XII

793 72 14
                                    

Shawn

Me sentí furioso conmigo mismo cuando comprendí lo que Noah estaba tramando. Me aparto rápidamente; cómo si su piel quemara, ella también lo hace y ambos dejamos el colchón.

-Estás pasando los límites- Murmuro con la mandíbula tensa-¿Que pretendes hacer?

Sus labios están ligeramente hinchados y tiene el cabello desordenado; sin embargo su expresión se mantiene serena.

-No te molestes- Pronuncia con suavidad-No quería, pero necesitaba hacerlo.

-Así que... ¿Necesitabas comprobar si aún me excitas?

Sus mejillas se ruborizan al instante y hace una mueca.

-Tómalo cómo quieras, yo no te obligué a nada.

Maldita sea, no puede estar hablando enserio. Noah sabe cómo mover las piezas a su favor y al ver tanta insistencia de su parte sólo me hace querer volver a ella, volver a lo que teníamos. Aun así la confianza estaba tan rota que dudo que algún día podamos reconstruirla.

-No me agradan tus juegos- Menciono dándole la espalda y respirando pesadamente- Si quieres tener sexo está bien por mí, pero si piensas dejarme a medias; esto no tiene caso.

Intento sonar indiferente y crudo pero me cuesta demasiado. Noah sonríe ligeramente y mira al piso por unos instantes.

-¿Quieres acostarte con tu enemiga? Pensé que no te agradaba tenerme cerca- Responde con una sonrisa, odio cuando cree que puede manejarme a su antojo- Lamento decirte que el sexo casual no es algo que llame mi atención-Aborrezco sus frases y actitud-Escucha... deberías olvidar lo que dije hace un momento- Ha recobrado su postura y ahora intenta aproximarse a mí- No puedo pedirte que vuelvas conmigo así como no tengo intención de reconquistarte. Sólo quería darle algo de dramatismo al momento-Menciona con una pequeña e irónica sonrisa.

Sus ojos oscuros brillan con intensidad al mismo tiempo que muestran melancolía.

-¿Entonces?

-Déjame mostrarte algo...

¿Algo?

-¿Qué cosa?- Pregunto intrigado.

-Será bueno para ambos- Continua- Y a ti te dará la tranquilidad que estoy segura estás buscando.

Su cuerpo, pequeño en comparación al mío pasea con lentitud por mi habitación y yo necesito respirar al ver su vestido tan ceñido a su cintura. Deseando besarla y tenerla para mí una vez más.

-No entiendo lo que intentas decirme.

-Tengo algo que mostrarte- Repite.

-Noah...- Advierto, más molesto que antes.

-Si te interesa, te espero en el estacionamiento el sábado a las ocho.

La castaña pasa junto a mí con intención de marcharme, mis impulsos actúan antes que la razón y la detengo.

-¿Por qué siempre haces esto?- Susurro en voz baja- ¿Por qué siempre quieres que cumpla tu voluntad?

-No es una obligación- Aclara- Pero si es la última oportunidad que tú y yo tendremos.

Sus labios tiemblan ligeramente e intenta apartar su mirada de la mía, su mano va hacia mi agarre y lo elimina de su brazo. Me exaspera mi debilidad y el hecho de que me estoy muriendo por volver a besarla.

Aún más cuando la veo morderse el labio.

-Es la primera vez que te veo usando ese tono de labial.

In the dark, you are daylight [S.M]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora