo la mujer le entiende, todos los demás escucharon un gruñido y, como es lógico, lo tomaron como una amenaza.

-Estoy bien, relájate -respondió ella en voz alta, lo que confundió a algunos mientras otros dieron por supuesto que iba dirigido a ellos.

Salem poco a poco iba escondiendo sus tentáculos y se giró hasta mirar a su protegida de frente, claro está, con una diferencia de 3 metros. Los demás no tomaron como una buena señal que algo que se parece al mismísimo demonio se girase y mirase directamente a alguien tirado en el suelo que se está desangrando. Desde fuera es verdad que parecía como si fuese a matar a la cocinera.

Salem hizo un reverencia y acercó su cara hasta estar a unos escasos centímetros de la de la joven. Eso fue lo que desató a la tripulación. A unos metros de la escena se encontraba Kid, completamente ido, y siendo agarrado por Alaric y Toshio, que no dejaban de intentar relajar a los demás, aunque completamente en vano.

Hécate alargó el brazo para poder tocar la cabeza del anteriormente gato, como si fuese a acariciarlo y susurró:

-No se requieren más tus servicios

Poco a poco Salem se transformó en el gato que conocían, dejando a todos sin palabras. Esta simple acción es un hechizo que apenas requiere ni magia ni esfuerzo alguno, pero hay que tener en cuenta la situación de Hécate, que llevaba mínimo unos diez minutos desangrándose. Ésto le llevo a desmallarse en frente de todos, que no sabían cómo actuar frente al gato que se acababa de acurrucar junto a su compañera. 

Toshio no tardó ni un segundo en acercarse a su amiga para atenderla, pero los demás titubearon. ¿Qué debían hacer? ¿Acercarse enfurecería a la bestia?

-¡HEAT¡-gritó Toshio- ¡TRAE UNA CAMILLA! ¡RÁPIDO!

El curandero ordenó, pero Heat no sabía reaccionar, solo observaba el cuerpo de su amiga, intentando asimilar lo que acababa de pasar.

-¡¿A QUÉ ESPERAS PEDAZO DE IMBÉCIL?! ¡CORRE¡ -ordenó Kid sacando a todo el mundo del trance. Él, tan rápido como pudo, se acercó a Toshio, claramente preocupado por ella.