In the dark, you are daylight [S.M]

XXV

Noah

Dentro del auto hay un profundo silencio, pero esta vez no experimento aquella incomodidad que estuvo presente hace tan solo unas horas, el recorrido no es largo, sólo unas cuantas cuadras y por muy extraño que parezca... no me siento nerviosa a pesar que sé lo que puede pasar después. Bajo del auto después que Shawn ha abierto la puerta del copiloto. Le sonrío cuando él gira y me mira con curiosidad.

-¿Es este lugar?- Él asiente y yo tomo mi bolso. No me atrevo a tomar su mano y Shawn tampoco por lo que lo sigo con pasos silenciosos, llegamos a la recepción de aquel hotel y permanezco callada mientras él pide una habitación. Mientras paseo de un lado a otro recuerdo a Harry, busco mi celular en el bolso y no lo encuentro.

-Shawn- Voltea y arqueando una ceja me dedica una mirada tranquila- Creo que dejé mi teléfono en el auto... ¿me prestas la llave?

-Te acompaño.

-No, sólo necesito mi celular, quiero llamar a Harry; debe estar muy preocupado por mí- Él me sonríe y extiende la llave.

-Cómo quieras, te espero aquí.

La tomo y me dirijo hacia el estacionamiento, una vez en su auto lo busco y cuando lo encuentro veo en la pantalla que queda muy poca batería.

-Cuando me pediste que te espere... ¿hasta qué hora quieres que lo haga? - Pregunta Harry con sarcasmo a penas contesta mi llamada.

-Cambiaron los planes...

-Mierda Noah, dime ahora mismo donde estás, voy por ti.

-Estoy bien- Musito en voz baja- Tengo algunas cosas que arreglar Harry, te llamaba para no preocuparte... yo te buscaré mañana por la mañana- Lo escucho suspirar del otro lado de la línea.

-Disfruta de tu última noche Noah- No lo dice de una buena manera, más bien suena cómo una extraña advertencia- Porque papá llega mañana y sabes muy bien lo que pasará- Paso saliva con dificultad y asiento cómo si Harry pudiese verme.

-Mi teléfono se apagará pronto y... - No consigo terminar mi oración cuando la llamada se corta.

Lo había olvidado, con todo lo que ha pasado últimamente mi mente se ha mantenido ocupada en otras cosas. Una extraña sensación recorre mi cuerpo cuando pienso en lo que me espera dentro de ese edificio, aunque eso no significa que yo no esté ansiosa por aquella probabilidad. Cuando bajo la fría brisa me golpea las mejillas, es una sensación agradable. Apoyo mi espalda en el coche de Shawn por unos cuantos segundos, disfrutando de este pequeño momento de paz y me pregunto cómo me he metido en tantos problemas últimamente, le di mi palabra al abuelo... algo distinto me estaba esperando a tan solo unas horas de diferencia, si es que yo lo quería de esa manera o bien podría intentar hacer lo mismo aquí, con Shawn.

Aunque el cielo nocturno hace este lugar más oscuro de lo que debería ser, puede observar una extraña sombra a lo lejos, me sobresalto y enfoco mi vista en esa zona para asegurarme de que no fue producto de mi imaginación, pero está vez, veo la sombra a varios metros a mi derecha. Algo asustada me apresuro a regresar a la estancia del hotel.

-¿Qué pasó?- Cuestiona Shawn al verme de regreso.

-Nada...

Puedo notar su nerviosismo debido a la forma en la que mueve su pierna derecha, disimuladamente, pero algo obvio para mí. Le sonrío para tranquilizarlo y le devuelvo la llave de su auto. Shawn me enseña la tarjeta que cumple la función de llave para la habitación y con el corazón latiéndome más rápido de lo normal, avanzamos. El recorrido me pareció demasiado corto y no soy consciente de lo que realmente sucedió en el trayecto. Todo fue demasiado rápido, él cierra con seguro la puerta y cuando voltea, mis manos se posan sobre sus hombros, obligándolo a inclinarse y sin más, lo beso.