EL SELLO +18 - Carlota Xop

13. Supervivencia

TAMARA

El chasquido de madera quemada me traslada a mis añoradas noches del seco sur.

Viendo danzar el fuego ante mis ojos, espero aislada del resto del mundo para despertar del trance demasiado largo para tratarse de una pesadilla.

– Tamara. – levanto la cabeza divisando al que ya se ha convertido en la persona que más confío en la nueva manada. – ¿Cómo te sientes?

Muevo los hombros dedicándole una media sonrisa al moreno. – Diferente, – río nerviosa – pero eso no es nada nuevo. – Me devuelve el gesto y se acuclilla para tomar asiento a mi lado.

– Es extraño, ¿verdad? – me da unos segundo para que yo asienta. – Sentir que tu vida ya no te pertenece...– Río desdeñosa atisbando a mi nuevo Vínculo en la lejanía.

– Sí. – espeto decaída sin dejar de ver a la joven hada de tez azulada. Gabriel sigue mi recorrido viendo interactuar a nuestras parejas.

– Ahora te pertenece la de otra... – Madison se vuelve apartando su rubio cabello para saludarme tímidamente. Le devuelvo el saludo avergonzada y hago como si conmigo no fuera la cosa. Debo haberme quedado demasiado tiempo mirando.

–  Sí, la de una hada. – Suspiro abatida llevándome las manos a la cabeza. – Estoy, estoy tan confusa, Gabi... Ya flipe cuando supe de vuestro vínculo interespecie... - señalo a Charly y él sonríe asintiendo con una sonrisa de oreja a oreja – y ahora yo también y... – me relamo frustrada. Nuestras parejas conversan felicianas por volver a juntarse. – Sabes, - exhalo para coger fuerza. – antes de que Tahani y Hugh se vincularan, creía que él y yo acabaríamos juntándonos y procrearíamos para darle un heredero al Clan de los renegados.

Mi interlocutor redirecciona su atención frunciendo el ceño. – No me mal interpretes... Jamás sentí nada por él. De hecho, jamás había sentido nada por nadie hasta ahora... – gruño lanzado una piedra a la fogata frente a nosotros. – No sé, solo...

– Sí lo que te preocupa es la procreación con Madison... Las hadas no necesitan ser fecundadas para tener hijos. – Enrojezco por la rotunda evidencia de mi monólogo y Gabriel se ríe de mí golpeando repetidamente mi espalda. – Tranquila Tami, acabarás viendo que son una especie maravillosa...

Carraspeo asintiendo para poner fin a mis inseguridades.

– De eso estoy segura. – él se vuelve para verme. – Verás, – susurro rogando cambiar de tema. – Pasó algo muy extraño en el río... Pude... Pude respirar bajo el agua, Gabi... –  casi susurro por el miedo. –  Sé que suena a locura pero... – El tembleque del suelo nos advierte y de forma inconsciente, me incorporo para buscar a mi recién vinculada. –  ¿Qué ha sido eso? – pregunto volviéndome hacía el porvenir.

La tienda de campaña de nuestros Alphas reluce por el brillo de la protección de Char. –  No te alarmes, Tami... – ¿Ahora todos me llaman así? Ryo aparece posando su mano en mi hombro. –
Sólo son Sean y Cassie reconciliándose...

Llega el cambio de turno y junto a ellos, Tahani y Hugh. No entiendo por qué, pero me crispo nada más verlos. Madison me mira insegura y Charly da un paso al frente para protegerla.

La desconfianza de mi antiguo líder nos impregna a todos, y eso; no hace más que acentuar mi postura defensiva.

SEAN