Reconquistando a Jungkook. (Jikook). ✅

Capítulo 52.

Jungkook estaba sentado en la cama de Jimin, no sabía cuánto tiempo llevaba ahí sentado, pensando en todo lo que había pasado en las últimas horas, desde que fue a ver el partido hasta ese momento.

En el momento en el que Nancy se había ido y Jimin había cerrado la puerta, el había salido y se había sentado en el borde de la cama sin decir nada, solo pensando, ni el ni Jimin habían hablado, ninguno había dicho ni una sola palabra.

Jimin seguía apoyado contra la puerta, mirando el suelo, una expresión extraña en su rostro.

¿Cómo alguien era capaz de hacer todo eso?.

Jungkook abrió la boca varias veces, queriendo decir algo, queriendo disculparse por no haberle creído, por haber creída en las mentiras de Nancy, pero no se atrevía, Jimin debía estar furioso.

Ni siquiera estaba seguro de que Jimin quisiera seguir con el.

Todo era tan confuso y extraño en ese momento.

¿Cómo alguien podía planificar algo así para separarlos?.

Su mirada subió de golpe cuando sintió a Jimin moverse, viendo cómo se alejaba de la puerta para colocarse frente a el.

—Ahora puedes irte si quieres.—le habló con voz plana.

Jungkook sintió como si le hubieran dado una patada en el estómago, apretando sus labios en una fina línea, levantándose lentamente con la cabeza gacha y caminando con lentitud hasta la puerta.

Su muñeca fue sujetada con fuerza y se atrevió a mirar el agarre que la mano de Jimin ejercía en esa zona, sintiéndose nervioso.

—¿Realmente vas a irte?.—Jimin sonó incrédulo.

Jungkook soltó un suspiro, soltando el aire contenido en su pecho y se giró hacia Jimin soltándose de su agarre y abrazándolo con fuerza, metiendo la cabeza en su cuello y llorando nuevamente, perdiendo la cuenta de cuántas veces había llorado en la última hora.

—No quiero irme.—susurró contra su cuello—.Lo siento.

Jimin relajó sus músculos, apretando a Jungkook contra su cuerpo, caminando hacia atrás hasta que la parte trasera de sus piernas chocó con la cama y calló sentado, Jungkook subiéndose a su regazo, negándose a soltarlo, colocando cada pie a un lado del cuerpo de Jimin y rodeando su cuello con fuerza.

—Se supone que este debía ser un día bonito.—Jimin murmuró contra su rostro.

—Lo siento.—Jungkook se disculpó con pena—.Ha sido culpa mía, debí creerte, debí confiar en ti...pero todo parecía ser verdad.

—No es culpa tuya.—Jimin apretó su cintura—.Nancy lo planeó todo muy bien y actuó de maravilla.

—No debí creerla, no debí caer en su juego.—se alejó del cuello de Jimin, mirándolo con las lágrimas cayendo por su rostro—.Fui tan tonto al caer en su juego, tan idiota.

—Hey, ya está, no te culpes por eso, bebé.—limpió sus mejillas—.Deja de llorar, creo que has llorado suficiente por hoy.

A Jungkook se le escapó una pequeña risita—.Sentí que me rompía por dentro cuando os vi besaros...

—Yo no la besé.—Jimin corrigió.

—Si, quiero decir, cuando ella te besó y pensé que tú le habías correspondido.—aclaró—.Me sentí tan roto, Jimin, mi corazón se hizo chiquito y la sensación era tan dolorosa.—explicó entre sollozos sin apartar la vista de Jimin—.Me sentí destrozado.

—Ya.—Jimin empujó la cabeza del menor a su cuello de nuevo, acariciando sus cabellos tratando de calmarlo—.Siento no haber visto venir esto, debí imaginar que algo así pasaría.