Capítulo 2: Instrucción 104

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TRES AÑOS DESPUÉS

Hace más de un siglo la humanidad se enfrentó a un nuevo enemigo.
Pronto, la humanidad se encontró al borde de la extinción, pero estos construyeron un muro para poder sobrevivir: el muro Maria, el muro Rose y el muro Sina.
Estos los han mantenido a salvo hasta el día de hoy.

Ayumi se encontraba en una larga fila al igual que muchos chicos y chicas que, como ella, querían inscribirse para formar parte del cuerpo de exploración, de la policía militar o de las tropas de guarnición.
La rubia observó en silencio a los jóvenes que habían a su alrededor y lo cierto es que nadie le llamaba exageradamente la atención.
Entonces, uno de los instructores se posicionó delante de todos los muchachos que habían allí presentes para empezar a dar su discurso.

—A partir de este momento sois miembros de la instrucción 104 —anunció el instructor jefe y Ayumi se llenó de orgullo. Desde que hubo la caída de Shiganshina, estuvo esperando a que llegara ese día—. Por desgracia para vosotros; yo, Keith Shadis, estoy al mando de esta unidad básica. Todos los que estáis aquí no sois más que ganado esperando a que se os coman los titanes —hizo una pequeña pausa—. Durante estos tres años os entrenaré para que dejéis de ser lo inútiles que sois y os enseñaré como enfrentaros a los titanes cara a cara dentro de tres años. ¿Queréis seguir siendo así de inútiles o queréis ser los muros que defiendan a la humanidad de los titanes? La elección está en vuestras manos.

Dicho eso, Shadis fue pasando por las filas tratando de intimidar a los nuevos cadetes y se detuvo a hablar con algunos para ponerlos a prueba. Con el primero que habló fue con un chico rubio, Armin Arlert, el cual se puso tan nervioso que casi no pudo ni hablar. El segundo con el que habló fue con un chico que llevaba el pelo rapado, Connie Springer, el cual también parecía nervioso, pero consiguió apañárselas mejor para responder que Arlert. El tercero que tuvo la mala suerte de ser preguntado por Shadis, fue Jean Kirstein, un chico de pelo castaño el cual, parecía bastante sereno al responder, pero finalmente terminó poniéndose nervioso igual que el resto ya que el instructor jefe hacia muy bien su trabajo. Y, por último, le preguntó a una chica de pelo castaño llamada Sasha Brouse, la cual se estaba comiendo una patata en medio de la instrucción y fue más regañada que otra cosa.
Pero entonces, cuando Ayumi creía que Shadis no le preguntaría a nadie más, este se acercó a ella con paso decidido.

—¿Tú quién eres? —le preguntó el instructor a la rubia.

—¡Soy Ayumi Smith, señor! —respondió ella con orgullo—. ¡Vengo del distrito de Shiganshina!

Cuando Erwin la rescató después de que toda su familia muriera, la adoptó como su hija y le dio su apellido. La cuidó y protegió como le prometió y eso hizo que entre la rubia y el comandante se formara una relación muy estrecha como padre e hija; aunque Ayumi siguiera recordando cómo si fuera ayer a su familia de sangre. Sobre todo a su hermano mayor.

—¿Y por qué estás aquí, Ayumi Smith? —siguió preguntándole Shadis intrigado.

—¡Estoy aquí para unirme al cuerpo de exploración! —le respondió la rubia y sintió como todas las miradas sorprendidas de sus nuevos compañeros se cernían en ella.

—Eres la hija del comandante Erwin, ¿cierto?

—¡Si, señor!

—Interesante —comentó el instructor jefe para él y se acercó al oído de Ayumi para que el resto no pudiera escuchar lo que iba a decirle a continuación—. Pues que sepas que no te lo pondré nada fácil, Ayumi Smith.

Shadis se separó de la rubia y esta le miró con el ceño fruncido.
No quería que no se la tomaran en serio y que tampoco se lo pusieran todo más fácil solo por ser la hija de Erwin Smith, así que se esforzaria como la que más para ser la primera de su promoción y así demostrarles a todos que sus méritos son por ella misma y no por qué se los han puesto en bandeja.
Además, antes de entrar en la instrucción, Ayumi se hizo una promesa a si misma y era que acabaria con todos los titanes de este mundo y solo se permitiría morir cuando lo hubiera cumplido.

BORN FOR THIS | Ataque a los titanesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora