Hero's Sacrifice #PGP2022

53

—Así que aquí estás.
​—¿Y eso que viniste a verme?
​—Quiero hablar contigo.
​—¿Vienes a unirte a mí?
​—¿Para acabar en una jaula como esa? Hasta crees.
​—¿Qué quieres, mortal?
​—No es como si estuvieras ocupado.
​—¿Y bien? ¿Por qué tanto empeño?
​—Tú dímelo. ¿Por qué me buscaste?
​—Eres la única que conozco con esos poderes y yo los quiero.
​—Pero tú tienes magia, yo no. Tengo limitaciones.
​—A mí no me lo parece.
​—Ahora entiendo por qué haces las cosas.
​—¿Por qué?
​—Buscas la aprobación...
​—¡Es mentira!
​—Eres el dios del engaño, ¿también te mientes a ti mismo?
​—No me hables así, mortal.
​—¡Malenalie! Podrá ser muy largo pero apréndetelo— espetó molesta dispuesta a irse, frenó en el último momento—. Otra cosa— volvió sobre sus pasos—. No te enfrentaré directamente, a menos que tú lo hagas primero.
​—¿Por qué?
​—Lo mismo que tú: quiero respuestas.

***

—¿Nieve?— dudó Malenalie al extender el recipiente al dios del trueno.
​—No, gracias.
​—Es deliciosa, si no quieres de este sabor, en mi camarote tengo otros tantos sabores.
​—¿Nunca dejarás de comer, cierto?— se acercó Coulson.
​—Acertó, agente— sonrió luego de una cucharada.
​—Al menos ya no soy niñera— murmuró por lo bajo.
​—No, tus servicios son pésimos.
​—¿Sabes qué? Sí la quiero probar.
​—Adelante— le tendió de nuevo el bote.
​—Loki planea usar a Banner de algún modo, si está en el laboratorio, que no salga— escuchó a Nat por el comunicador—. Envíen a Thor y Malenalie— el dios se desconcertó aún más con la mención de ambos nombres—. Gracias, por tu cooperación.
​—Ya la oíste— dijo Malenalie al quitarle la nieve y comenzar a andar.
​—¿Qué están haciendo? — dudó Fury al entrar en el laboratorio.
​—De hecho nos preguntábamos lo mismo de usted— dijo Tony.
​—Creí que estaban localizando el teseracto— dijo Fury.
​—Eso hacemos, fijamos el parámetro y ya estamos buscando la señal, cuando se registre, lo ubicaremos en un radio de media milla.
​—Recuperarán su cubo sin líos, ni molestias. ¿Cuál es la fase dos?
​—La fase dos es que S.H.I.E.L.D. use el cubo para fabricar armas, lo siento, ya no pude esperar a tu computadora.
​—Rogers, reuní todo lo relacionado con el teseracto, no significa que...
​—Discúlpame, Nick, ¿qué me mentías?
​—Me equivoqué, director— el resto del equipo entró—. El mundo no ha cambiado.
​—¿Usted sabía de esto?— inquirió Banner.
​—Tal vez lo más apropiado sea alejarse de este entorno, doctor— dijo Natasha.
​—Yo estaba en Calcuta, lo suficientemente apartado.
​—Loki lo está manipulando.
​—¿Cómo? Está confinado en una celda especial— espetó Malenalie, de allá venía.
​—¿Qué es lo que se supone que usted hace?— dudó Banner.
​—¿No lo aduje para que me acompañara o sí, doctor?
​—No me iré solo porque esto los pone nerviosos...— dijo Banner.
​—Al menos a un laboratorio para usted solo, así le saco a Tony de encima— dijo Malenalie.
​—Ahora díganos por qué S.H.I.E.L.D. usa el teseracto para crear armas de destrucción masiva— dijo Banner.
​—Por culpa de él.
​—¿Mía?— dudó Thor.
​—El año pasado tuvo un visitante de otro planeta cuya gran batalla dejó devastado a un pueblo pequeño— dijo Malenalie.
​—Descubrimos, además de que no estamos solos, que nuestras armas, en comparación, son risibles— dijo Fury.
​—¿Qué dice? La tenían a ella, ¿para qué mandarla si no era suficiente?— espetó Tony.
​—Como medida de seguridad— dijo Fury.
​—Mi pueblo solo quiere la paz con su planeta— dijo Thor.
​—No son el único pueblo que existe, ¿o sí?— inquirió Fury—. Y no son la única amenaza, el mundo está repleto de personas que nadie puede vencer, tampoco controlar.
​—¿Como controlaron el cubo?
​—Su labor con el teseracto, fue lo que atrajo aquí a Loki y a sus aliados. Están anunciando a todos los mundos que la Tierra está lista para una guerra más avanzada.
​—¿Más avanzada?— dudaron Steve y Malenalie a la par, cada uno por razones distintas y ambos enfocados en lo mismo: el cubo.
​—Nos obligaron a actuar, teníamos que poner...
​—Destrucción nuclear, eso ayuda a calmar cualquier conflicto— dijo Tony.
​—Tony tiene razón, esa siempre es la respuesta cuando algo va mal: bombardear el lugar— dijo Malenalie.
​—¿Ya se les olvidó cómo amasaron su fortuna?— ironizó Fury.
​—Fabricar armas todavía sería parte importante...
​—Oye, espérame, porque ahora es sobre mí— dijo Tony.
​—Perdón, ¿qué no lo es siempre?— terminó Steve.
​—Las armas están desde sus tiempos, Capitán, no se le olvide que usted y mi padre lo son, solo que con usted sí resultó— dijo Malenalie.
​—Creí que los humanos eran más evolucionados— dijo Thor.
​—Disculpa, ¿nosotros fuimos a tu planeta a estallar cosas?— inquirió Fury.
​—Ella también tuvo culpa del daño— dijo el dios señalando a Madinaveitia.
​—¿De verdad son tan ingenuos? S.H.I.E.L.D. monitorea peligros potenciales— dijo la rusa.
​—¿El capitán América está vigilado?— cuestionó Banner.
​—Todos lo estamos— espetó Malenalie. Todos discutían entre todos, la pelinegra ignoró a su mejor amigo para enfocarse en el dios y apoyar a su amiga.
​—Habla de control cuando solo atrae el caos— dijo Thor.
​—Es su modus operandi— dijo Banner—. A ver, ¿qué es esto? Un equipo, es una mezcla de químicos que produce caos, somos una bomba de tiempo.
​—Usted tiene que apartarse— dijo Fury.
​—¿Por qué no dejan que el hombre libere tensión?— dudó Tony.
​—Tú, cállate— espetó Malenalie.
​—Sabes bien por qué no puede, cierra la boca— espetó Steve.
​—Tal vez quieras obligarme— dijo Tony.
​—Sí, muy fuerte con esa armadura— dijo Steve—. ¿Y sin ella dime qué eres tú?
​—Un genio, millonario, playboy, filántropo— enumeró Tony a la par que la pelinegra a su lado lo hacía con la mano, cuando ambos terminaron, chocaron puños.
​—Muchos que no tienen eso, valen diez de ti— dijo Steve—. He visto los videos, tú solamente peleas para ti mismo, dudo que siempre la cuentes a ella, fuera de la chica, no eres capaz de sacrificarte por otros, de acostarte sobre el alambre y dejar que otros pasen sobre ti.
​—Yo cortaría ese alambre— dijo Tony, Malenalie se encontró en disyuntiva, porque ella haría cualquiera de las dos cosas, dependía mucho de la situación que rodeara a ese alambre.
​—Siempre una salida, quizá no eres una amenaza pero mejor deja de aparentar que eres un héroe.
​—¿Un héroe, igual que tú? Eres un experimento de laboratorio, Rogers, lo que te hace especial y fuerte vino de una botella.
​—Ponte tu traje, veamos quién gana— dijo Steve, Thor comenzó a reír y Malenalie estaba preocupada por cómo terminaría la discusión.
​—Ustedes son tan banales y enanos.
​—Sí, somos un gran equipo— dijo Banner.
​—Agente Romanoff, escolte al doctor Banner de vuelta a su...
​—¿A dónde? Rentaron mi cuarto.
​—La celda solo era en caso de...
​—En caso de tener que matarme, pero es inútil, lo sé, ya lo intenté. Estoy harto, ya no quería sentir dolor, así que disparé una bala en mi boca y el otro sujeto la escupió. Seguí con mi vida, me concentré en ayudar a otras personas, estaba bien hasta que ustedes me metieron en este absurdo circo y pusieron a todos en riesgo. ¿Le cuento mi secreto, agente Romanoff, qué hago para conservar la calma?
​—Doctor Banner— llamó Steve.
​—Ponga el cetro en la base— dijo Malenalie. Un pitido sacó a todos del trance.
​—Ahí está— dijo Tony.
​—Lo siento, señores, creo que ya no habrá función después de todo— dijo Banner.
​—¿Localizaste el teseracto?— dudó Thor.
​—Yo puedo llegar antes que todos— dijo Tony.
​—Sí pero ahora somos un equipo— le reprendió su hermana.
​—Cállate, ¿sí? Desde que trabajas para él que solo...
​—El teseracto pertenece a Asgard— dijo Thor—. No hay humano que lo domine.
​—Pues ha viajado mucho entre los mortales— dijo Malenalie al dios.
​—No irás solo— dijo Steve al detener a Stark del brazo.
​—¿Tú lo vas a evitar?— dudó soltándose del agarre.
​—Ponte tu traje y averígualo.
​—No me da miedo atacar un viejo.
​—Ponte tu traje.
​—No puede ser— dijo Banner. Una explosión hizo caer a Natasha y Banner en un piso inferior, a Steve y Tony en el pasillo, a Malenalie y Thor en el cuarto adyacente.
​—Ponte tu traje— dijo Steve.
​—¿Todos están bien?— inquirió la pelinegra aún en el suelo. Las palabras de Hill la frenaron—. Yo voy.
​—¿Stark, oíste?— inquirió Fury—. Madinaveitia, te quedas donde estás.
​—Te ayudo— dijo Thor al sostenerla de ambos brazos.
​—Estoy bien— dijo la pelinegra mientras bajaban en busca de la rusa y el doctor.
​—Ese golpe no dice lo mismo— informó el dios, ella llevó sus dedos al lugar de donde provenía el dolor. Salía un poco de sangre.
​—No es grave— trató de reconfortarse a sí misma.
​—Debo llevarte a que te curen.
​—No, la misión es detener al hombre verde.
​—¡Ahora!— gritó el dios, Natasha se hizo para atrás y Thor tomó impulso para empujar a Banner a otro cuarto. Malenalie le puso un campo de fuerza a su amiga para que no la alcanzara el impacto.
​—Quédate ahí, vendré por ti— le dijo antes de avanzar y ver cómo Thor era despedido contra unas cajas. La pelinegra frenó a Banner con un campo de fuerza bastante fácil de romper para su increíble fuerza, dándole al dios el tiempo suficiente para llamar a su martillo y golpear a Hulk. Quien rompió el ala de un avión, Thor se agachó y Malenalie puso otro campo, esta vez el ala se rompió. Hulk tomó el martillo que fue lanzado contra él, tratando de detenerlo—. No, cariño, no eres digno.
​—¿Crees que es momento de burlas?
​—Tienes razón— dijo ella al retener al hombre verde con su telequinesis, Thor le dio una patada al rostro, tomó el arma y lo ahorcó.
​—Ve por Natasha— exclamó Thor desde el laboratorio.
​—¡Ten cuidado!— gritó asomándose por la abertura y regresó sobre sus pasos.
​—Tu cabeza— dijo Natasha al ver la sangre.
​—Te acaban de dar la paliza de tu vida, que no te preocupe un poco de sangre— sonrió la pelinegra.
​—¿Estás bien?
​—¿Y tú?
​—Me duele todo.
​—Vamos por...
​—Aquí agente Romanoff, te copio— dijo Natasha luego de prestar atención al comunicador.
​—No, tú debes...
​—Ve con Stark, nos vemos arriba— dijo Natasha al pararse. Ambas corrieron en direcciones distintas. Vio cómo steve batallaba con unos intrusos, así que con su telequinesis los mandó a volar—. Sube, yo los detengo.
​—Me vendría bien una mano— dijo Steve, quien colgaba de un cable.
​—Mierda— dijo al darse cuenta.
​—Capitán, la palanca— dijo Tony.
​—Un minuto— dijeron el Capitán y la pelinegra. La primera se estiraba por el rubio cuando unos disparos los sorprendieron, así que se giró a tirar a uno de los tiradores mientras Steve alcanzaba la palanca y Tony aplastó al otro con todo su peso.
​—Perdimos al agente Coulson— escucharon por el comunicador. Malenalie se paró del suelo incrédula. Casi pierde el equilibrio, su mejor amigo mandó traer un equipo médico para que revisara su cabeza.

Espero disfruten este capítulo, nos leemos la siguiente semana sin falta.
Mily