XXVIII

590 65 31
                                    

Dawn

-¿Dónde están?

-¿Recuerdas la cabaña en la que pasamos la noche el verano pasado?- Contesta Troye.

-Sí- Fuimos a ese lugar en más de una ocasión, frunzo el entrecejo sin entender muy bien que hace ahí- ¿Y Noah aceptó ir contigo? Es increíble que lo haya logrado- Troye ríe del otro lado de la línea- ¿No está contigo?

-Lo está.

-¿Entonces?

-La conoces, jamás habría aceptado venir conmigo por las buenas- Claro que lo sé, pero en ese momento realmente no me importó, creí que él podría intentarlo nuevamente. Quizás así Noah dejaría aquella absurda idea de volver con Shawn.

No soporto verlos juntos, nunca lo he hecho, pero después de todo creí que esa historia había quedado en el pasado, no contaba con que se reconciliarían tan rápido. Me molesta la idea y es que nunca he entendido porque Noah siempre consigue todo lo que quiere, ni qué es lo que se supone la hace tan especial.

-¿Cuándo volverán?

-No lo sé, yo regreso a Inglaterra después de esta noche.

-¿Y Noah?

-Está tan drogada que apenas si puede terminar una frase coherente - ¿Qué? Me congelo en mi lugar.

-¿Qué has dicho? ¿Qué le hiciste?

-¿Estás hablando enserio, Dawn? Deja de hacerte la tonta- Murmura con amargura, me levanto de la cama lo más rápido que puedo y empiezo a caminar de un lado a otro, con una inusual sensación nerviosa en la boca del estómago.

- Noah estaba bajo medicación ¿Estás loco?

-Yo no le hice nada, el trabajo fue tuyo y fue brillante, hermosa- Cuando pronuncia el apodo por el que en ocasiones solía llamarme mi mente se reprende por no haberlo notado antes- ¿Quieres verla?- Acepto con las manos temblorosas, sin saber exactamente que va a mostrarme o cómo.

Cuelga y me deja muy confundida, no tarda mucho en enviarme varias fotos. Y lo que veo me deja horrorizada, esto no es lo que yo tenía en mente. En ningún momento se me pasó por la cabeza, sí, estuve de acuerdo en acceder a su petición, pero jamás me explico nada de esto, yo sólo quería provocarle un problema con Shawn y asegurarme de que al ver juntos a Troye y Noah la odiase aún más. Vuelvo a llamarlo con mi corazón latiendo tan rápido que me duele el pecho.

-¿Qué es lo que acabas de enviarme?- Su carcajada resuena en mi oído en cuanto las palabras salen de mi boca.

-¿Qué crees? Tengo a Noah conmigo.

-Pero no me dijiste que ibas a...

-Vamos, Dawn. Deja de fingir que te importa lo que está pasando, tú también querías deshacerte de Noah.

-Pero yo...

-Más te vale quedarte callada, si no quieres ser la siguiente- Mis manos tiemblan y sostienen el teléfono con dificultad- ¿Es lo que querías no? Darle una lección a Shawn, deja de pensarlo y déjame disfrutar mi noche.

Sin esperar mi respuesta me cuelga ¿Qué hago ahora? Me engañó, mi tarea era conocer cada paso que daba Noah y decírselo. Y eso fue lo que hice, lo estuve ayudando desde que regresó. Estuve con Troye antes de ir a buscar a Noah en aquella pradera, él me entregó dos debidas, una de ellas la preferida de Noah y en ese momento no desconfíe de aquella acción, aparentemente inocente. ¡Soy una tonta! El miedo me recorre sólo de pensar en lo que puede pasar, yo estoy involucrada en esto, Troye me hundió sin darme cuenta. El sonido de la puerta me sobresalta, levanta lo mirada y veo a Jessica colgar su mochila en el perchero de la entrada.

-¿Pasa algo malo?

¿Qué hago?

-No, sólo estoy cansada. Me acostaré temprano- Le doy la espalda bajo su atenta mirada de confusión y me meto bajo las cobijas sin molestarme en cambiar mi ropa. Ella se dirige a su cama y empieza a hacer su tarea.

Lo negaré todo, nadie puede probar que yo fui quien le dio la bebida, no hay manera de hacerlo. Trato de dormirme, pero no puedo. Me remuevo inquieta, yo no quería lastimarla, no de esta manera. Cansada de intentar entrar en un sueño profundo reviso mi celular, ha pasado media hora... no sé si podré esperar hasta mañana para saber de Noah.

-¿A dónde vas?

-Tengo que ver a Shawn- Respondo, calzándome lo más rápido que puedo.

-¿Por qué no lo olvidas? Al fin y al cabo nunca conseguiste nada con él.

-¡No es por eso!- Comento molesta, la escucho murmurar algo cuando salgo corriendo. Trato de apresurarme, las consecuencias serán peores para mí si no consigo parar esto. El campus está oscuro y su residencia hoy parece estar más lejos que de costumbre, no sé qué pasará después pero mi conciencia no me permite dejarlo pasar. Llego hasta la entrada, pero el guardia no me permite entrar.

-Saben muy bien que no se permite chicas después de las ocho.

-Tengo que hablar con alguien, por favor- Suplico.

-Búscalo mañana- Contesta bruscamente.

-Es muy importante.

-Mañana- Repite más grosero que antes.

Suspiro llena de frustración, Shawn no contestará una llamada mía, sin embargo, lo intento y compruebo lo que ya sabía. Dios... ¿ahora qué? Me quedo en mi lugar con el celular entre las manos, por favor, que no le haga daño a Noah, en este momento comprendí hasta qué punto a llegado mi envidia, estoy hundida hasta el cuello... una idea llega a mi cabeza y me maldigo por no haberla pensado antes.

-¿Qué pasa, Dawn?

-Harry tienes que ayudarme- Me aterra decirlo.

-¿Noah está contigo? Por favor, dile que surgió un problema y que tardaremos en regresar.

-¡Tienes que volver ahora!- Sollozo, olvidando la compostura.

-¿Qué te pasa?- Responde molesto- Dile a Noah que me llame, quiero hablar con ella.

-¡Está con Troye! ¡Tienes que volver y ayudarme porque de lo contrario no sé lo que sea capaz de hacerle!

-¡¿Qué estás diciendo?! ¡Déjate de bromas tontas!

-¡No estoy mintiendo!- Finalmente decido decir la verdad, aunque eso me condene- ¡Yo la drogué y si no vuelves lo antes posible, Troye va a abusar de ella!

In the dark, you are daylight [S.M]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora