Tercera generación - Harry Potter ❤ Un accidente...Una oportunidad

Rose Weasley

Para evitar más problemas los chicos se dispersaron antes de ingresar al Gran comedor, cada uno dirigiéndose a su mesa, por sugerencia de la rubia Ravenclaw, Harry, Hermione, Neville y los niños se fueron a sentar a la mesa de las águilas, querían evitar cualquier escándalo.

-continuemos con las presentaciones- ordenó Dumbledore, empleando un "sonurus", al ver que todos estaban comentando entre ellos y no prestaban atención.

De la mesa de la tercera generación se levantó un encapuchado, por su caminar notaron que era una chica, la encapuchada, camino como si estuviese en una pasarela, contorneando las caderas sensualmente.

Al llegar al escenario, se quitó la capa muy sensual, develando a una guapa pelirroja, de ojos azules, cabello en bucles y ligeras pecas, apenas visibles en la nariz, poseía un cuerpo exuberante, si fuese más alta seria una perfecta modelo.

Hola Hogwarts viejo- hablo con una voz chillona (era demasiado buena, para ser verdad, pensaron varios chicos) - soy la más hermosa y perfecta... Rose Weasley....

-nombre completo querida- comento una voz femenina con algo de maldad, desde la mesa de la tercera generación, a lo que la pelirroja bufo, fulminando con la mirada hacia donde se encontraba esa "entrometida".

-Soy Roseboud Heather Weasley, pero prefiero que me llamen Rose- dijo con una falsa sonrisa "amable"- tengo 16 años- luego vio a la mesa de los leones, donde su padre y tíos se debatian, por conocer la identidad de su progenitor.

Antes de que hablará, su abuela la interrumpió -¿Quien es tu padre cariño?- pregunto Molly con una sonrisa maternal.

-Abuela- le sonrió falsamente- Mi padre es el mejor, único y perfecto, Ron Weasley- el nombrado estaba de lo más contento, su primogénita, era demasiado parecida a el, tenía el cabello ondeado de Hermione y las pecas en la nariz, casi imperceptibles, le sonrió orgullosamente a su hija, instandola a continuar.

-Estoy en 6to curso, pertenezco orgullosamente a la casa de... suspenso...¡Gryfindor!- exclamó la pelirroja, la casa de los leones aplaudieron a su futura integrante, pero nadie más que su padre, quien incluso se paro de su lugar.

-¡Esa es mi hija!- vitoreo emocionado el pelirrojo - digna leona igual que sus padres- agregó con orgullo.

La pelirroja sonrio- Soy una digna Weasley Papi, no como otros- comento mirando de reojo a sus primos, los cuales prefirieron ignorar la provocación- bueno mis materias favoritas son Aritmancia, Runas antiguas y adivinación, soy prefecta y pretendo ser premio anual- agregó con autosuficiencia.

-¿Alguna pregunta?- interrogó Rose con una sonrisa de "mosca muerta"

Varias personas levantaron la mano, Rose le dio la palabra a su tía favorita Ginny.

-Dime tía Ginny- al fin mostró una sonrisa sincera la muchacha.

-Rose cariño- sonrió Ginevra, esta niña si le caía bien, no como la hijas de la francesa esa-¿quienes son tus padrinos?- pregunto.

-Mis padrinos son mi hermosa tía Ginny y su esposo.

-Gracias hermanito- chillo la pelirroja lanzándose a su hermano- Gracias Hermione, aunque sigo enfada contigo- dijo esto último haciendo un mohín y de mala gana.

-¿Quien mejor que tu hermanita?- respondió el pelirrojo con una sonrisa, Hermione prefirió no responder, no estaba segura que esa muchacha fuera su hija.

-Sabes Hermione no responder cuando se te agradece, es de mala educación- soltó Ginny con maldad- cierto tus costumbres muggles son diferentes- siseo cual víbora ponsoñosa- pero no te preocupes cuñadita yo te moldeare por el buen camino- termino sonriendo con malicia.