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Tú trabajo te gustaba mucho, pero ahora lo hacía más. Nunca pensaste que ser traductora te trajese una oportunidad única.
Tu amor platónico estaba frente a ti, platicaba con su manager, lo cual tú trabajo era traducirles lo que algunas personas japoneses les dirían en vivo junto con otra persona importante.
Tú estabas muy nerviosa, lo tendrías a en frente y además muchas personas más.
Saliste de tus pensamientos porque viste una manos frente a ti. Era él. Estaba presentándose.
—Hola, supe que tú serás nuestra traductora
—H-hola, sí, será un gusto
Él sonrió
—Mucho gusto
—Lo siento — respondiste para después rápidamente darle la mano — igualmente
Él la había dejado así por unos segundos.
—¿Cuál es tu nombre?
—Karla
—Bueno Karla, ¿lista? — escuchaste decir a su manager
Tú asentiste con una leve sonrisa. Tenias que actuar como toda una profesional.
🍂🍂🍂
Todo había salido mal. Te sentías culpable.
Resulta que en el programa que estaban, era un tipo muy famoso americano llamado Adam, su programa lo veían muchas personas.
—¿Qué dijo? — preguntó Adam
—Dijo que fue una experiencia grandiosa y que....
—¿Nada más eso? — cuestionó mientras te interrumpía — pero si no habló mucho
Tú reíste nerviosa
—Sí, pero...
—Vamos, pregúntale — te interrumpió, de nuevo
Hablaste en japonés, de nuevo, te volvieron a responder exactamente lo mismo.
—Fue grandioso y que él fue muy amable — dijiste mientras veías a Keanu
—Preguntales que qué tal fue la experiencia en América
Y lo hiciste
—No me mires a mi, diles a ellos
Estabas nerviosa
—¿Segura que eres traductora? — preguntó con una risa lo cual ocasionó una risa también en el público
Los únicos que no habían reído eran los japoneses y Keanu.
—Bueno, al menos ella sabe más que usted — respondió Keanu, tranquilo, mientras se acomodaba en el sillón
Estabas sentada en un sillón. El programa había acabado y manager de Keanu te dijo que esperaras ahí. Sentías que venía lo peor.
—De verdad lo siento, perdón si arruiné todo — comentaste
—Descuide, usted hizo su trabajo — oíste a manager
—Te lo dije Ted, éste programa siempre maltratan a la gente — dijo Keanu para después voltearse a ver — Perdón Karla, siento que hayas tenido que pasar por eso
—De verdad lo siento
—No te disculpes, en realidad creo que hiciste un gran trabajo
—Gracias — suspiraste
—Tendremos una comida después de ésto y lo menos que puedo hacer es invitarte a comer — sonrió — ¿que dices? ¿aceptas?
