Capítulo 22.

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Cuando Jungkook entró aquel día al edificio, caminando directo hacia su casillero, no había manera de que su sonrisa fuera escondida, brillante y reluciendo la alegría que sentía.

—¿Vas a perdonarlo, Verdad?.—su amigo comentó a su lado.

Jungkook lo miró confundido—.¿A que te refieres?.

—Jimin.—solo dijo.

Jungkook suspiró, encogiéndose de hombros—.No lo sé, solo estoy dejando fluir las cosas...un poco.

—Uhm.—Yugyeom solo murmuró.

—Pero, debes admitir que fue un gesto bonito el de ayer.—Jungkook dijo con una sonrisilla bailando en su rostro.

Yugyeom rodó los ojos, empujando a Jungkook por la espalda para que se apresura por el pasillo, su amigo estaba totalmente enamorado.

—Si tu lo dices.—alzó una ceja—.Por cierto, ¿Tu hermano no dijo nada sobre el ramo?.

Jungkook lo miró, mordiendo su labio inferior con nerviosismo—.No lo vio, cuando llegué a casa aún no había nadie, mi madre aún no volvía de su turno en el hospital y Junghyun tardó en la universidad.

—¿Entonces?.—Yugyeom inquirió.

—Lo llevé a mi cuarto y lo dejé sobre mi mesa.—Jungkook sonrió—Nadie lo vio, pero estoy seguro de que Mamá lo verá hoy.

—¿Por qué piensas eso?.

—Hoy tiene turno de noche, a veces aprovecha para organizar la casa por la mañana y estoy seguro de que entrará a mi habitación para asegurarse de que todo está limpio y ordenado.—suspiró—.Solo espero que no haga muchas preguntas.

—¿Y cuando Junghyun lo vea?.—alzó las cejas en su dirección.

Jungkook resopló—.No lo sé, espero que para ese entonces ya se me ocurra algo.—hizo una mueca—.No estará nada contento si se entera de que fue Jimin quien me lo dio.

—Podría pegarle un par de puñetazos como la última vez.—se burló.

Jungkook le frunció el ceño—.Eh, eso no fue divertido.

Yugyeom alzó los hombros, restándole atención y caminando de una forma divertida que hizo reír a Jungkook, quien se paró en mitad del pasillo para verlo caminar de aquella forma, Yugyeom podía ser muy tonto cuando quería.

Apresurándose, quiso alcanzar a su amigo pero un fuerte golpe en el brazo lo hizo detenerse, observando a la persona con la que había chocado.

—Ten cuidado, imbécil.—Nancy le gruñó.

Jungkook frunció el ceño—.Tu también mira por donde caminas, Noona.—dijo la última palabra con desagrado.

Nancy le echó un vistazo dejando muy en claro el desagrado que sentía por el, aunque aquel día parecía haber aumentado a trompicones, sonrió de lado pensando que podría ser por la escena que protagonizó con Jimin el día anterior.

A Nancy debía arderle la envidia y los celos por ver cómo Jimin le daba aquel enorme ramo de rosas blancas y rojas.

Colocando bien su mochila sobre su hombro pasó por su lado, echándole un último vistazo.

—Que tengas un buen día, Noona.—le dijo, apresurándose en alcanzar a Yugyeom quien seguía dando pasos extraños y ajeno a lo que había sucedido.










(......)










Jungkook se sorprendió cuando el timbre había resonado, indicando el final de las clases, aquel día se le había pasado volando, no se le hizo pesado como los anteriores. Tal vez fue porque no prestó atención a ninguna clase y se la pasó haciendo tontos dibujos de enamorado en su cuaderno, recibiendo de vez en cuando un codazo por parte de su amigo.

Reconquistando a Jungkook. (Jikook). ✅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora