XLVI

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Shawn

Insisto que no es necesario que Noah me ayude con las cajas, pero como es su costumbre, no obedece y busca las que son más livianas para poder cargarlas. Esperamos el ascensor y cuando este llega y las puertas se cierran Noah se esmera al besarme, aunque las cajas en medio de nosotros dificultan el trabajo, sonríe con entusiasmo y no ha dejado de hacerlo desde que llegué, Noah está feliz de verme, sin embargo... me habría encantado que aceptara mi propuesta. De hecho, fue muy buena al rechazarme.

Noah se está esmerando demasiado para complacerme y eso no me gusta, no en este ámbito. Sujeto sus caderas sin usar demasiada fuerza y corto el beso, veo sus mejillas sonrojadas y aquel brillo intenso en sus ojos, ella acaricia mi rostro antes de recostar la cabeza en mi hombro, jalo de la palanca para poder tener más espacio dentro del auto y no estar tan apretados. Noah suspira y aunque no estemos haciendo nada me reconforta tenerla en esta posición, la abrazo antes de volver a preguntar.

-¿Entonces?- Murmuro sobre su cabeza, la escucho suspirar y vuelvo a sentir sus labios sobre los míos.

-Quiero casarme contigo- Mi corazón pareció latir más rápido de lo que alguna vez creí posible- Pero no ahora...- Algo me decía que no sería tan fácil.

-¿Por qué no?

Entendí la razón, Noah ha vivido muchas cosas que han llegado a marcarla y a tener el carácter que tiene ahora. No quiere depender de mí económicamente, desea terminar sus estudios antes de llegar a comprometerse hasta ese punto conmigo; quiere cumplir sus sueños antes de empezar los que tiene conmigo y yo no tengo problema con eso pues de todos modos la pregunta fue un impulso, ni siquiera tenía el anillo. Además, estoy completamente seguro que estaremos juntos para aquel entonces.

-¿Después de tu graduación?- Susurro en su oído.

-Me casaré contigo después de mi graduación- Afirma mientras peina mi cabello.

-De acuerdo, entonces... volveré a proponértelo ese día.

-Te dije que podía solo con eso.

-Y yo te dije que quería ayudarte.

El desastre a nuestro alrededor es evidente, parece que la mudanza nos tomará algunos días más. Cajas y más cajas, mamá prometió que estarían aquí mañana para ayudarme con lo que falta. Noah me ayudó a limpiar todo antes de acomodar los muebles.

-¿No crees que sería buena idea empezar por la cama?- Pregunta, refiriéndose a la caja que la contiene por partes.

-Si es lo primero que quieres estrenar, por mí está bien- Noah se ríe de mi ocurrencia y niega mientras me envía a buscar las tijeras- Mis padres están ansiosos por verte- Le recuerdo.

-Yo también los extraño mucho, especialmente a tu mamá.

Mamá la adora y estoy seguro que no aceptaría a nadie más que no sea ella, simplemente piensa que Noah es lo mejor para mí y yo estoy de acuerdo.

-¿Cuándo traerás tu ropa?

-En cuanto terminemos de ordenar- Responde, sonrío y me inclino a besar su cabello antes de seguir con lo que estaba haciendo, mi trabajo empieza en tres semanas y quiero tomarme este tiempo para relajarme. Trabajar en un hospital es algo pesado y debido a mis turnos no estaré todas las noches en casa, pero en las que sí, Noah las pasará conmigo y creí que sería más práctico que tenga algo de ropa aquí.

La veo reírse y tratar de disimularlo, la curiosidad me gana y decido preguntarle qué es lo que está pensando.

-Nada...- Está mintiendo, la reto con la mirada y Noah rueda los ojos rendida- Bueno, cuando rompimos creí que esto jamás sucedería.... me imaginaba que con el tiempo cada uno haría una vida distinta y que no tendríamos otra opción más que olvidarnos.

In the dark, you are daylight [S.M]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora