Empecemos con 32 razones.

14.

Llevaba unas semanas estupendas junto a Gustavo. Aparte de ser un buen novio, aunque no tenga con quien compararlo, aún así pienso que es excelente, es un buen amigo. Somos confidentes, lo cual ponía un poco celoso a Fernando.

Era un día viernes y después de ir a la librería a comprarme un libro, moría de hambre.

- Tengo hambre. -Le digo a Gustavo, al mismo tiempo que el sonríe.-
- Siempre tienes hambre, Florencia.
- Lo siento, es inevitable. -Lo miro con ternura y el me da un pequeño beso.-
- Mira, ahí está Papa Johns. -Me indica el local.- Oh, está lleno.
- Entremos, no importa, ya me ilusionaste.

Entramos al local y veo anuncios de que hay descuentos. Busco una mesa vacía y Gustavo hace la fila.

*Whatsapp*

Novio: es una fila enorme, ya extraño tu mano junto a la mía, ¿es normal?
Novia: también te quiero a mi lado, pero la pizza es mas fuerte :(
Novio: eeeeh! Va avanzando 😁 la agrando?
Novia: me extraña, eso no se pregunta, jamás se va a perder :D
Novio: lo sé bebe ❤️
Novia: muaaaack 😘❤️ eres el mejor, ahora que lo veo, es una fila enorme
Novio: todo por ti :)

Miro hacia alrededor y veo que hay familias esperando, se veían papás y mamás en la fila. Sonrío, ya que Gustavo mira mal, a cada quien se le olvida un ingrediente o cambia su decisión a último minuto. Muevo un poco mi silla, al sentir que se sientan en la mesa de atrás y una voz me distrae.

- ¿Florencia?

Levanto mi mirada y no lo puedo creer. Casualidades que no me alegran mucho, ejemplo número 1: que Nicolás esté en frente mio.

- Oh, Hola. -Le digo algo cortante.-
- Tanto tiempo sin verte. -Sonríe y siento algo extraño.- Éste es mi hermano, Leonardo. -Me presenta al chico que está detrás de él y yo le sonrío educadamente.- Ella es una ex alumna. -Su hermano asiente y se sienta.- Y, ¿con quien andas? -Me pregunta.-
- Con mi novio.
- Ah.

Su cara cambia radicalmente, lo que antes era una sonrisa, ahora es una mueca.

- ¿Te ha ido bien ?
- Bien, gracias.

Ambos nos miramos y sé que pasan las mismas imágenes por nuestras mentes, es algo incomodo, pero al mismo tiempo, no quitamos la mirada del uno del otro.

- Florencia, la pizza está lista.

Quito la mirada de Nicolás y veo que Gustavo deja la caja de pizza sobre la mesa, sin dejar de mirar a Nicolás.

- Supongo que él, es el novio. -Nicolás sonríe forzado y Gustavo alza una ceja.-
- Lo soy. -Responde Gustavo.- ¿Y tú eres?
- Nicolás, un ex profesor de Florencia.

Nicolás estira la mano para saludarlo, pero Gustavo lo mira con una seriedad perturbadora, ignorando su mano.

- Bueno, los dejo. -Nicolás se va a sentar, pero Gustavo lo detiene.-
- Espera un poco.

Nicolás se voltea y mi sorpresa es máxima, cuando Gustavo le da una paliza en la cara de mi ex profesor.

- Ahora si, vámonos. -Gustavo toma mi mano y salimos del local ante la mirada atónita de todos.-

Al salir del local, suelto su mano y lo miro esperando su explicación.

- Me puedes explicar, ¿qué fue eso, de ahí dentro?
- Imbecil, cuando supe que era él, no dude ni un segundo en hacerlo pedazos. Tenía que hacerlo.
- No, no tenias.
- ¿Lo estás defendiendo? -Me mira, aún enojado.-
- No lo estoy defendiendo, pero creo que el golpe estaba demás, aparte, solo estaba hablando conmigo, yo solo le respondía por educación.
- Tú no te das cuenta la mirada que él te daba, y tampoco sabes lo que él provoca en mi. -Gustavo se acerca y toma mi rostro.- Cualquier persona, en la vida, que te haya hecho sufrir, se merece mi enojo. Por su culpa quedaste tan mal, no me digas que me aguante.
- Lo que sea...
- No te enojes, por favor.
- No estoy enojada, solo, que aún estoy sorprendida.
- No olvides que te quiero. -Se acerca y reparte pequeños besos por mi rostro.-
- No lo olvido.
- La pizza se enfriará, vamos a casa.
- De acuerdo.